7. UNA IMAGEN SUPERRETOCADA.

Sé que estos capítulos —dedicados al informe de los científicos Smith y Callagan— pueden resultar áridos y difíciles de comprender. A mí, personalmente, me ha costado bastante trabajo asimilarlos. No obstante, considero fundamental su inclusión íntegra, a fin de disponer de una panorámica completa y real sobre la enigmática tilma del siglo XVI.

En su apartado número cuatro, los norteamericanos se refieren al «análisis infrarrojo de la pintura».

Y dicen textualmente sobre los rayos que rodean el cuerpo de la Señora, sobre las cuarenta y seis estrellas que aparecen en su manto y sobre la fimbria[38] del citado manto azul.