EVE MIRO LAS CAJAS QUE CUBRIAN la mesa en la sala de conferencias que ella habia ordenado, y sintio que se avecinaba un dolor de cabeza.
"Okay, aqui viene el trabajo manual. Vamos a ir a traves de los discos y copias impresas, memorandums, libros de apuntes, libros de citas, todo, iremos hacia atras—desde ahora—a dos semanas atras. Por las declaraciones de los testigos, fue alrededor de dos semanas, o diez dias, cuando la gente empezo a notar que algo iba mal con Copperfield, y solo dos semanas en que hubo la transmision de Copperfield a Byson diciendole que ella tenia algo que necesitaba mostrarle a el."
"Iremos a traves de los nombres, las notas—eventualmente," dijo Peabody. "Pero y las cuentas? Probablemente deberiamos usar a un contador en esto."
"Probablemente podríamos," concordó Eve. "Pero por ahora somos tu y yo. Buscaremos repeticiones, un archivo o cuenta al que ella regreso repetidamente durante ese margen de tiempo. Cualquiera de ellos que fueran copiados a su unidad casera, o cualquier informacion que ella le copio a Byson."
Eve le dio una triste mirada al AutoChef de la sala de conferencias, sabiendo que este no estaba cargado con su alijo personal de cafe.
"Cualquier mencion a reuniones o citas con los de arriba," continuo ella. "Citas con los representantes de las cuentas."
"Va a tardar un tiempo," comento Peabody. "Tal vez podria pedir algunos sandwiches."
"Lo que sea. La asistente de Copperfield dijo que ella se registro despues de las horas de trabajo un par de veces recientemente. Busquemos los archivos o las cuentas a las que ella entraba despues de las horas de oficina."
Ella se volteo cuando se abrio la puerta.
"Alguna cosa?" le pregunto Baxter.
"Parece que ella encontro algo mal en el trabajo, estaba investigandolo por su cuenta, y compartio su preocupacion con su novio. Estamos excavando en eso."
"Quieren otra pala?"
Eve metio las manos a los bolsillos. "Que tienes pendiente?"
"Unas pocas cosas, mas que nada trabajo de campo y por enlace. Nada que el chico no pueda manejar," agrego el, refieriendose a su aprendiz, Trueheart. "Mira, el muchacho me dira si me necesita en cualquier cosa en que se necesite accion. Tendre algun tiempo personal. Puedo tomarlo para trabajar en esto."
"Tu trabajas en esto, pero lo haces dentro del horario. Cualquier cosa de tu trabajo que se presente, te dedicas a eso."
"No hay problema".
Cuando su comunicador sono, ella miro la lectura. "Peabody, informa a Baxter de todo. Es de la oficina de Whitney. Necesito darle una actualizacion del caso."
La hicieron pasar, y encontro al Comandante Whitney detras de su escritorio. Ella penso que se le veia cansado, tal vez agobiado seria una mejor palabra. Sus grandes hombros soportaban un peso considerable.
El gris salpicaba generosamente el cabello oscuro que estaba cortado al ras alrededor de su rostro color cafe. El la observo, sin decir nada, mientras ella lo ponia en conocimiento de los movimientos y detalles de la investigacion.
"La informacion que usted confisco esta asegurada?"
"Si, senior. Los detectives Peabody y Baxter estan empezando la busqueda. El Capitan Feeney esta supervisando el trabajo electronico, usando al Detective McNab."
"Otras caminos?"
"Senior?"
"Explorar si esto es un negocio personal. Un ex celoso?"
"No he eliminado esa posibilidad, Comandante, pero nada apunta a ello. Mientras que todo apunta a que este doble asesinato fue motivado por algo que la victima femenina descubrio en su sitio de trabajo."
El asintio. "Usted entiende la sensibilidad de esta informacion que ahora se encuentra en posesion de este departamento?"
"Si, senior."
Sus ojos se mantuvieron en los de ella. "Ha considerado la sensibilidad de que usted, personalmente, tenga acceso a esa informacion?"
"Personalmente, Comandante?"
"Usted esta casada con un poderoso hombre de negocios quien tiene intereses en muchas areas de la industria y las finanzas—intereses que con toda seguridad estaran en competencia o conflicto con algunas de las partes cuya informacion usted sabe que tiene en su posesion."
Algo ardiente formo una pequenia pelota en el estomago de Eve. "Yo tengo evidencia potencial en mi posesion."
"No sea ingenua, Dallas."
"Nunca lo fui. Soy la investigadora primaria en dos asesinatos, buscando evidencia del motivo y la culpabilidad. No estoy buscando y no tengo interes en, informacion interna de los competidores de negocios de mi esposo."
"Hay preocupacion de que si esta informacion llegara a las manos de el, podria ser usada para su beneficio contra esos competidores."
"La pequenia bola ardiente se expandio. "El no necesita mi ayuda para competir en los negocios. Y el no caminaria sobre dos muertos para hacer algunos dolares extras. Respetuosamente, senior"—a pesar de que su tono habia tomado un filo que nada tenia que ver con el respeto—"el implicar otra cosa es un insulto a mi y a el."
"Esto no es cuestion de unos cuantos dolares extras, pero si el potencial de millones. Quizas mas que millones. Y si, es insultante. Tambien es necesario que sea entendido. Si la informacion que ahora esta a su disposicion pudiera ser usada de cualquier manera que no este relacionada con su investigacion, usted, esta oficina, este departamento, seremos responsables."
"Mi comprension de mi responsabilidad con la victima, con la gente de Nueva York, y con este departamento es y siempre ha sido cristalina." Ahora ya no era una pelota en su estomago, sino un flujo. Como lava. "Si usted tiene cualquier duda de mi comprension de esa responsabilidad o mi habilidad para cumplirla, usted no solo esta obligado a retirarme de esta investigacion, sino que usted deberia estar pidiendome la placa."
"Usted quiere enojarse?, enojese. Ahora, Teniente, regrese a su trabajo."
Ella giro sobre sus talones, luchando por dominar esa furia, controlarla. Pero no pudo bloquearla por completo. Ella miro hacia atras mientras abria la puerta de un tiron. "Yo no soy la maldita secuaz de Roarke," espeto, y cerro la puerta tras ella.
Llevo el mal genio con ella de regreso a Homicidios y a la sala de conferencias. Una mirada al rostro de Eve hizo que cualquier comentario brillante que Peabody iba a hacer se marchitara y muriera.
"Senior," dijo ella en su lugar, "Baxter esta tomando la informacion de Byson. Hasta el momento no hemos encontrado nada transferido a sus registros por Copperfield."
"Seguimos buscando."
"En el frente electronico, McNab reporta que han habido archivos eliminados del la unidad de oficina de Copperfield."
"El Detective McNab ahora te reporta a ti? Hubo algun cambio en la jefatura durante los ultimos veinte minutos?"
Conociendo ese tono, Peabody mantuvo el suyo ecuanime. "El Detective McNab creyo que nosotras estabamos juntas, senior, aqui o en el campo. Como yo tenia entendido que usted estaba con el Comandante, tome su reporte, y ahora se lo estoy reportando."
"Estoy en EDD."
Baxter y Peabody intercambiaron una volteada de ojos a sus espaldas. Y afortunadamente para su propio bien, tuvieron los instintos lo suficientemente rapidos para enfocar esos ojos en el trabajo cuando ella volteo.
"Nadie entra a esta habitacion o se aproxima a esos archivos sin mi autorizacion. Esta claro?"
"Si, senior!"
Cuando la puerta fue tirada, Peabody dejo salir un largo y silbante aliento. "Whitney puso un verdadero insecto en su trasero."
Eve entro como una tromba a EDD y fue hacia el laboratorio de computadoras para encontrar a McNab. El estaba en cuclillas sobre la unidad de oficina de Copperfield. Un puniado de otros detectives y tecnicos trabajaban en varias computadoras en la misma area.
"Tienes que usar un cubiculo privado en todo momento cuando trabajes en este caso."
"Huh? Que?" El se quito unos auriculares.
"Este caso es ahora bandera Azul. Cubiculo privado, reportes verbales. Base Necesito-saber."
"Oooo-kay." El retrocedio, solo un poco, como si sintiera el calor saliendo de ella y tuviera miedo de quemarse. "He conseguido algunas eliminaciones. Estaban—"
"Cubiculo privado," espeto ella. "Ahora."
"Si, senior. Me va a tomar unos minutos el organizarlo."
"Entonces empieza." Ella salio en tromba, se desvio y entro a la oficina de Feeney. El estaba sentado a su escritorio, ametrallando su teclado mientras tarareaba un tono.
De vez en cuando murmuraba, "Casi te tengo, tu, pequenio bastardo."
"Tus detectives tienen algun problema en entender ordenes directas, o la cadena de comando?" demando ella.
El maldijo, miro hacia arriba. El vio lo que Peabody habia visto en su cara. Tirandose hacia atras, dirigio su barbilla a la puerta. "Quieres cerrarla?"
Ella la tiro. "Cuando yo soy primaria, los hombres asignados al equipo, ya sea que sean de EDD o de Homicidios, me reportan a mi."
"Tienes alguna queja de alguno de mis chicos?" Todos eran sus chicos para Feeney, sin importar sus cromosomas.
Esto la contuvo justo antes de que escupiera. Que es lo que estaba haciendo? Chismoseando sobre nada solo porque estaba molesta. "Tengo un caso sensitivo," empezo ella.
"Si, se sobre este. Mis chicos me reportan, y yo registre los electronicos como lo solicitaste. Y?"
"Sensitivo por mucho dinero. Te figuras que Roarke treparia por encima de mis dos victimas, y usaria esa informacion sobre este dinero para deshacerse de un competidor? Te puedes figurar que el usara mi investigacion o cualquier informacion que yo compartiera con el sobre eso para su ganancia personal?"
"De que mierda estas hablando? McNab hizo algun comentario idiota?"
"No. Whitney hizo una declaracion directa."
Feeney fruncio los labios, y entonces solto el aliento. Despues paso los dedos por su marania de pelo gris y pelirrojo. "Tengo un poco del cafe que me diste por Navidad. Quieres un poco?"
"No. No," ella repitio y camino hacia su ventana. "Maldita sea, Feeney. Si el me quiere abofetear por algo que hice o no hice en el trabajo, algo que mi escuadron hizo o no hizo, eso esta bien. Pero implicar que Roarke pudiera usarme, que yo lo permitiria, eso se paso de la linea."
"Toma algunas almendras."
Ella solo sacudio la cabeza.
Feeney hundio sus dedos en el tazon de nueces confitadas sobre su escritorio. " "Quieres que te de mi opinion?"
"Supongo que si quiero. Irrumpo aqui cuando estas ocupado, debo de necesitar tu opinion."
"Entonces te la dare. Yo espero que algunos de estos mandamases—y los abogados que los aman—hayan estado pisandose los pies, batiendo sus mandibulas. Quejandose al alcalde, al jefe. El alcalde y el jefe se lo dicen a Whitney. El tiene que tomar la linea del departamento, darte la advertencia. Quieres mi opinion sobre su linea personal?"
"Supongo que si."
"Lo conozo hace bastante tiempo. Si el tuviera alguna preocupacion genuina en esa area, el te sacaria del caso. Punto. Haciendo eso, el se cubriria el trasero. En vez de eso, el te lo dice, y deja su trasero colgando alla afuera."
"Tal vez."
"Dallas?" El espero hasta que ella se volteo. "Tu tienes alguna preocupacion sobre Roarke al respecto?"
"No. Maldita sea, no."
"Piensas que yo la tengo, o que cualquier miembro del equipo que esta trabajando en este momento en el caso las tiene?"
La tension en su pecho se aflojo un poco. "No. Pero yo tengo que decirselo a Roarke—aun si yo no comparto ni un byte de informacion con el, yo tengo que decirselo. Si tu piensas que yo estaba molesta cuando vine aqui, dejame decirte, eso fue un dia soleado en la playa."
El empujo el tazon de nueces en su direccion, y por un momento hubo un toque de diversion en su cara. "El matrimonio es un campo minado."
"Una maldita A." Pero ella se relajo un poco, lo suficiente para sentarse en la esquina del escritorio y coger algunas nueces. "Lo siento."
"Olvidalo. Nosotros volvemos a esos caminos, tambien."
"No se cuanto tienes en tu plato, pero si tienes lugar para mas seguramente podria usarte en esto."
"Probablemente puedo hacer un espacio. A mi me gusta el plato lleno.."
"Gracias, por todo."
Con su mal genio apaciguado, Eve regreso a la sala de conferencias, en donde encontro a Peabody y a Baxter sumergidos en la busqueda y en una pila montaniosa de sandwiches. Cuando ella entro, Baxter mantuvo los ojos en su pantalla, pero Peabody se arriesgo a levantar la vista. Obviamente animada por lo que vio en la cara de su socia, ella senialo con la cabeza hacia la pila de comida.
"Pense que algo de comida nos mantendria mientras trabajamos."
"Bien." Asi como su nivel de enojo estaba bajo, tambien lo estaba su apetito. Eve escogio una pila de discos y tomo una computadora. Momentos despues una taza de cafe aparecio al lado de su codo.
"Ah, tambien me figure que querrias tu propia mezcla mientras estamos en esto."
"Gracias. Imagino que te figuraste que compartiria esa mezcla y cargaste el AutoChef suponiendo eso."
"Seria esa una suposicion incorrecta?" Peabody sonrio triunfante.
"Mi suposicion seria que tu ya estas sorbiendolo."
"Baxter sorbe, Yo, sin embargo, lo tomo delicadamente."
Eve contuvo el aliento. "Escuchen. El comandante queria mas que una actualizacion. El tenia algunas preocupaciones—o algun idiota tiene preocupaciones—de que Roarke pueda acceder a algo de esta informacion, a traves de mi. Y luego usarla para rebasar a sus competidores."
"Ni preguntarse por que estabas lista para patear el primer trasero disponible," comento Peabody.
"Bueno." Baxter hizo una pausa lo suficientemente larga para rascarse una mejilla. "Yo supondria que Whitney dijo lo que tenia que decir, aun sabiendo que era mierda inflamable. Debe de sorber el ser bronce."
Lo que le quedaba a Eve de mal genio simplemente se desvanecio. "Debe de ser. Vamos a excarvar mas en este pantano y a encontrar algo del maldito oro."
Ellos excarvaron por horas. Los archivos de informacion de Natalie Copperfield eran organizados y eficientes, y no les dieron nada.
"McNab dijo que habian habido eliminaciones." Eve se empujo hacia atras. "He conseguido lo que podria interpretarse como tiempo perdido, o eliminaciones en los archivos. Pequenios huecos, si los miran de esa manera. Aqui tienen a una seria abeja obrera."
"Me hace sentir como una vaga," concordo Peabody, y luego dio un golpe. "Lo cual, por supuesto, no soy. Soy una detective, y un dedicado miembro de la NYPSD entrenada por la mejor en el departamento."
"Besa culos," dijo Baxter con una mueca.
"Tengo tres estrellas doradas por besar culos."
"Todo eso es realmente facinante," dijo Eve secamente. "Pero mi punto es que Copperfield guardo registros superiores de su trabajo, de su tiempo. Y estoy viendo lagunas. Un patron de lagunas que empiezan hace cinco o seis meses atras."
"Yo consegui algo de eso," concordo Peabody. "Podria ser solo la planeacion de su boda. Un pequenio asunto personal que se filtro en su lugar de trabajo. Le sucede al mejor de nosotros."
"Tal vez. O quizas es una cuenta que le pasaron a ella en ese punto. Esas lagunas empiezan a ensancharse diez dias antes de su muerte. Cerca del tiempo en que nosotros creemos que encontro algo cuestionable."
"Si su asesino elimino todos esos archivos de clientes," empezo Baxter, "el o ella tenia acceso a la unidad de trabajo de Copperfield, a sus archivos. No me parece que un cliente pudiera ser capaz de acceder a ellos."
"Podria piratear por control remoto, o pagar a alguien con las habilidades necesarias para hacerlo," contesto Eve. "O podria ser alguien en el interior. Podria ser ambas cosas. Lo que no estamos encontrando en sus archivos es evidencia de que habia algo que su asesino no queria que fuera encontrado ahi."
"Su superior podria conocer todas sus cuentas," dijo Peabody.
"Si. Voy a ir por alla, tendre otra platica con ella antes de llevarme esto a casa. Peabody, necesito que toda esta informacion este asegurada. Baxter, si quieres hacer un poco de trabajo de campo, podrias chequear con la hermana de la victima. Mira si Copperfield menciono que consiguio una nueva cuenta dentro de los ultimos seis meses. Esta podria ser una muy grande."
"Lo tengo."
"Chequea con Trueheart y tus casos activos. Si necesitas utilizar tiempo extra, me lo dices. Lo aclarare."
"Lo aprecio."
"Peabody, si McNab tiene cualquier cosa, quiero que me llames. Cuando sea, donde sea. Estoy en el campo."
La ferocidad del trafico le recordo a Eve la hora que era. La firma de contadores estaria cerrada. Ella saco la direccion de la casa de Cara Greene de su libro de apuntes, y trato de llamarla por el enlace. Cuando la transfirieron al correo de voz, le dejo un mensaje para que la contactara a la brevedad posible. Por si Greene estaba haciendo tiempo extra, Eve trato de llamar al enlace de la oficina, y dejo el mismo mensaje.
No valia la pena ir a golpear la puerta de un apartamento vacio, decidio ella. Ella esperaria por la devolucion de su llamada, o cazaria a Greene en la maniana.
Ahora ella tenia que encontrar el mejor modo de hablar con Roarke.
El mantener la boca cerrada simplemente no era una opcion. Aun si ella queria jugar asi, el sentiria algo. El tipo tenia los sentidos de un puto halcon. Y evadir solo llevaria, incuestionablemente, a mentir. El mentir podria ponerla mal a ella.
Maldita sea si ella queria aguantar el calor por eso.
Algo directo era probablemente la mejor manera, decidio ella. Dejarlo a el explotar, escupir, y bullir por el insulto. El tenia derecho.
El problema era que el iba a explotar, escupir y bullir encima de ella. De manera que ella tomaria el camino alto, seria la buena esposa y aguantar el golpe. Entonces el tendria que disculparse, tal vez incluso arrastrarse un poco.
Cuan malo podria ser eso?
Ella se estaba sintiendo bastante estable con respecto a todo el asunto cuando entro por los portones del hogar.
Considerando varias aperturas, ella corrio a traves del amargo frio hacia el calor. La luz dorada, la escencia del aire ligeramente especiada fue momentaneamente malograda por la silueta en negro que era Summerset.
"No me habia dado cuenta de que estaba tomandose unos dias libres," empezo el, mientras el gato dejaba su sitio a su lado para saltar hacia Eve.
"De que esta hablando?"
"Como usted ha regresado a casa sin estar ensangrentada, con ninguna de sus ropas rotas, asumo que ha pasado el dia en alguna busqueda ociosa."
"El dia todavia no ha terminado." Ella tiro su abrigo sobre el poste. "Yo podria terminarlo persiguiendo su trasero huesudo, y usted seria el ensangrentado y roto."
Ella levanto al rechoncho gato y se lo llevo escaleras arriba. El ronrroneo como un helicoptero mientras ella le rascaba ociosamente las orejas, y dejandolo en el sofa del dormitorio, ella chequeo el paradero de Roarke en el escaner de la casa.
"En donde esta Roarke?"
Roarke todavia no habia regresado a casa esa tarde.
Se compro algo de tiempo, decidio ella, y se quito las ropas para cambiarse a una ropa para entrenamiento. La mejor manera de aclararse la mente y ponerse a tono, penso, era una buena sesion sudorosa en el gimnasio.
Para evitar a Summerset, ella tomo el elevador hacia abajo, entonces programo en la cardio-maquina una subida a la colina. Ella hizo unos fuertes veinte minutos hasta que sus piernas sintieron la quemada, y cambio a la carrera a toda maquina.
Ella estaba en las series de repeticion para la parte superior del cuerpo en la maquina de pesas cuando Roarke entro.
"Dia largo?" dijo ella, soltando el aire.
"Un poco." El se inclino, toco sus labios con los de ella. "Estas empezando o terminando?"
"Terminando. Tengo suficiente en mi para entrenar en boxeo si estas en busca de un entrenamiento."
"Tuve el mio esta maniana. Estoy en busca de una gran copa de vino y una comida."
Ella le estudio la cara. "Entonces, fue un largo dia. Problemas?"
"Irritaciones, mas que nada, y casi eliminadas. Pero ahora que pienso en eso, no me importaria una nadada antes del vino. Si es que tengo algo de compania."
"Seguro." Ella recogio una toalla, se la paso por la cara. Pasar por todo o dejarlo de lado hasta que el se hubiera suavizado? Dificil de saber, penso ella, pero le parecia equivocado dejar que el se suavice y entonces golpearlo con un punietazo.
"Ah, hay una cosa." Para darse a si misma otro momento, ella camino hacia la mini-nevera y saco una botella de agua. "El doble asesinato que estoy investigando. El elemento de la firma de contadores."
"Conseguiste tu autorizacion?"
"Si. Eso es parte de la cosa."
"Y la cosa es?"
Ella se tenso interiormente, como lo haria antes de sumergirse en una piscina muy fria. "Hay una preocupacion en algunos niveles con respecto a la sensibilidad de la informacion de los archivos que estan ahora en posesion de la NYPSD, y la primaria—que soy yo, quien esta casada contigo."
"Hay una duda, en algunos niveles, sobre tu habilidad para manejar informacion sensitiva?" Su voz era perfectamente placida, incluso amable. Y tenia temblando la antena de ella.
"Hay una duda, en algunos niveles, acerca de la etica, supongo, de que tu tengas una proximidad muy cercana a informacion financiera privada, perteneciente a actuales o futuros competidores de negocios. Yo quiero que sepas que yo—"
"De manera que la suposicion," el interrumpio suavemente, "es que yo podria usar a mi esposa, y sus investigaciones en un doble asesinato y tortura, para no solo saber la situacion financiera de mis competidores—actuales o futuros—sino que podria usar esa informacion para mi propia ganancia? Lo entendi bien?"
"Escucha, Roarke—"
"No he terminado." El azoto las palabras, un rapido latigazo. "Se les ocurrio a cualquiera de estos niveles que yo no necesito usar a mi esposa o su investigacion para sacarle la mierda a un competidor, en un sentido de negocios, podria escoger hacer eso. Y que yo de alguna manera me las arregle para competir y tener exito por mi mismo antes de conocer a la primaria de este caso?"
Ella odiaba cuando el usaba 'mi esposa' en ese tono. Como si ella fuera una de sus lujosas unidades de munieca. El mal genio burbujeo en su garganta y fue muy dificil tragarselo. "Yo no puedo hablar de lo que ocurre u ocurrio alli, pero—"
"Maldita sea, Eve. Piensas que yo podria usarte por el puto dinero?"
"Ni por un solo segundo. Mirame. Ni por un solo segundo."
"Arrastrarme sobre los cuerpos sangrantes, arriesgar tu reputacion y la mia, llegar a eso, por algun negocio de mierda?"
"Yo solo dije que no habia—"
"Escuche lo que dijiste," el espeto, y sus ojos eran letales. "Pero veo que para algunos es 'una vez ladron.' He trabajado lado a lado con la NYPSD, dandole un tiempo considerable, tomando riesgos fisicos considerables, y ahora ellos dudan de mi integridad en esto? Sobre esto? Bueno, que se jodan. Si ellos no pueden y no confiaran en ti despues de todo lo que les has dado, o en mi, que se vayan al infierno y regresen. Quiero que entregues el caso."
"Tu quieres—whoa, espera."
"Quiero que lo pases," repitio el. "No tendre ni un byte de esa informacion de mierda en mi casa, o en la cabeza de mi esposa, o en cualquier sitio en que puedan sospechar de que la use. Maldita, maldita sea si sere acusado en algun lugar bajo la linea de usar algo como esto en algun trato que cierre con alguien mas. De ninguna maldita manera tendre esto."
"Okay, vamos a calmarnos por un minuto." Ella tuvo que tomar un respiro, y otro, antes de que su cabeza dejara de girar. "Tu no puedes pedirme que entregue la investigacion."
"Eso es precisamente lo que te estoy pidiendo. Y si la memoria me sirve, he pedido muy poco cuando se trata de tu trabajo. Tu no eres la unica investigadora calificada. Pasalo." Demando el. "Y hazlo ahora. No sere insultado de esta manera. Y que me jodan si voy a tolerar que sea mi esposa la que me traiga el insulto porque sus superiores no tienen las bolas para hacerlo ellos mismos."
Ella se quedo pasmada y sin habla cuando el giro en sus talones y salio.