A Poul Anderson, por La espada rota y Tres corazones y tres Leones.

Al fallecido Fletcher Pratt, por El pozo del unicornio.

Al desaparecido Bertold Brecht, por La novela de tres peniques, obra que, por alguna oscura razón, relaciono con las anteriores como una de las principales influencias en las primeras historias de Elric.