¿CONOCES EL PODER DE LA MÚSICA, DEL EJERCICIO Y DE LA COMIDA SALUDABLE?
Hijo mío, la felicidad está hecha de pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna…
GROUCHO MARX
La música es un estupendo terapeuta, son varios los estudios que señalan el poder curativo que tiene ésta.
Desde niños, somos estimulados por el sonido. Aro Sáinz, en su libro Cómo cura la musicoterapia, dice:

Desde el momento en que el óvulo se fija en el útero, el nuevo ser en gestación ya se encuentra en contacto con un mundo sonoro (las pulsaciones del latido cardíaco, los ruidos intestinales y la respiración de la madre) y con múltiples sensaciones y estados (vibratorios, de movimiento y gravitacionales).

Desde antes de nacer, ya tenemos estimulación auditiva, la cual es imprescindible para el crecimiento físico e intelectual.
Hace unos meses, le realicé una entrevista a una profesora de música, Susana Tiburcio Solís, sobre los efectos benéficos de la música en la salud y el aprendizaje. En este espacio, transcribo lo más significativo de esa charla:

La música es un idioma humano universal. A lo largo de la historia, se han utilizado los sonidos, sobre todo los musicales, de una manera ritual y terapéutica. Cabe reconocer que la palabra «música» y su contenido varían de acuerdo al contexto cultural y época. Considerando la felicidad como una sensación de goce, fluir y autocrecimiento, la música escuchada, ejecutada o creada es un vehículo inigualable para el logro de esta meta. La música está íntimamente relacionada con el contexto cultural y la época. Generalmente, es la música «conocida» por el individuo y su asociación la que puede producirle más goce, pero existe música universal, a la cual puede acercarse la persona sin miedo a no «entenderla» y llegar a momentos de gran felicidad y plenitud. En ocasiones, la repetición de un mantra o sonido determinado produce en el individuo una sensación de paz y unicidad poco alcanzada por otros medios.

Vivimos una época maravillosa en cuanto a la facilidad para escuchar todo tipo de música.
Existen diferentes investigaciones en centros y universidades que concluyen que desde el seno materno el niño escucha; por lo tanto, podemos ofrecerles a los niños desde estadios tempranos la oportunidad de escuchar música.
Muchos investigadores serios coinciden en que la música del período clásico (Mozart y Haydn) y la del período Barroco (Bach y Vivaldi) son las más adecuadas para los niños, pero yo considero que la música de calidad de diferentes estilos puede ser escuchada por los niños como los cantos de cuna producidos por la voz de la madre.
Existe música bellísima de diferentes culturas, pero es muy importante darles lo que sabemos que es bueno y que tal vez ellos no busquen. Es como ofrecerles una comida nutritiva en vez de comida chatarra.
Lo que es muy importante y, desgraciadamente, se ha perdido es el canto. Lo suplimos poniendo la radio y un cedé. El canto en familia, incluyendo cantos infantiles y populares, fáciles de entonar, es una costumbre que tiende a desaparecer, pero compartir la música por este medio o bailando y moviéndonos con los niños crea vínculos maravillosos que dan gran alegría e integración a la familia.
Está comprobado que el aprendizaje en estado relajado es mucho más efectivo. Existen escuelas de idiomas que han verificado que el aprovechamiento de una clase es significativamente mayor cuando antes del inicio se hacen ejercicios de relajación con música barroca de fondo.
También hay estudios documentados de diferentes universidades en los Estados Unidos que demuestran una diferencia significativamente superior en las calificaciones obtenidas por grupos de estudiantes que escucharon música de Mozart antes de un examen.
El aprendizaje musical es más que música solamente. Estudios actuales del desarrollo del cerebro han estudiado los múltiples beneficios en el niño en el aspecto físico, emocional, cognitivo, del lenguaje y social.
Existen múltiples terapias musicales para diferentes problemas. Entre ellas, hay una desarrollada hace unos años en Austria y Alemania llamada quirofonética que ha dado resultados sorprendentes con niños autistas para el desarrollo del lenguaje.
Una depresión puede tener múltiples orígenes, por lo tanto, es el especialista quien debe determinar el método de curación. No es posible generalizar, pero sabemos que en momentos de depresión leve una música alegre, rítmica, bailable… puede alegrarnos el espíritu.
La música ha sido mi compañera leal a través de toda mi vida y ha sido fuente inagotable de felicidad. Tocar el piano, cantar con niños en un salón de clases, compartir con las madres y sus niños la experiencia musical, asistir a un concierto, hacer música, ya sea barroca o de
jazz, en grupo, bailar al son de un danzón o salsa con un grupo cubano, asistir a bodas o fiestas donde juntos celebramos la vida… son experiencias inolvidables e inigualables que han dado sentido a mi vida y me han hecho una persona muy feliz.

La música nos acompañará por el resto de nuestra vida, haciendo que experimentemos emociones y seamos felices.
Diversos estudios indican que el cerebro se estimula escuchando música barroca, específicamente el sistema límbico, el cual es el responsable de las emociones; incluir este género musical en tus costumbres diarias marcará una gran diferencia en tu estado de ánimo.
También la música es sanadora. Don Campbell, en su libro El efecto Mozart, escribe sobre un accidente que sufrió una mujer en una tarde lluviosa; ella iba escuchando El barbero de Sevilla13 en su coche mientras otro la embistió por detrás:

«El impacto fue repentino y muy fuerte —recuerda—, pero incluso en el momento de entrar a un mundo de conmoción y dolor, encontré un mundo de dicha y orden. Escuché el aria completa y los siguientes quince minutos de ópera mientras los enfermeros de la ambulancia y los bomberos trataban de sacarme de las ruinas del coche». Los enfermeros le dijeron después que había estado inconsciente hasta que la pusieron bien sujeta en la camilla dentro de la ambulancia, pero ella recuerda haber escuchado la voz de Rosina14 durante toda esa terrible experiencia. Mi espíritu siguió en mi cuerpo —dice—, la música me mantuvo viva. Pude escuchar y estar consciente y alerta, y en paz con la música. En ningún momento pensé que estaba herida, porque la música era muy viva. Seguí escuchando y escuchando. Desde el comienzo del aria15, supe que tenía que terminar la ópera de mi vida»…

Situaciones como la anterior demuestran que la música es una gran medicina para muchos males, incluyendo la melancolía, tristeza o depresión.

Para la felicidad, la música recomendada es la de Tchaikovski, Rossini, Beethoven y Rachmaninov.
Puedes inducir al cerebro, mediante la neuroinducción auditiva, para obtener efectos como optimismo, relajación agradable, pensamientos positivos y sentimientos de integración de cuerpo y mente; para ello, se deben escuchar sonidos que tengan una frecuencia de ocho a doce hercios16 (hertz), los cuales son llamados «alfa».
Existen estudios realizados en escuelas donde un grupo de niños inquietos escucha sonidos alfa durante unos minutos y, tras hacerlo, todos están más relajados y con mayor disposición a aprender; ello muestra cómo ese tipo de frecuencia es muy útil para la relajación y aprendizaje.
También te recomiendo los sonidos relacionados con las frecuencias delta, ya que son útiles para los procesos curativos y el fortalecimiento del sistema inmune; éstos tienen de uno a tres hercios. La hipnosis y la meditación son útiles para alcanzar esta frecuencia y sus beneficios.
Otros sonidos que te ayudarán son los relacionados con la naturaleza (ríos, viento, aves, etc.), ya que así evitarás la tristeza y la melancolía. Rehuye los relacionados con la ciudad (aviones, autos, sirenas de policía, etc.).
Mantener la salud en el cuerpo debe ser una prioridad para ser felices y prósperos, si él funciona bien, nuestra mente, también; tenemos más energía para hacer más cosas y, por ende, la abundancia se manifiesta.
Aunque los demás opinen lo contrario, el estrés no es algo malo: al liberar distintos químicos en tu cuerpo, te permite funcionar a niveles más altos, para lograr cosas inimaginables.
Lo que es peligroso es mucho estrés y no saber desecharlo. Debes balancearlo con tiempo de relajación y ocio, para que estés saludable y en una condición envidiable.
Los grandes líderes han seguido esta recomendación; es cierto que estuvieron expuestos a grandes cargas de trabajo, pero desarrollaron estrategias para balancear su estrés dedicándole algún tiempo a la diversión y a la calma. Muchos programan siestas durante el día y otros meditan, pero el objetivo es el mismo: equilibrar tu tiempo de estrés y el de relajación.
Si combinas la relajación, el ejercicio vigoroso y la nutrición, verás un gran cambio en tu vida y, obviamente, serás feliz y vivirás más.
El ejercicio es importante para tener una buena salud… y ser felices. Cuando realizas alguna actividad física, te sientes mejor, más saludable y disfrutas de una vida plena. Cualquier médico recomienda el ejercicio para prevenir y curar enfermedades, pero pocos psicólogos te lo recomiendan para ser feliz.
Cuando te mueves, la sangre transporta mayor cantidad de oxígeno a los músculos, aumentando así su capacidad de trabajo, y el cerebro se estimula para lograr un mejor rendimiento intelectual. Además, el estrés disminuye, dando lugar a una sensación de paz y bienestar.
Debes practicar el deporte que te guste o, si no tienes tiempo para ello, aumentar las actividades de tu vida cotidiana, por ejemplo: camina más, utiliza menos el auto, pasea con tu familia por tu zona y sube por las escaleras constantemente.
Cuando te ejercitas, logras que tu autoestima se eleve, confías más en ti mismo y no dudas en vestirte de tal o cual manera.
El mejor ejercicio siempre será el caminar. Éste, además de incrementar tu felicidad, te ayuda a:

13 Ópera en dos actos de Gioacchino Rossini.
14 Uno de los personajes principales de El barbero de Sevilla.
15 Pieza musical para ser cantada por una voz solista, usualmente con acompañamiento orquestal, y parte de una ópera.
16 Unidad de frecuencia igual a un ciclo por segundo (o sea, el número de veces que se repite un fenómeno por segundo).

• Fortalecer tu corazón y tus pulmones, además de mejorar la circulación sanguínea.
• Prevenir ataques al corazón y derrames cerebrales.
• Reducir la obesidad y la presión sanguínea.
• Equilibrar el colesterol de tu cuerpo.
• Mejorar el tono muscular de tus piernas y abdomen.
• Reducir el estrés y la tensión.

Debes tener en cuenta estos consejos para caminar:

• Camina a un ritmo constante.
• Camina de manera enérgica para hacer que tu corazón lata más aprisa.
• Respira más hondo que de costumbre.
• Camina con la cabeza erguida, la espada recta, el vientre plano.
• Balancea tus brazos libremente.
• Apoya primero el talón y después la punta del pie.
• Al principio, camina sobre superficies planas.
• Procura caminar en parques o calles con poco tráfico, para evitar algún accidente.

Camina todos los días y verás una clara mejora en tu salud y en tu estado de ánimo. Además, este ejercicio es insuperable para tener nuevas ideas.

La alimentación es sumamente importante para que tu cuerpo y mente trabajen adecuadamente.
Existen múltiples investigaciones que afirman que hay alimentos que producen más bienestar que otros al ser ingeridos, la explicación es sencilla: el consumo de determinados alimentos tiene un efecto sobre nuestro cerebro. Al comer ciertos alimentos, el cerebro libera diversos neurotransmisores que favorecen el estado de ánimo y aumentan las sensaciones placenteras.
Los neurotransmisores relacionados con el estado de ánimo y que debes liberar son:

• Dopamina. Tal vez sepas que la morfina y la heroína son las drogas más potentes conocidas por el hombre para disminuir el dolor y producir placer. Por mucho tiempo, se pensó que eran similares a algún químico producido naturalmente por el cerebro humano, ¡y tenían razón! Recientemente, se ha descubierto que existen varias moléculas similares a la morfina que se producen a diario en nuestros cerebros, éstas son conocidas como endorfinas y son responsables de nuestra percepción del dolor. El mecanismo natural del ser humano para regular el dolor consiste en una secreción constante de esta sustancia. Si una persona tiene un buen nivel de secreción de endorfina, el dolor se percibe de forma mínima, mientras que para una con baja secreción, el dolor (aunque sea por una herida leve) se percibe en mayor grado. La dopamina se concentra en áreas del cerebro cercanas a los lugares de mayor secreción de endorfina. Cuando la función de la dopamina disminuye, lo hace también la de las endorfinas; por otro lado, cuando existe demasiado estrés, se reduce la secreción de dopamina, y entonces la persona pierde su «anestésico» natural. La dopamina dirige el «centro del placer»: éste es el área que te permite «gozar de la vida», por lo que, cuando el estrés interfiere con la secreción de dopamina, tu centro del placer se hace inoperante y, con ello, las actividades placenteras normales ya no te lo resultan.
• Noradrenalina. Cuando la persona se asusta, la adrenalina es segregada hacia el torrente sanguíneo por las glándulas adrenales, el corazón late más rápido, la sangre se va de la piel y los intestinos hacia los músculos y aparece sudoración en las palmas de las manos y de la frente. Este proceso tiene una explicación: el cuerpo se ha preparado para «luchar o huir». La noradrenalina es un neurotransmisor relacionado con la adrenalina y tiene muchas funciones importantes en el sistema nervioso, entre ellas, la de establecer los niveles de energía adecuados para el organismo. Es esencial que la noradrenalina funcione adecuadamente para que la persona se sienta con energía, pues si no se tiene suficiente noradrenalina, la persona se siente cansada, exhausta o sin energía. Simplemente la persona no se siente con ganas de hacer nada.
• Serotonina. Ejerce influencia sobre el sueño y también se relaciona con los estados de ánimo, las emociones y la depresión. Afecta al funcionamiento vascular, a la frecuencia del latido cardiaco y regula la secreción de hormonas como la del crecimiento. Cambios en el nivel de esta sustancia se asocian con desequilibrios mentales como la esquizofrenia o el autismo infantil, así como con el trastorno obsesivo compulsivo.

La serotonina, la noradrenalina y la dopamina son los químicos cerebrales que comienzan a fallar cuando los niveles de estrés son mayores de los que la persona puede manejar, por eso es importante la relajación.

Estos neurotransmisores, importantes para tener un estado de ánimo adecuado, pueden ser estimulados por la ingesta de algunos alimentos.

El mal funcionamiento de las glándulas suprarrenales es una causa muy común de la depresión, además del exceso de grasas y del consumo de carbohidratos. La mala digestión o los problemas en los neurotransmisores (serotonina y norepinefrina) tienen que ver con el bajo consumo de ácido fólico, ya que la deficiencia de este compuesto fundamental del complejo B disminuye la producción de serotonina.

También el déficit de tiamina o el de riboflavina produce depresión, por ello es necesario consumir al menos cincuenta miligramos de complejo B a diario. Cuando no se consume la suficiente dosis de vitamina C y hierro, aparecen también los síntomas de la depresión; el adulto debe consumir por lo menos mil miligramos y veinte miligramos al día de estas sustancias.

Otras causas de la depresión son el consumo de alcohol y tabaco, y la baja absorción de minerales y vitaminas o la carencia de estos y otros elementos (sobre todo de los más importantes: vitamina B y calcio).

Por ello, se recomienda una dieta rica en vitamina B. Durante quince días, todas las mañanas habría que consumir fruta exclusivamente, al menos cinco diferentes; por la tarde, vegetales diversos, al menos de cuatro tipos. Por la noche, consumir ambos. Cada tercer día consumir, carne blanca.

En la dieta se han de preferir todos los alimentos ricos en vitamina B:

• Vitamina B1 (tiamina): espárragos, guisantes, avena, col de Bruselas, uva, espinacas, berenjenas, ajos, habas, lechugas, piñas y naranjas.
• Vitamina B2 (riboflavina): germen de trigo, almendras y cereales.
• Vitamina B3 (niacina): nueces, pescado, alubias.
• Vitamina B5 (ácido pantoténico): setas, aguacate y el brócoli.
• Vitamina B6 (piridoxina): papas, alubias secas y en la mayoría de frutas y verduras en bajas dosis.
• Vitamina B12 (cianocobalamina): yogurt, queso y carnes blancas.

Los huevos crudos contienen una sustancia que destruye la biotina, coenzima que actúa en el metabolismo de proteínas, grasas y carbohidratos, y cuya deficiencia produce depresión y melancolía; por ello, es recomendable no consumir esta variante de alimento.

El cuerpo humano necesita de la vitamina B6 (piridoxina) para producir serotonina y así mantener un estado de bienestar y satisfacción mental. También la deficiencia de tiamina y riboflavina contribuye a la aparición de síntomas depresivos.

Cuando existe una deficiencia de vitamina C, el individuo sufre de melancolía, incluso con una pequeña deficiencia de esta vitamina. La deficiencia de hierro causa melancolía y, muchas veces, depresión.

Evita, por otra parte, comer o tomar:

• Alimentos hechos con azúcar y harina refinada.
• Aspirina.
• Carnes rojas.
• Alcohol y tabaco.
• Café.
• Bebidas de cola.

La mayoría de personas, cuando se deprimen, acuden al consumo de golosinas con exceso de azúcares y harina refinada. El azúcar aumenta los síntomas de la depresión, como la melancolía y el cansancio, por ello debe evitar la refinada, los jarabes de maíz y las melazas. Debe preferir las frutas y endulzar con azúcar no refinada (de manera eventual).

Así como existen alimentos que agudizan la depresión, dos alimentos la evitan:
• Frutas dulces.
• Lechuga.

Su consumo diario puede cambiar el estado de ánimo depresivo a uno más alegre.
Existe una relación entre la falta de ácidos grasos esenciales y la depresión: ya que el organismo no los produce, debe adquirirlos de alimentos, por eso te recomiendo consumir más ácido linoleico, el cual se encuentra en los cereales integrales y en los pescados «azules», como el pez espada y la trucha.
Debes tener cuidado con las grasas animales, ya que el consumo de éstas puede elevar el riesgo de que una crisis depresiva termine en suicidio.
Por otro lado, muchas personas omiten el desayuno y esto no es recomendable, ya que el cerebro necesita glucosa, la cual es utilizada por otros órganos y sistemas, por lo que podría no obtener la necesaria. Además, el cuerpo ya pasó entre diez y doce horas en ayuno durante la noche, y si no comes por la mañana, te sentirás apático y decaído.
El consumo excesivo de bebidas excitantes como el café, el té, los refrescos u otro tipo de bebidas estimulantes mantiene la mente despierta, pero no aumenta la concentración ni la memoria.
Los zumos naturales de frutas mezclados con apio o alfalfa, el agua o las infusiones son una opción más saludable y nutritiva.
Cuantas más verduras y frutas consumas, mejor. Los vegetales contienen una perfecta combinación de antioxidantes, fibra soluble e insoluble y fitoquímicos (sustancias vegetales de efectos beneficiosos) que protegen la integridad de nuestras células, incluidas las neuronas, a lo que se suma el hecho de que las verduras, añadidas a cualquier alimento, sacian sin engordar.
Incluye fibra: pan integral y no blanco, frutas en lugar de dulces.
Para guisar, utiliza el aceite de oliva virgen, ya que las grasas que contiene, también presentes en el aguacate, protegen a las neuronas.
Hace un par de años me envió un mail un paciente. En él, me decía que había acudido a varias consultas con médicos, psiquiatras y psicólogos debido a que tenía depresión. Aunque había mejorado, aún se sentía melancólico. Uno de los correos electrónicos decía:

En 2004 comencé con problemas de depresión y ansiedad, sentía mucha tristeza y apatía. Al ir al médico, me recetó Paxil y Tafil; el primero me provocó varios síntomas adversos, por lo que me lo cambió por Lexapro. Noté que me controló bastante, pero no me quitó todos los síntomas, ya que tenía somnolencia durante el día. Dejé de tomarlo en febrero de 2006 y aún tengo síntomas de depresión, tristeza, ansiedad y fatiga; en una escala del uno a diez creo que me siento en un cuatro… Quisiera saber si la depresión es una enfermedad y si realmente se necesita la medicina, ya que es demasiado cara. Mi problema, por lo que empezó la depresión, fueron los problemas económicos.

Al cuestionarlo sobre su dieta y hábitos, respondió así:

Mi dieta consiste en consumir mucha carne, papas y alimentos ricos en azúcar y colesterol. No hago ejercicio, fumo un paquete de cigarrillos diario, tomo alcohol muy seguido y consumo las drogas legales, prescritas por los médicos.

Obviamente, le recomendé que consumiera más productos naturales, evitara el consumo de carne y eliminara el consumo de tabaco, alcohol y drogas prescritas. Cuando lo hizo, notó una gran mejora. Aunado a los ejercicios que le recomendé, en poco tiempo su salud estaba mejor.

La dieta y hábitos de este paciente son los mismos que los que miles de personas prefieren a diario. Como te has dado cuenta, para mejorar tu humor es necesario que regreses a lo natural y evites cualquier tipo de droga. Recuerda: si estás sano, eres feliz; si eres feliz, puedes ser próspero y exitoso.

El exceso del consumo de aditivos y colorantes químicos sobreestimulan el páncreas, haciéndolo producir insulina en exceso, lo cual causa desnutrición y la alteración de las funciones del cerebro, provocando trastornos mentales, incluyendo la depresión.

Aunque no deseo profundizar en los efectos dañinos de la excesiva producción de insulina por el consumo de los aditivos y colorantes artificiales, escribo otros padecimientos relacionados con ella:

• Sobrepeso.
• Hipoglucemia intensa, que puede desembocar en convulsiones y muerte.
• Diabetes.
• Exceso de grasa en arterias.

Por todo lo dicho, la recomendación es clara: para evitar la depresión (y otras enfermedades) se debe evadir el consumo de aditivos y colorantes químicos.

Cualquier médico te puede decir que para el cuerpo es muy difícil eliminar toda sustancia química que entre en él.
Evitar consumir alcohol es la mejor forma de ser feliz. Las bebidas alcohólicas tienen dos momentos en el cerebro: en el primero, elevan el nivel de serotonina, por ello, durante poco tiempo, generan una sensación de extrema placidez; el segundo momento precipita una disminución drástica de serotonina, con la cual una persona se vuelve agresiva y no mide las consecuencias de sus actos. La relación de las bebidas alcohólicas con crímenes violentos se debe a que el alcohol reduce el nivel de serotonina.
La deficiencia de serotonina está implicada en la agresividad humana: aunque la falta de este neurotransmisor no produce agresividad, reduce el umbral de la agresividad. Esto significa que podría llegar un momento en el que a un individuo le fuera imposible detenerse.
También, la extrema reducción de serotonina en el cerebro produce el síndrome premenstrual, presente durante ciertas etapas del ciclo menstrual. Las mujeres con este síndrome frecuentemente tienen síntomas como ansiedad, estrés, irritabilidad y melancolía, todos relacionados con una baja producción de serotonina.
Las mujeres con el síndrome premenstrual padecen también de depresión. Ésta ha sido clasificada por muchos investigadores como la enfermedad de nuestro siglo y los tratamientos van desde la prescripción de medicamentos hasta la psicoterapia. Entre los medicamentos empleados para elevar la serotonina está el Prozac, pero también se ha encontrado que el aumento de ingestión de carbohidratos en la dieta provoca una significativa elevación de ese neurotransmisor.

¿QUIERES MÁS CONSEJOS PARA SER FELIZ?
Una de las ventajas de no ser feliz es que se puede desear la felicidad.
MIGUEL DE UNAMUNO

En este apartado, encontrarás diversos consejos para ser feliz, saludable y exitoso; juntos, con lo que has aprendido a lo largo del texto, te serán de utilidad para alcanzar lo deseado. Son muy breves (como todo buen consejo) y tienen la intención de darte un panorama más amplio de los elementos necesarios para alcanzar la felicidad:

Mientras más amigos tengas, más feliz serás

Una persona es más feliz cuando tiene amigos que cuando tiene dinero, dicen por ahí, y podrían tener razón, ya que, si tienes dinero y no tienes amigos, no encuentras con quién gastarlo (es un mal chiste).

Un amigo te escucha sin juzgarte. Además, tu organismo te agradecerá tener amigos, ya que los investigadores han descubierto que las personas que carecen de amigos tienen problemas con los patrones de sueño, de modo que desarrollan enfermedades como el síndrome de fatiga crónica, ansiedad y depresión. Por todo ello, al tener amigos tendrás una excelente salud, además de ser feliz.

Cultiva nuevas amistades , te sorprenderás con los gestos de bondad por parte de estas personas a lo largo del transcurso de los años; además, ellos te ayudarán mucho, cuando menos te lo imagines.

Trata a todos los que se crucen en tu camino como si fueran las personas más importantes del mundo y entonces encontrarás el éxito.

Construye grandes amistades, estas relaciones son esenciales para mantener una vida saludable. Encuentra unos minutos al día para pasar un poco de tiempo con un amigo o llamar por teléfono a alguien con quien no has tenido tiempo de hablar desde hace tiempo.

Muestra compasión y consideración hacia tus amigos, desarrolla amistades duraderas siendo un buen amigo; busca más amigos: no importa cuántos amigos tengas, sigue buscando más.

Envía cartas en sus cumpleaños, también notas de vez en cuando para mostrar tu interés por ellos. Es cierto que puede que estés ocupado, pero tómate algunos minutos a la semana para enviarle una carta a un amigo; este gesto será una pequeña inversión que te arrojará ganancias extraordinarias.

Si tienes amigos que has descuidado o relaciones que desees mejorar, realiza este ejercicio: anota los nombres de estas personas y debajo de cada nombre escribe por qué quieres mejorar la relación, cómo planeas hacerlo y en cuánto tiempo. Con ello, tendrás una meta. Comprométete a reavivar esa relación; basándote en lo que has escrito, diseña las estrategias para ello.

No pienses: «Si hubiera…»…

No gastes el tiempo imaginando «qué hubiera pasado si…», enfócate al presente, no al pasado, tal y como te mencioné con anterioridad. Si no hiciste algo, no lo harás ya. Piensa qué harás para tu futuro, aprende de tus fracasos y no te lamentes de lo que no hiciste.

Frente a ti tienes un camino lleno de retos y premios, no lo dejes por sentarte a lamentarte de lo ocurrido o lo que pudo ser, te desgastarás demasiado sin lograr avanzar en esta vida, repleta de cosas dispuestas para las personas que lo deseen.

Además, lamentarte es lo peor que puedes hacer, pues nadie se acercará a ti; evitarán tu actitud de derrota, la cual es visible en todos los que la eligen como bandera.

¿Te has dado cuenta de que cuando tienes el control de tus recursos atraes a más personas? Si lo has hecho, evita lo contrario, deja los lloriqueos para las personas que no tienen plena confianza en triunfar y controla tu vida.
Si tienes confianza en lo que haces, te respetas. Los demás perciben si te tienes respeto: cuando conocen a alguien que sólo se queja, le rehúyen; en cambio, si su actitud es motivadora, se acercan.

Nunca hay días iguales, siempre son diferentes. Tal vez el ayer no te gustó, pero en el ahora tienes la oportunidad de ser feliz. No dejes que las lamentaciones mermen tu estado de ánimo, mejor busca cómo moverte desde tu presente hacia tu futuro.

Disfruta tus triunfos… y reconócelos

Que reconozcan tus triunfos es importante, pero, además, si reconoces tus triunfos podrás crecer psicológicamente y motivarte a llegar más lejos.

Fórmate el hábito de la introspección, ésta es una de las estrategias más importantes de la eficiencia personal: pasa diez minutos cada noche antes de dormir autoexaminándote, reflexiona sobre las buenas cosas que hiciste en el día y las malas acciones para no volverlas a cometer. Una persona exitosa analiza su vida más que los demás; con esto, erradica sus cualidades negativas y prepara su mente para el éxito.

No te empeñes en buscar lo malo, mejor date cuenta de lo bueno y prepárate para mejorar los aspectos de tu vida que no te gusten.
Cuando alguien te de un cumplido, aprende a decir gracias, ya que esa persona se tomó un tiempo para tener en cuenta algo que te caracteriza; pero si no crees en ti mismo, será difícil que te des cuenta de ello, ya que estarás empecinado en destruir tu propia imagen. Por eso, debes creer en ti mismo y en lo que puedes lograr. Reconoce todos tus triunfos, aunque los consideres pequeños; ése es el primer paso para creer en ti.

Mantente ocupado

Es mejor estar ocupado que aburrido… o deprimido. Cuando estás atareado, no tienes tiempo de ser infeliz o deprimirte, por eso te recomiendo buscar actividades recreativas o de trabajo y así evitar la melancolía, o, en el peor de los casos, la pereza y la desidia. Una persona ocupada tiene más energía y entusiasmo, e incluso contagia a los que conviven con él; en cambio, una desocupada transmite lo contrario. Cuando estás ocupado, tu mente se activa de manera sorprendente, mostrándote herramientas que de otra forma no verías. ¿Cuántas veces mientras trabajas te ha llegado una nueva idea? Supongo que muchas.

También cuando realizas una actividad física tu cerebro genera soluciones, por eso, es altamente recomendable que hagas ejercicio. Si no tienes tiempo para ir a un gimnasio, por lo menos camina, esa simple actividad te arrojará variados beneficios. Cuando te sientas triste, sal a caminar, verás que regresas a tu casa con otra visión de las cosas y tal vez hasta soluciones los conflictos que te hacen sentir así.

Lo peor que podrías hacer es sentarte a llorar o quejarte de lo que te ha pasado, mejor dirígete al parque más cercano y camina por él, admira todo lo que está a tu alrededor y disfrútalo, así estarás ocupado con otra actividad (altamente gratificante), olvidando tu melancolía o enojo.

Dale algo que hacer a tu mente y no sólo recordar lo pasado o preocuparte por lo futuro; entreténla con actividades lúdicas o físicas, verás que cambia positivamente todo lo que piensas cuando tienes algún quehacer.

Aprende nuevas cosas

Inscríbete en cursos, aprende nuevas cosas, dedícate a un nuevo oficio. Aprender es divertido y te mantendrá ocupado, desarrollando nuevos caminos neuronales, los cuales son útiles para encontrar nuevas formas de ser feliz.

Infórmate sobre los eventos actuales y las tendencias populares, la gente de éxito lee entre cinco y seis periódicos al día, y, aunque no es necesario que leas cada historia de los diarios, identifica las cosas que te pueden ser útiles y aquellas a las que no le debes tomar importancia.

Recuerda que el conocimiento es poder y que puedes cambiar profundamente tu vida y la de los que te rodean con una sola idea… Si investigas sobre los hombres de negocios más importantes, verás que ellos han llegado a colocarse como tales por tener información que otros no tienen.

Deja que los demás resuelvan sus problemas

Acéptalo, todos, en algún momento, queremos resolver los problemas de los demás (y si no lo crees, pregúntale a un psicólogo, él intenta resolverlos todos los días).

Deja que los demás resuelvan sus dificultades y enfócate hacia las tuyas. Si alguien acude a ti a contarte sus problemas, pídele que busque una solución él mismo o que busque ayuda profesional.

Haz lo tuyo y deja que los demás resuelvan lo suyo, tienes suficiente con tu vida como para buscar complicártela por otro. No intentes andar por ahí resolviendo los problemas de los demás pues con los tuyos tienes bastante.

Apaga la televisión

La televisión cambia tu manera de ver el mundo, ya que te muestra lo que desea que veas… y nada más. Además, las imágenes violentas que se presentan en los noticiarios o series desestabilizan nuestro cerebro.

La solución a muchos de tus problemas es simple: apaga la televisión, pero además, explora tu mundo, encuentra placer en las cosas simples que otros desdeñan. Detente y escucha al músico de la calle tocando la trompeta, el saxofón, la guitarra o el violín; lee un libro clásico, sal al campo, toma un tratamiento para tu mente, cuerpo y espíritu. Esto mejorara profundamente tu calidad de vida.

Sal de tu casa u oficina y observa el cielo azul durante media hora y date cuenta del sentimiento que tienes cuando estás con la naturaleza. Evita tu horario rígido de vez en cuando y pasa una tarde en un lugar hermoso. Camina por el bosque, siente el viento en tu rostro, escapa de la rutina y te sentirás maravilloso cuando vuelvas a tus quehaceres.

No enfrentes tus problemas solo

A veces, los problemas parecen sin solución, y lo serían si no tuviéramos diversos puntos de vista, de ahí la importancia de buscar ayuda para enfrentarlos. Esta ayuda puede ser de tus amigos, familia o pareja, ellos te darán una nueva perspectiva para la problemática que te aqueja, y recuerda el dicho popular: «Dos cabezas piensan mejor que una».

En diversos estudios se ha comprobado que las personas que tienden a relatar sus problemas buscando ayuda tienen menos estrés con respecto a aquellas que se guardan para sí éstos. Ello no significa que andes por ahí contándole a todos tus problemas, sino que has de buscar a aquellas personas que te aporten algo, que te permitan ver el mundo con otra perspectiva.

Reúnete sólo con personas felices o prósperas, nunca con melancólicas y sin ánimos de triunfar, ya que tenderás a imitarlos. No te olvides de que nuestro cerebro aprende por imitación: si tu cerebro cree que es «normal» ser infeliz, hará todo por lograrlo, pero si supone lo contrario, entonces no tendrás límites y llegarás muy alto.

Evita a los tristes y procura estar con los alegres.
Debes escuchar nuevas ideas, nuevos puntos de vista

Siempre hay algo nuevo que aprender. Debes estar abierto a nuevas ideas, a nuevos puntos de vista, todas las personas tienen algo que decir y, si las escuchas, puedes ver el mundo con sus ojos, con su mente, lo que te dará una clara ventaja sobre los demás.

Escribe el nombre de cuatro personas que te puedan dar inspiración, motivación y apoyo para lograr tus metas, reúnete con cada una de ellas en las siguientes semanas, escúchalos, haz una lluvia de ideas con ellos y pon en práctica sus consejos sabios.

Evita reunirte con personas negativas, no tiene caso escucharlos ni perder tu valioso tiempo oyendo quejas.
Proponte hacer un nuevo amigo a diario que te inspire y motive, así tendrás cientos de personas que puedan ayudarte, darte nuevas ideas y nuevos puntos de vista.
No hables cuando estés escuchando la conversación de otro, interrumpir es una descortesía. Escucha con toda tu atención, te sorprenderás de lo que aprendes y de cómo los demás te admiran cada día que pasa.
Debido a que una idea da lugar a una imagen mental, debes tener muchas ideas para generar un hábito mental, dominar tus pensamientos y así ser el dueño de tu vida.
Como durante el día puedes tener momentos de inspiración y excelentes ideas, ten a mano algunas tarjetas pequeñas en blanco, como las tarjetas de negocios; puedes colocarlas en tu cartera, y no olvides un lapicero: ambos te servirán para escribir las ideas que vayan surgiendo durante el día. Cuando llegues a tu casa, coloca las tarjetas en un lugar especial y repásalas de vez en cuando para no olvidarlas y crear algo nuevo.

Visita a tus vecinos

Cuando se vive en algún pueblo o comunidad pequeña, es muy común que se conozca a todos los vecinos, pero al vivir en una ciudad es difícil hacerlo.

Tu vecino ha aprendido a vivir de manera diferente a ti y sabe cosas que tú no; si lo ves desde esta perspectiva, realmente estás desaprovechando mucho al no convivir con él. No sólo tú te beneficiarías con esa actividad, sino que también la persona que vive cerca de ti lo hará.

No pierdas la oportunidad de invitarle a un café a tu vecino, será una gran oportunidad para compartir puntos de vista sobre la felicidad y la vida en general.

Cultiva un pasatiempo

Al tener un pasatiempo, tu vida transcurre de forma más amena. Cuando coleccionas algo, conoces a más personas, aprendes más y te diviertes.

Comienza a cultivar un pasatiempo. Puedes coleccionar y usar objetos de poder, en todas las culturas han existido éstos, desde huesos tallados hasta las «camisetas de la suerte» de los jóvenes.

Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis, coleccionaba cientos de objetos en su consultorio; lo hacía porque admiraba que muchas personas cambiaran radicalmente su personalidad al tener contacto con ellos. Por ejemplo, puedes tener una gorra con la cual te sientas seguro; úsala cuando te sientas inseguro, muchos de los entrenadores deportivos más famosos lo hacen en sus juegos y cambiará tu estado de ánimo.

Enseña a otros lo que no saben

Además de que te sentirás útil para algo, los demás te lo agradecerán. Detecta a personas que necesiten desarrollar alguna habilidad y ayúdalas a llevarla a cabo.

Una excelente actividad es impartir alguna clase en una escuela o instituto, cambiarás la forma de ver la vida a los estudiantes y olvidarás entristecerte, ya que estarás pendiente de su proceso de aprendizaje, olvidando tus penas.

Desde hace años, realizo esa actividad y ahora imparto cátedra a universitarios. Ellos aprenden y yo también, ya que tengo que preparar clase, investigar nuevos temas y escuchar sus puntos de vista (que son diferentes a los míos); es una relación social muy dinámica que me permite olvidarme de la melancolía y también del pasado para centrarme en el presente.

Puedes organizar cursos donde les ofrezcas información que desconozcan. Tus asistentes no saben muchas cosas que tú sabes, por eso debes ayudarlos a mejorar sus vidas. Además, ellos te ayudan, ya que evitarás estar absorto en tus problemas para centrarte en una actividad que te permitirá alejarte un rato de ellos y así encontrar una solución posteriormente.

Te lo digo por experiencia: enseñar a otros lo que no saben es terapéutico. Muchas veces, al estar dando clase, nuevas ideas me han llegado para resolver mis problemas, de modo que logro dos objetivos en una sola sesión.

Lee mucho

Un libro te enseña nuevas habilidades que puedes utilizar en tu vida diaria. Además, ejercitas tu cerebro, que, como sabes, es tu principal instrumento para el éxito.

Los mejores líderes del mundo han sido grandes lectores. Muchas personas exitosas leen un libro diario, eso les proporciona nuevas ideas y nuevos conocimientos que pueden aplicar para su vida.

Tú debes buscar conocimiento e información, no tienes excusa para no hacerlo. En nuestra época, tenemos muchos medios electrónicos que nos permiten darnos cuenta de distintas posturas. Si utilizas a tu favor la información masiva, más conocerás y a menos cosas temerás.

Toma como meta leer algo positivo antes de irte a dormir; cuando te levantes, procura leer algo motivacional, verás muchos beneficios en tu vida, ya que estos pensamientos te acompañarán todo el día.

¿Sabes cómo inicio mi día? Leyendo un chiste. Con esta sencilla práctica, me llevo una sonrisa antes de salir de casa que me acompaña durante todo el día; además, puedo relatarle el chiste a otra persona, haciendo que sonría.

No hay excusa para no leer. Una recomendación: evita las noticias llenas de pesimismo y negatividad, sólo te harán sentir mal.
Lee todo tipo de material que te provoque preguntas, ellas te conducirán a buscar igual o mayor número de respuestas, ampliando tu conocimiento sobre varios temas. Tu búsqueda de material de lectura debe ser comparada con una persona sedienta, la cual, al encontrar el preciado líquido, no duda en tomarlo a grandes sorbos.
Debo insistir: el conocimiento es poder, las personas que tienen éxito no son precisamente las más hábiles o inteligentes del mundo, sino que lo que las hace diferentes es su deseo por el conocimiento. No olvides que mientras más sepas, más podrás lograr.
Lee las biografías de los líderes del mundo y aprende de sus hábitos, inspiraciones y filosofía. Haz lo posible por parecerte a ellos e incluso mejorar su estilo de vida.
La mayoría de respuestas a cualquier pregunta está escrita y todos los aspectos del desarrollo personal han sido tratados en muchos libros. Por eso, con la intención de lograr tu máximo potencial mental, debes leer diariamente. Pero también debes ser precavido con lo que consumes… Por eso, lee sólo aquellos materiales que te podrán ayudar, escoge lo que es importante y filtra lo que no tiene valor.
Te recomiendo leer sobre la historia de tu familia, comunidad y país donde vives, ya que encontrarás muchas lecciones de la vida; recuerda: «El pueblo que no aprende de su historia está condenado a repetirla». Lee historias de inspiración, estrategias para mejorar física, mental y espiritualmente, además de textos para despertar ese gigante sediento de éxito que tienes dentro de ti.

No seas agresivo con tus amigos y familia

Aunque tú tengas la razón, no debes imponerla sobre los demás. Respeta la opinión de los otros y no seas agresivo con nadie, y mucho menos con tu familia,pues, aunque a veces no lo demuestren, para ellos tú eres muy importante.

La ira es una emoción y, como todas las emociones, debes controlarla. Cuando creas que literalemente vas a explotar, sal a caminar o aléjate de tu casa durante una o dos horas, analiza la situación que te alteró y evalúa las posibles soluciones; te darás cuenta de que con separarte un tiempo de la causa de tu enojo mejoras tu visión de las cosas.

Nunca agredas de ninguna forma a tu familia o a tus amigos, confía en que tú puedes controlar los sentimientos negativos hacia los demás. Recuerda lo que dijo Aristóteles:

Todos pueden enojarse, eso es fácil, pero hacerlo con la persona adecuada, del rango adecuado, en el momento adecuado, y por la razón adecuada, y en la manera apropiada… eso no es fácil.

Si te enfadas con los tuyos, después te sentirás culpable, lo que añadirá otro sentimiento negativo a tu vida; por eso, evita el enojo. El diálogo siempre será una excelente herramienta para evitar los conflictos, así que procura realizarlo en todo momento con las personas que te rodean.

Organiza un equipo deportivo con tu familia o vecinos

El esfuerzo en equipo es importante para la comunicación humana y el logro deportivo te motivará a seguir adelante con tus demás proyectos; además, aprenderás mucho de tus vecinos o familia y convivirás con ellos más tiempo.

Jugar en equipo fomenta el sentimiento de pertenencia a un grupo, te sentirás apoyado y motivado constántemente. También los demás te reconocerán tus habilidades, ayudándote a conocerte a ti mismo.

Cuando organices un equipo deportivo, te sentirás útil y olvidarás la melancolía o la tristeza, ya que te enfocarás en la administración del tiempo y actividades del grupo.

Si a los anteriores beneficios le sumas el sentido de pertenencia que se genera cuando participamos en un equipo, tendrás una estupenda terapia para olvidarte de la tristeza.

No tienes que ganar todo el tiempo

A veces, puedes ganar; a veces, perder. Cuando no ganas, no debe afectarte en tu vida y menos en tu felicidad, ya que, con ello, aprendes nuevas maneras de cómo ganar.

Todo debe servirte para mejorar tu vida, por eso, cuando pierdes, tienes la posibilidad de aprender valiosas lecciones que nadie te dará. ¿Acaso los deportistas triunfan siempre? Por supuesto que no; si lo hicieran, ya no seguirían conquistando preseas, pues se conformarían con las que tienen.

Si deseas ser mejor, prepárate para tener diversos tropiezos, eso es parte de la preparación mental para el éxito: cada golpe te sirve para evaluar tus errores y no volverlos a cometer. Como te puedes dar cuenta, ver una dificultad como una oportunidad es una de las claves para ser feliz.

Obviamente, debes buscar perfeccionarte en todo momento, pero no te preocupes cuando algo salga mal, es parte de ese proceso.
Investiga tu historia personal

Investiga sobre tus antepasados, su vida, obra y descendientes, pues aprenderás mucho de tu historia familiar, te conocerás a ti mismo y forjarás tu autoestima.

Hace algunos meses, en la cátedra que imparto en la universidad, asigné una investigación a unos jóvenes, los cuales debían escribir una biografía en la cual preguntarían a diversas personas sobre su pasado. Después de entrevistarse con antiguos profesores, familiares y amigos de sus padres, se dieron cuenta de sus errores y crearon un plan de vida para su futuro, basado en sus faltas del pasado.

Esa actividad les sirvió a muchos para destacar en su escuela y constantemente me hablan sobre los nuevos cambios que han sucedido a partir de ese ejercicio.

Ahora es el momento de que tú lo hagas. Visita a viejos profesores y personas que te conocieron años atrás, pregúntales sobre tu pasado y aprende de él. Descubre dónde te has equivocado y establece acciones en el presente para mejorar tu vida actual.

No seas sobreprotector

Nadie desea que sus seres queridos sean lastimados, pero debemos dejar que ellos vivan sus vidas, aprendiendo en cada etapa de la misma.

¿Puedes caminar en lugar del bebé que inicia su andar? Por supuesto que no, él tiene que aprender por sí mismo, es parte de su aprendizaje. Nunca podrás hacer las cosas del otro, él debe tener sus propias experiencias, las cuales le ayudarán a contruirse como persona única.

No debes ser sobreprotector con ninguna persona, ya que te preocuparás mucho y no resolverás nada.