ALEXANDER BELIAEV. Nació en 1884 en la ciudad de Smolensko, y murió en 1942, cerca de Leningrado. La crítica lo llama aún hoy, a menudo, el Julio Verne ruso. Este escritor soviético abarcó sin embargo una mayor variedad de temas, inclusive aquellos que Verne no consideraba científicos, como la telepatía y la levitación.

Estudió leyes y música, fue sucesivamente director de un asilo para niños, músico de orquesta, escenógrafo, periodista, inspector de Policía, bibliotecario, jefe del departamento jurídico de un ministerio. Al fin, en 1925, decidió dedicarse enteramente a escribir. Toda la obra de Beliaev es un ejemplo de seriedad y minuciosidad científicas, aunque de cuando en cuando asoma en él un notable poeta lírico.

A la edad de 32 años contrajo tuberculosis ósea, y tuvo que pasar seis años en cama. La enfermedad se agravó varias veces, y Beliaev, al fin, no pudo sobrevivir a las penurias de la guerra.