APARATO CONTRA TENDENCIA

por Christopher Anvil

Usted no sería capaz de imaginar que cosas tan extrañas hace la gente cuando se le presenta la oportunidad.

Esta narración cuenta algo bastante divertido acerca de la sociología y de la capacidad humana para la autoexpresión.

Boston 2 de septiembre de 1976. El Dr. R. Milton Schummer, Catedrático de Sociología del Wellsford College, habló en contra del «conformismo pelotillero» ante una audiencia de mil doscientas personas, en el Swarton Hall, anoche.

El Profesor Schummer dijo que América, que había sido la tierra de la libertad, es ahora «el domicilio del hombre masificado, configurado desde la infancia según las influencias de los módulos imbéciles de la televisión, de la circulación de revistas y periódicos de masas, y la perversa influencia de los anuncios en todos esos medios. El resultado es el americano gregario con partes intercambiables y con un programa grabado incorporado».

Lo que necesita este país, dijo el Dr. Schummer, es «libertad para ser diferente, libertad para ser excéntrico». Pero concluyó: «el impulso es demasiado grande. Su curso, como la marea, no puede ser reversible mediante esfuerzos humanos. En doscientos años, esta nación ha pasado del individualismo al conformismo, de la independencia a la interdependencia, del federalismo al fusionismo, y éste todavía no es el final. Uno puede asustarse pensando lo que puede sobrevenir en los próximos cien años».

Rutland, Vt., 16 de marzo de 1977. El Dr. J. Paul Hughes, nieto del inventor Everett Hughes, ha revelado hoy un aparato que su abuelo había mantenido oculto por sus «supuestos efectos secundarios». Los trabajos sobre el ingenio han sido calificados por el Dr. Hughes como un «campo privado», con la «exclusión de los cuasi-electrones». En palabras del Dr. Hughes:

«Mi abuelo era un experimentador excéntrico. No obstante, de un modo sorprendente, a menudo sus tentativas lograban un éxito comercial bien remunerado. En el caso presente, y según las teorías científicas en boga, nos encontramos ante un ingenio inexplicable, pero que resultará fácilmente comercializable. Montado de manera adecuada, y conectado a una toma de corriente, el ingenio hace efectivamente pruebas de sonido sobre las superficies de los materiales, como muros, puertas, suelos y cosas por el estilo, y, además, puede ser una gran ayuda para las condiciones de vida de hoy día, con tanta aglomeración».

El Dr. Hughes explicó que el ingenio, según se suponía, funcionaba con la exclusión de «cuasi-electrones», los cuales, en opinión de mi abuelo, gobernaban la transmisión del sonido a través de los cuerpos sólidos, y producía otras diversas funciones esotéricas. Pero no tenemos ninguna necesidad de tomar todo esto en serio.

New York, 12 de mayo de 1977. Hoy se anunció la formación de la Hughes Muro-Silencioso S. A.

El Presidente de la nueva firma es J. Paul Hughes, nieto del inventor Everett Hughes.

New York, 18 de septiembre de 1977. En la actualidad, uno de los principales capitales del mercado es Hughes Muro-Silencioso. Con una demanda en alza y con el presidente original de la firma lanzado a la palestra, dejando su puesto a Myron L. Sams, el experto en cracks, la sociedad ha dado con una mina de oro.

Un portavoz de la compañía dijo: «La mayor necesidad de este país es la soledad. Vivimos en los bolsillos de los demás, y, si no podemos hacer otra cosa, al menos Muro-Silencioso puede aislar sonoramente los bolsillos».

Las unidades Muro-Silencioso, que tienen un precio de venta al contado de 289,95 dólares por unidad básica de vivienda, se dice, proporcionan al vendedor, al distribuidor y al fabricante, una generosa ganancia. Y nadie puede decir que 289,95 dólares no es un precio razonable por aislarse de los ruidos de los televisores de los vecinos, de sus tocadiscos, de sus riñas y de los llantos de sus niños.

* * *

Detroit, 23 de diciembre de 1977. Hoy Papá Noel dejó aquí un regalo anticipado para la industria del automóvil.

Cuando se estaba haciendo una prueba de conducción con un coche equipado con una unidad Muro-Silencioso de la casa Hughes, el vehículo patinó sobre una superficie helada y dio tres vueltas de campana, y el conductor salió magullado pero ileso. El propio coche, un liviano super-compacto, apenas sufrió daños.

Las pruebas realizadas con acotillo revelaron el hecho sorprendente de que, con la unidad puesta adecuadamente, el coche no se abollaría, y sus cristales no se podrían romper. Ni el capó ni la chapa del portaequipajes podrían levantarse. Ni las puertas ni las ventanas podrían abrirse hasta que la unidad fuera desconectada. Con la unidad desconectada, el coche era perfectamente ordinario.

Ésta es la primera prueba realizada con un Muro-Silencioso en un vehículo automotor.

En las instalaciones en oficinas y apartamentos se utiliza un diseño especial de unidad básica de insonoración para paredes y suelo, y pequeñas unidades adicionales para insonorizar las puertas y las ventanas. La instalación que se ha probado hoy carece de semejantes refinamientos.

26 de diciembre de 1977. J. Paul Hughes, jefe de dirección de la Muro-Silencioso Corp., manifestó hoy a los periodistas que su firma no tiene intención de comercializar unidades Hughes Muro-Silencioso para uso de automóviles.

Desmintió el informe de Detroit acerca de una prueba de un coche equipado con Muro-Silencioso que resultó sin daños después de haber dado varias vueltas de campana. Calificó el hecho de «imposible».

Hartford, 8 de enero de 1978. A pesar de los mentís de la Muro-Silencioso Corp., en todo el país se están llevando a cabo experimentos acerca del uso de las unidades de insonorización de la compañía como aparato de seguridad en los coches. Se han recibido numerosas cartas, telegramas, y llamadas telefónicas en las oficinas centrales de una de las más importantes compañías de seguros del país.

Hartford, 9 de enero de 1978. Las pruebas llevadas a cabo por ejecutivos del New Standard Insurance Group indican que los informes originales de Detroit eran correctos.

Los coches equipados con unidades Muro-Silencioso no pueden ser abollados, destrozados, rayados, o estropeados con herramientas ordinarias.

Austin J. Ramm, secretario ejecutivo de New Standard Group, explicó a los periodistas:

—Es la cosa más condenada que jamás he visto.

»Recibimos tantos comunicados de gente de todos los rincones del país, diciendo que habían conectado unidades Muro-Silencioso a sus coches, que decidimos probarlo nosotros.

»Probamos con piedras, martillos, y cualquier cosa. Cuando todos los intentos hubieron fracasado, yo lo intenté con un taladro eléctrico de un cuarto de pulgada, y Steve Willoughby —que es nuestro presidente— golpeó en el centro del parabrisas con un pico del ferrocarril. El pico rebotó. Mi taladro sólo se deslizó resbalando por la superficie del coche, sin ni siquiera rayarlo.

»Queríamos probar otras muchas cosas.

»Pero ya habíamos comprobado lo veraces que eran todos aquellos informes».

New York, 10 de enero de 1978. Myron L. Sams, presidente de la Hughes Muro-Silencioso Corp., anunció hoy que acababa de ponerse a la venta en todo el país un dispositivo especial para automóviles. El señor Sams advierte que una instalación inadecuada podría, entre otras cosas, estropear la totalidad o una parte de la maquinaria del coche. Insta a los representantes de la compañía para que se encarguen de la instalación del dispositivo.

Dallas, 12 de enero de 1978. Tras una persecución que ha durado una hora, una banda de atracadores huyó esta tarde con 869.000 dólares en metálico y papel negociable.

A pesar de la lluvia de balas, el coche, con que escaparon los autores del atraco, no sufrió ningún daño. Fracasó un intento de detenerlo con una barricada, porque el vehículo se estrelló contra ella y prosiguió su marcha intacto.

Aquí se especula con la posibilidad de que el coche estuviera equipado con una de las unidades Hughes Muro-Silencioso, que aparecieron a la venta hace pocos días.

Las Vegas, 19 de enero de 1978. Una banda de ocho o diez criminales asaltó ayer noche el Club Dólar de Plata, huyendo posteriormente con más de un cuarto de millón de dólares.

Fue uno de los robos más extraños de la historia de esta ciudad.

Los criminales entraron en el club en cochecitos de golf enmascarados con bolsas de plástico transparentes de color aluminio, y comenzaron a disparar contra los empleados del club, iniciando así una verdadera batalla. Al poco rato de lucha, resultó evidente que era imposible incluso romper los faros de los cochecitos de golf.

Tomando como rehenes al director y a los empleados del club, los francotiradores recibieron el dinero que pedían, corrieron por la acera y subieron la rampa de un camión que les estaba esperando y que les condujo fuera de la ciudad, después de derribar una gruesa barricada.

Durante todo el tiempo que le estuvo persiguiendo la policía, el camión demostró que no era posible causarle ningún daño. En un violento tiroteo, no resultó nadie herido porque la policía estaba equipada con las nuevas unidades Muro-Silencioso, y era evidente que el camión también lo estaba.

Ya lejos de la ciudad, el camión se encontró con otra barricada. Los atracadores se dispusieron a abalanzarse sobre lo que parecía una endeble barrera, pero se encontraron bloqueados cuando la barricada, dotada de una unidad Muro-Silencioso, les impidió proseguir su marcha.

El camión, con los cochecitos de golf en su interior, resultó indemne. Los bandidos están bajo tratamiento por conmoción cerebral y graves heridas.

Los 250.000 dólares han vuelto al Club del Dólar de Plata, y Las Vegas vuelve a estar tan en calma como antes.

New York, 23 de enero de 1978. En una rueda de prensa convocada precipitadamente, J. Paul Hughes, presidente del consejo de administración de la Hughes Muro-Silencioso Corp., anunció que está haciendo gestiones cerca del Gobierno Federal para que intervenga y suspenda las actividades de la empresa.

Señaló que había intentado sin éxito suspender las operaciones de la compañía por medio de su propia autoridad, y, luego, el Dr. Hughes manifestó que, como científico, tenía que poner en conocimiento del público el peligro que suponía el desarrollo tecnológico, «la amenaza de las potencialidades que, sólo recientemente, he podido apreciar». Todavía no se había recibido respuesta de Washington.

New York, 24 de enero de 1978. El presidente Myron L. Sams supo hoy que eran ciertos los informes que hablaban de una dura lucha interna para obtener el control de la Hughes Muro-Silencioso Corp.

Spring Corners, Iowa, 26 de enero de 1978. Oscar B. Nedle, un granjero de las afueras de la ciudad, ha levantado una barricada que corta el tráfico de la Cross-State Highway a lo largo de veinte millas en las dos direcciones.

El señor Nedle perdió no hace mucho un pleito por daños adicionales, cuando la autopista dividió su granja en dos partes desiguales, la menor de las cuales contenía su casa y los edificios de la granja, y la mayor, los campos.

La barricada está hecha de barriles de aceite, caballetes, y alambre de espino. Los barriles de aceite y los caballetes no pueden ser apartados, y parece como si estuviesen soldados a lo más profundo de la tierra. El alambre espinoso está misteriosamente rígido e inamovible. La barricada consta de una doble fila de esos obstáculos inamovibles, espaciados para formar un paso de veinte pies de ancho que permite conectar las dos partes de la granja del señor Nedle.

Al señor Nedle se le vio, esta mañana temprano, cruzando la carretera, con el atomizador manual.

La pesada maquinaria de construcción de carreteras ha fracasado en su intento de derribar los obstáculos. Los expertos están desconcertados. Por otra parte, el expendedor local de Muro-Silencioso recuerda haber vendido al señor Nedle, y no hace mucho, una cantidad de pequeñas unidades, y añade: «pero no mucho más de lo que han venido comprando otros granjeros últimamente».

Cabe mencionar que el pleito del señor Nedle es uno de los muchos que se han presentado en este territorio.

New York, 27 de enero de 1978. La Hughes Muro-Silencioso Corp, ha sido reorganizada hoy como Muro-Silencioso S. A., con Myron L. Sams ostentando los cargos de presidente del consejo de administración y jefe de dirección. J. Paul Hughes, nieto de Everett Hughes, continúa como director.

Spring Corners, Iowa, 28 de enero de 1978. Se ha restablecido la circulación por la Cross-State Highway.

Esta mañana, un camión con remolque, grúa y perforadora del ejército de los Estados Unidos se desplazó hasta la autopista y realizó un número determinado de agujeros de seis pies de diámetro, permitiendo así que pudieran ser izados los dos bloques de barricada como unidades. El alambre, los barriles de aceite, los caballetes y los grandes pedazos de tierra, que permanecían rígidos cuando fueron izados, se trasladaron a los Laboratorios de Investigación y Desarrollo del ejército de los Estados Unidos, para ser estudiados. No se han encontrado unidades de Muro-Silencioso, y es presumible que hayan embebido, con su poderosa fuerza, las masas de tierra.

El sheriff, el jefe superior de policía de Spring Corners, y agentes del orden, federales y del estado, están tratando de arrestar a Oscar B. Nedle, propietario de la granja adyacente a la autopista.

Esto parece imposible, porque la casa y los edificios del señor Nedle están equipados con un cierto número de unidades de Muro-Silencioso, controladas desde el interior.

Boston, 1 de febrero de 1978. El Dr. R. Milton Schummer, Catedrático de Sociología del Wellsford College, y crítico severo del «rastrero conformismo», dijo esta noche, cuando fue preguntado por los periodistas, que algunos de los efectos de la Muro-Silencioso constituyen una señal de esperanza en la larga lucha de lo individual contra las fuerzas de la conformidad. No obstante, el Dr. Schummer no cree que «un simple artilugio tecnológico pueda afectar a los grandes movimientos de las tendencias sociológicas».

Spring Corners, Iowa, 2 de febrero de 1978. Una cerca de alambre espinoso de cuatro pies de altura, entrelazada con pedazos de rieles, bloquea ahora la Cross-State Highway cerca de la casa del granjero Leroy Weaver, cuya propiedad quedó dividida en dos por la autopista, y quien ha manifestado a menudo que recibió una compensación inadecuada.

Resultó imposible para el equipo de la autopista derribar los alambres y los raíles.

El señor Weaver no pudo ser detenido, porque su casa y los edificios colindantes están equipados con unidades de Muro-Silencioso, y, ni el sheriff, ni los oficiales federales han podido penetrar en sus posesiones.

Washington, DC, 3 de febrero de 1978. La Oficina de Standards informa que las pruebas hechas sobre unidades de Muro-Silencioso demuestran que se trata esencialmente de «ingenios de estasis». Lo que quiere decir que evitan que cambie cualquier superficie en que se aplique. Además, impide el paso del sonido, porque el material protector es prácticamente no comprimible, y no es susceptible a la influencia de las ondas alternantes de comprensión y refracción existentes en el medio adyacente.

La Oficina de Standards ha sugerido muchas posibles aplicaciones por medio de su portavoz, quien informó, por ejemplo, que se habían introducido finas rebanadas de manzana y pera en el aparato Muro-Silencioso, y que habían sido extraídas de allí intactas, después de desconectar el ingenio, al cabo de períodos de experimentación de más de tres semanas.

New York, 3 de febrero de 1978. Myron L. Sams, presidente de la Muro-Silencioso S. A., informa qué las ventas de la empresa alcanzan cotas más altas cada día. Actualmente, Muro-Silencioso Inc. tiene factorías en siete estados, además de Gran Bretaña, los Países Bajos y Alemania Occidental.

Spring Corners, Iowa, 4 de febrero de 1978. Un camión con grúa y perforadora del ejército de los Estados Unidos se ha desplazado nuevamente a la Cross-State Highway, que se encuentra otra vez interceptada. Pero, esta vez, la gigantesca máquina ha quedado inmovilizada, debido, aparentemente, a uno o más ingenios estatificadores (Muro-Silencioso) ocultos.

Cuando la inmensa máquina, que pesa más de treinta toneladas, quedó con todas las ruedas del camión y del remolque bloqueadas, no resultó un problema sencillo moverla.

Los Ángeles, 5 de febrero de 1978. La policía local informa de la captura de una pandilla de drogadictos y toda clase de tipos desagradables en una guarida, después de cuarenta horas de lucha.

El escondrijo, conocido como el «Club del humo y de la aguja», estaba equipado con dieciséis aparatos de estasis fabricados por la Muro-Silencioso, Inc., y contaba con una línea eléctrica auxiliar que se extendía a lo largo de una cañería seca desde la casa contigua. Sólo, cuando el suministro de electricidad fue cortado en toda la zona, la policía pudo penetrar en el interior del refugio de los delincuentes.

New York, 5 de febrero de 1978. Myron L. Sams, presidente de la Muro-Silencioso, Inc., anunció hoy una reducción general de precios, para lograr una mejora del diseño y del volumen de producción en todos los productos de la compañía.

En el futuro, la unidad básica de vivienda de Muro-Silencioso se venderá a 229,95 dólares en lugar de a 289,95. Las unidades especialmente pequeñas, adquiribles para asegurar cercas, reforzar muros, y proveer de mecanismos de seguridad verjas y puertas de locales comerciales, saldrán por tan sólo 19,95 dólares. Se rumorea que este precio, con métodos perfeccionados de producción, seguirá proporcionando pingües beneficios a todos los involucrados en la economía de la empresa, y, por tanto, los precios pueden ser reducidos en ciertas áreas en algunas ocasiones especiales.

Spring Corners, Iowa, 6 de febrero de 1978. Una grúa se encargó hoy de sacar el aparato del ejército, inmovilizado en la zona oriental de la Cross-State Highway.

Se extrajeron catorce pequeñas unidades de estasis de la máquina, de su tractor y de su remolque, y finalmente, dichas unidades fueron transportadas por aire. Hubo dificultades por el hecho de que cada unidad de estasis «congelaba», aparentemente, las unidades precedentes de su hilera. Los expertos en desestatización no sólo debían localizar las unidades, sino que tenían que ponerlas en su orden correcto, y algunas estaban colocadas con mucha astucia, para despistar.

Seaton Bridge, Iowa, 9 de febrero de 1978. La Cross-State Highway fue bloqueada de nuevo; esta vez por una barrera de piel de vaca curtida de ochenta y tres pies de longitud, de cuatro pies de ancho en su base, y dos pies y medio de alto, aparentemente estabilizada con unidades de estasis, y tan dura como el cemento. La Guardia Nacional está patrullando alrededor de Seaton Bridge, a cada lado del bloque.

New York, 10 de febrero de 1978. Representantes de la Muro-Silencioso, Inc., informan que un estudio de los ingenios de estasis, extraídos de la máquina del ejército, en Spring Corners, Iowa, revelan que «no son aparatos de fabricación MS, sino burdas imitaciones hechas por aficionados. No obstante, funcionan».

Spring Centre, Iowa, 12 de febrero de 1978. La Cross-State Highway, que ya está cortada a la altura de Seaton Bridge, ahora se encuentra bloqueada en tres lugares distintos por muros de nieve, levantados con excavadoras, durante la última noche de tormenta, por los granjeros y después estabilizados con ingenios de estasis. Hombres de la prensa, que visitaron la zona, informan que los grandes montículos parecen de hormigón. No es posible acabar con ellos ni con picos, palas, o llamas.

New York, 15 de febrero de 1978. El Dr. J. Paul Hughes, uno de los directores de la Muro-Silencioso, Inc., reiteró esta noche su súplica al Gobierno para que prohíba el uso de aparatos de estasis. Recordó la advertencia de su inventor, su abuelo Everett Hughes, y manifestó que trataba de dedicar el resto de su vida «intentando deshacer el mal que había causado el ingenio».

New York, 16 de febrero de 1978. Myron L. Sams, presidente de la Muro-Silencioso, Inc., anunció hoy que una larva de mosca había permanecido en estasis durante veintiún días sin sufrir daños visibles. Los científicos de la MS, dijo, están trabajando ahora en el problema de mantener en estasis a pequeños animales. Si resulta un éxito, dijo Sams, los experimentos abrirán una puerta al «viaje en el tiempo, de ida solamente», y permitirá que las personas que sufren serias enfermedades esperen, sin dolor, hasta que se encuentre el remedio para que se produzca su curación.

Bonn, 17 de febrero de 1978. Las salvajes acusaciones hechas hoy por los alemanes del Este contra los occidentales refuerzan los rumores de que los «enclaves de unidades de estasis» están floreciendo y se están extendiendo como setas por Alemania del Este.

Informes similares provienen de Hungría, mientras que Polonia informa acerca de cierto número de tanques soviéticos en «estasis».

La Habana, 18 de febrero de 1978. En una frenética alocución, esta noche, «Che» García, Secretario General del Partido Comunista Cubano, anunció que el Gobierno está levantando «muros de estasis» alrededor de toda la isla, y todos esos «bloques de edificios con estasis» que ahora se están construyendo, resistirán «incluso a los yanquis y sus peores bombas de hidrógeno».

No obstante, en un abuso del torrente de vitriolo, el señor García amenazó diciendo que «cualquier foco de individualismo degenerado que surja, será erradicado de la faz de la tierra por la sangre, el sudor y las lágrimas, y por las fuerzas del monolítico socialismo».

Durante algún tiempo, hubo insatisfacción por el actual régimen.

El señor García acusó a la CIA de haber invadido flagrantemente el espacio aéreo cubano lanzando, por toda la isla, «millones de pequeñas y perniciosas unidades de estasis, alimentadas por pilas de potencia extraordinaria», mediante aviones que no podían ser derribados porque estaban protegidos por «otros de esos aparatos inmundos, diabólicos y saboteadores».

Des Moines, 21 de febrero de 1978. El Gobierno del estado de Iowa, después del frustrado asedio de las cuatro granjas colindantes con la Cross-State Highway, ha anunciado hoy que vuelve a abrirse un período para que los propietarios, que consideren que la compensación recibida por la expropiación de parte de sus tierras, para la construcción de la autopista, es incorrecta, puedan presentar sus reclamaciones.

El gobernador recomendó paciencia a los propietarios de tierras colindantes con la autovía y, al mismo tiempo, sugería que enviaran sus quejas a la capital, y también solicitaba que abrieran la autopista al tráfico.

Staunton, Vt., 23 de febrero de 1978. Hiram Smith, un profesor universitario retirado, cuya familia había vivido en la misma granja desde los tiempos de la Revolución, recibe un ultimátum, intimándole a abandonar su hogar.

Se va a construir una presa cerca y la casa del señor Smith va a quedar dentro de la zona inundada.

Al recibir la orden, el señor Smith, que vive en la granja con su nieto de catorce años, manifestó que «no abandonaría su casa si no era muerto o apresado».

Esta mañana, el sheriff trató de ejecutar la orden de evacuación, y fue detenido por un disparo procedente de la casa de los Smith. Al tiro de aviso siguió el vuelo de un pequeño modelo reducido de aeroplano impulsado por pilas, aparentemente controlado por radio, que aterrizó a unos dos mil metros de la casa de los Smith, cerca de un viejo manzanar.

El señor Smith advirtió al sheriff que se apartara de su automóvil y se tumbara en el suelo, si el coche no estaba equipado con un ingenio de estasis, y, en cualquier caso, que no mirara el manzanar.

Se produjo un destello brillante, un estallido, y un estruendo que al sheriff le pareció una explosión de cien toneladas de TNT. Cuando volvió a mirar el manzanar, éste estaba oscurecido con un resplandor grana y nubes de vapor, como si se tratara de un chorro de nieve vaporizada.

El señor Smith sugirió al sheriff que abandonara la propiedad, o el siguiente «bombazo» iría dirigido hacia él.

Nadie se ha acercado a la casa de Smith desde la marcha del sheriff.

New York, 25 de febrero de 1978. El señor Myron L. Sams, presidente de la Muro-Silencioso, Inc., anunció hoy que «definitivamente no hay ninguna conexión entre la explosión de Staunton y la MS Corp., o con sus unidades de estasis. La unidad de estasis es un genio estrictamente defensivo y no puede ser utilizado con propósitos ofensivos».

New York, 25 de febrero de 1978. El Dr. J. Paul Hughes afirmó esta noche que la «bomba retardada» que ayer estalló en Staunton, y de la que ahora se sabe que dejó un cráter radiactivo, llevaba incorporada probablemente una «unidad de estasis». La unidad «estaba conectada, quizás, a un ligero recipiente que contenía material radiactivo. No es preciso que se tratara del material del que estamos acostumbrados a pensar como apto para las bombas de fisión. Tampoco es necesario que haya la cantidad usual de dicho material. Mientras la unidad de estasis estaba activada por una señal de radio o por un mecanismo de relojería, las partículas de alta capacidad energética emitidas por el material radiactivo no podían escapar de su propia cápsula, que estaba entonces en estasis, y resultaba equivalente a una superficie muy dura, densa e impenetrable, parecida a una pared de frontón ideal. Las partículas de alta energía rebotaban al interior, bombardeando el material radiactivo. A medida que la cantidad de partículas con elevada energía fue aumentando dentro del espacio cerrado estático, el material radiactivo, a pesar de su escasa cantidad, alcanzó su punto crítico. Lo que ocurra en semejantes circunstancias depende del material radiactivo que se utilice, del tamaño de la muestra, y de la duración del «guiño»… que es el tiempo que tarda el campo estático en retirarse».

El Dr. Hughes añadió que «éste es un nuevo y muy definido uso destructivo del campo estático, que, según nos asegura el señor Myron Sams, es totalmente inocuo».

Montpelier, V.t., 26 de febrero de 1978. El gobernador anunció hoy la suspensión temporal del proyecto para construir una presa en Staunton, mientras se investigan las numerosas reclamaciones de los propietarios.

Moscú, 28 de febrero de 1978. «Cierto número» de «células aisladas» del «tipo estático-controlado» se han infiltrado en la Unión Soviética. Aquellos que se desvían de la línea establecida son expulsados; es preciso asumir la teoría de que siempre hay alguien que debe rebelarse. Éstos, en localidades importantes, son reducidos por el Ejército Rojo, con gases lacrimógenos, gases tóxicos y reflectores, tácticas de «guerra de nervios», y, en algunos casos, sacando la «célula» y sacándola a pasear. Está generalmente aceptado que aquí no hay tantos problemas como en los países satélites, donde las dificultades alcanzan proporciones astronómicas.

Spring Corners, Iowa, 16 de mayo de 1978. Tras haber sido atendidas todas las reclamaciones de los pobladores de las zonas circundantes de la Cross-State Highway, se ha reanudado el tráfico por la autopista. El panorama presenta un aspecto nuevo y sorprendente al producirse el hecho de que las máquinas de los granjeros desaparecen, metiéndose dentro de túneles, por debajo de la carretera, para pasar de un lado a otro.

Staunton, Vt., 4 de julio de 1978. Hoy tuvo lugar una gran celebración, porque el gobernador y un comité de legisladores anunciaron que el gran proyecto para construir una presa en Staunton había sido abandonado, e iban a ser construidas unas cuantas presas pequeñas, como alternativa al plan previsto.

Bonn, 16 de agosto de 1978. Según informes oficiales, parece que el gobierno de Alemania del Este, el de Hungría, y asimismo una buena parte del gobierno polaco, se encuentran con dificultades cada vez mayores a medida que se incrementan los «enclaves de unidades de estasis», que dejan a los gobiernos a in expectativa. Es difícil pronosticar cuándo va a terminar esto.

Washington, 30 de septiembre de 1978. Esta mañana, el Departamento del Tesoro ha destinado a cerca de ciento ochenta hombres para un «asunto urgente». Su tarea es mantener la creciente Liga Anti-Impuestos, cuyos miembros se calculan actualmente en un número superior al millón de entusiastas hombres de negocios. Los miembros de la Liga, a menudo dificultan la labor de los agentes del Tesoro, utilizando libros de contabilidad y archivos cerrados con unidades estáticas, edificios de oficinas cerrados estáticamente contra los empleados, coches equipados con ingenios de estasis capaces de salir de garajes equipados con unidades estáticas conectadas a los edificios de oficinas estáticas, para que los conduzcan a sus casas estáticas, donde es físicamente imposible que penetren los sirvientes de la ley.

Princeton, NJ, 5 de octubre de 1978. Una conferencia de los científicos más destacados, que se reunieron hoy aquí para intercambiar pareceres acerca de la naturaleza de las unidades de estasis, ha terminado en una violenta discusión. Una de las causas de desacuerdo es la «acción selectiva» de las unidades de estasis, que permite que la luz ordinaria atraviese los cuerpos transparentes, pero bloqueando, al mismo tiempo, el paso de otras radiaciones electromagnéticas.

Esta tarde se produjeron graves desórdenes durante una disertación del Dr. J. Paul Hughes acerca de la «Propagación por ondas de los cuasi electrones». La disertación estaba acompañada de una demostración del ingenio original de Everett Hughes, alimentado por un antiguo generador que estaba pensado para el aparato primitivo. Cuando el ingenio fue adquiriendo velocidad, el Dr. Hughes pudo demostrar la presencia de una esfera de nueve pulgadas de material reflectante en el foco supuestamente vacío del aparato. Esa esfera, aseguró el Dr. Hughes, era la superficie de un espacio evacuado por completo de cuasi electrones, al cual identificaba como «unidades de tiempo».

En ese punto estalló el desorden.

A pesar del barullo, el Dr. Hughes pasó a explicar el valor límite de la velocidad de la luz en términos de la teoría de cuasi electrones, pero fue interrumpido cuando la vibración del ingenio de vapor comenzó a sacudir el techo.

Corre el rumor de que, en principio, la conferencia podría quedar suspendida, y sin publicar.

Washington, DC, 16 de agosto de 1979. Fuentes normalmente bien informadas afirman que los Estados Unidos han desarrollado una «pantalla misil» capaz de destruir los misiles enemigos en vuelo, y teóricamente capaz de crear un muro alrededor de la nación, a través del que ningún tipo de proyectil enemigo podría pasar. Este ingenio, según se dice, está basado en la original unidad de estasis de Everett Hughes, que crea una barrera perfectamente rígida, de tamaño y forma variables, y que puede ser proyectada muy rápidamente con sólo conectar el aparato a una red eléctrica.

Entre otros de los muchos usos militares del aparato de estasis hay que destacar la protección de las bases de misiles, de almacenes de alimento y municiones, la invulnerabilidad de los carros blindados, y, además, hay que tener en cuenta las unidades de conversión rápida, que son capaces de convertir una casa normal en un fuerte refugio a prueba de bombas.

Veteranos observadores de la escena militar dicen que la unidad de estasis varía completamente, invirtiéndola, la ventaja que hasta ahora tenían, en oposición a las defensivas, las armas ofensivas. Esta ventaja tradicionalmente alternante, supuesta finiquitada con el desarrollo de los explosivos nucleares, ha vuelto a dar otra oscilación pendular. Ahora, en lugar de «arma absoluta», tenemos «defensa absoluta». En realidad, ni las bombas de hidrógeno pueden con ella.

Pero, si bien la nación quedaría desprotegida sin la aplicación de esas unidades, los medios oficiales dicen que es preciso encontrar alguna vía efectiva para combatir el uso de unidades de estasis por los gángsters, por los entusiastas de evadir el pago de impuestos, por los sectores rurales separatistas, por los secuestradores aéreos y por los propietarios de tugurios. El último problema que se ha presentado es el de las barricadas, levantadas por timadores en una carretera con mucho tráfico. Los timadores detienen a los viajeros y les cobran un «peaje», y luego desaparecen, antes de que llegue la policía, y se instalan en otro punto para repetir la operación. Debe existir una réplica a todas estas cosas, pero aún no se ha encontrado.

Boston, 2 de septiembre de 1979. Anoche, en Swarton Hall, el Dr. Milton Schummer, Catedrático de Sociología del Wellsford College, habló contra el «individualismo galopante» ante una audiencia de seiscientas personas.

El profesor Schummer dijo que América, que en un principio había sido una tierra de objetivos comunes, se ha convertido en una asquerosa cuna de pedantes individualistas, contestatarios, artistas «nuevos ricos» y «hombres minuto» de todas clases, cada uno de los cuales reacciona contra una condición de vida que pudo parecer excesivamente conformista en su día, pero que hoy, en la perspectiva de los acontecimientos, aparece como la dirección más coherente. El resultado de lo que ocurre hoy es el fraccionamiento de América por divisiones bruscas y sintéticas, y por sectarismos belicosos.

Lo que necesita este país, dijo el Dr. Schummer, es «coordinación de esfuerzos, unidad de objetivos, y supresión de diferencias». Pero, concluyó, «la reacción es demasiado violenta. La tendencia, lo mismo que las mareas, no puede ser cambiada por los esfuerzos humanos. En tres años, esta nación ha ido de la cohesión a la fragmentación, de la independencia al caos, del federalismo al astillamiento, y eso todavía no es todo.

Uno se estremece al pensar en lo que puede suceder en los próximos cien años».