Jakob Wassermann (Fürth, Alemania, 1873 - Altaussee, Austria, 1934), de origen judío, en la década de 1920 fue uno de los novelistas más admirados de su país. Por su condición racial, a partir de 1933 sus libros fueron rechazados en Alemania. Influido por Dostoyevski y Tolstói, en sus escritos dominan los temas de la salvación por el amor, la justicia y las dificultades de la existencia del hombre. Entre sus obras destacan Caspar Hauser (1908), El hombrecillo de los gansos (1915) y su autobiografía Mi camino como alemán y judío (1921).