Cuento-acertijo
TRES mujeres habían sido transformadas en flores y trasladadas al campo; una de ellas, sin embargo, podía pasar las noches en su casa.
Dijo una vez a su marido cuando ya se acercaba el día y, con él, la hora de regresar al campo con sus compañeras y recobrar su figura de flor:
—Si esta mañana vienes a cogerme, quedaré desencantada y ya no tendré que separarme de ti.
Y así sucedió. Ahora bien; se trata de saber cómo la reconoció el marido, puesto que las tres flores eran exactamente iguales, sin la menor diferencia entre ellas.
La respuesta es: La que había pasado la noche en su casa en vez de hacerlo en el campo, no había recibido el rocío, y sí las otras dos. Por eso la reconoció el marido.