Nota del autor
En los tiempos que corren, la gente no sabe valorar a los hombres y mujeres que en defensa de su país, ya sea de forma acertada o equivocada, eso es cuestión de opiniones, cumplen con su trabajo y hacen las cosas lo mejor posible en unas condiciones inhóspitas que solo quien ha participado en una guerra puede llegar a imaginar.
En ningún caso es voluntad de este autor ni de los editores de esta obra utilizar a los miembros del Ejército estadounidense como meros accesorios de una historia de ficción. Nuestra intención es hacer un retrato de esos hombres y mujeres con el mayor respeto y consideración. Por el bien del realismo, nunca se nos ocurriría poner en cuestión su profesionalidad, su patriotismo o su honor.
Pero todos esos soldados debéis admitir que preferiríais luchar con un enemigo con algo más de clase que los que combatís actualmente. Después de todo, no todos los monstruos son tan malos.