AGRADECIMIENTOS
Esta novela no sería lo que es sin los comentarios de todas las personas que leyeron el manuscrito con espíritu crítico. A todos ellos, gracias, y en especial a mi marido por su paciencia a la hora de educar en la ciencia a mi mente de Letras, a mi hermano Luis por animarme a investigar sobre la Viena de fin de siglo y a Miguel Naveros por sus valiosas aportaciones literarias.
CARLA MONTERO