III • EL REGRESO DE BEOWULF
Beowulf vuelve a su patria. Sobre la reina Trida.
A la costa llegaronlos fieros varones,
la tropa gloriosaequipada con cotas
1890 de anillas de hierro.De nuevo el vigía[128]
observó a los señoresque ya regresaban.
No gritó amenazanteen lo alto del risco
a la gente extranjera;a su encuentro corrió:
muy buena acogidalos gautas darían
1895 —dijo— a los hombresque al barco marchaban.
Cargóse en la arenael amplio navío
de proa curvadacon armas de guerra,
corceles y joyas.El mástil se alzó
sobre el rico tesorodel ínclito Ródgar.
1900 Al guardián de su naveuna espada le dio[129],
adornada con oro,de modo que luego
ese hierro brillanteen la sala del rey
su prestigio aumentara.
A su barco subió
y alejóse con élde la tierra danesa.
1905 Amarrado con cuerdase puso en el mástil
el paño del mar.La madera crujía[130].
Ni las olas ni el vientoalteraban el rumbo
del leño del agua;avanzaba el navío,
de espuma cubierto;el viajero del mar,
1910 con su proa curvada,surcaba las aguas.
Divisaron al finde los gautas la costa
que bien conocían:por el viento impulsado
el madero del mara la orilla arribó.
Ya estaba en la playael vigía del puerto
1915 que había oteadopor tiempo muy largo[131]
las aguas lejanas,con ansia aguardando
a la tropa querida.En la arena fijó[132]
con su ancla al navío,que no se llevasen
consigo las olasel barco excelente.
1920 Mandó descargarel botín de los héroes,
las joyas y el oro.Corto camino
tendría que hacerpara verse con Híglak,
el buen redelingo,pues cerca del mar[133]
en su sala vivíacon toda su gente.
1925 Era bello el palacio,poderoso el monarca
de la alta mansión.Era joven Higeda[134],
discreta y capaz,aunque aún pocos años
la hija de Héredhabía habitado
en el fuerte reducto.No era mezquina,
1930 no escatimabaen los ricos tesoros
que daba a los gautas.
Pero Trida terrible[135],
princesa arrogante,a su pueblo injuriaba.
En la corte no habíaguerrero ninguno
con tanto valor—su padre tan sólo—
1935 que osara mirarlade abierta manera[136];
si alguno lo hacía,mandaba ponerlo
en trenzado dogaly rápida entonces,
después de atrapado,entregábalo al hierro,
que en esta querellabrillante dictaba
1940 sentencia de muerte.¡No así se comporta
una noble señorapor bella que sea!
¡Por supuestas ofensasno debe la reina
privar de su vidaal querido vasallo!
El pariente de Hémingcon esto acabó[137].
1945 Ya de ella se hablabade forma distinta
al beber la cerveza;dejó de hostigar
—se decía— a su gentetan pronto la tuvo,
enjoyada la novia,el joven guerrero
de noble linaje,tan pronto llegó
1950 por el pálido mar—lo dispuso su padre—
al palacio de Offa.Bien en su trono
desde ese momento,alabada y benigna,
se supo servirde sus grandes riquezas.
Mucho queríaal señor de vasallos,
1955 del cual se refiereque ha sido el mejor[138]
de los hombres del mundo,de los seres humanos
que ha habido en la tierra,pues Offa ganó
con regalos y hazañas,osado lancero,
el más alto renombre.Gobernó sabiamente
1960 su reino heredado.De él Émer nació
para alivio del pueblo,el pariente de Héming[139],
el nieto de Gármund,bravo en la lucha.
Beowulf en el palacio de Híglak. Comienza el relato de su aventura y pronostica futuras guerras entre daneses y hadobardos.
Con toda su tropaavanzó por la arena
el valiente Beowulfhollando la costa,
1965 las anchas orillas.Al sur relucía
la hoguera del cielo[140].Adelante marcharon;
rápidos ibanal alto palacio
del fiero monarcaque a Ongento mató[141],
a la sala en que el príncipe,el joven caudillo,
1970 regalos hacía.Informósele a Híglak
con gran prontituddel regreso del bravo,
cómo el valiente,su apoyo en la guerra,
al fuerte reductocon vida llegaba,
ileso a la cortede nuevo volvía.
1975 Pronto en la sala,por orden del rey,
se les hizo lugara los recios varones.
Junto al noble parienteel heroico guerrero[142]
un asiento ocupó,tras haber saludado
a su gran soberanocon habla brillante
1980 y selectas palabras.La hija de Héred
cortés en la estanciaentregaba las copas,
servía a los nobles—amábalos mucho—
excelente bebida.Híglak entonces
en la alta moradaempezó a preguntarle
1985 a su buen compañero;ansioso quería
saber del viajeque hicieron los gautas:
«¿Cómo fue tu viaje,oh amado Beowulf,
tú que tan prestoquisiste marchar
por las aguas saladasbuscando combate,
1990 batalla en el Hérot?¿Aliviaste la pena
en el mundo famosadel ínclito Ródgar,
glorioso caudillo?Puso tu marcha
tristeza en mi pecho:por tu suerte temía,
oh querido varón.Te rogué mucho tiempo
1995 que no te enfrentasesal monstruo enemigo,
que dejaras que alláse encargase de Gréndel
la gente danesa.¡Doy gracias a Dios,
pues ahora de nuevocon vida te veo!».
Respondióle Beowulf,el hijo de Ekto:
2000 «Es bien conocidade todos los hombres,
oh príncipe Híglak,mi osada proeza,
la brega ferozque con Gréndel sostuve
en el mismo lugaren que él hostigara
a los bravos skildingoscausándoles daño,
2005 muy largo pesar.¡Su castigó le di!
Jamás en la tierraun pariente del monstruo
ufanarse podrádel nocturno combate
por mucho que vivaesa raza maligna,
apresada en el mal.Cuando entré en el palacio
2010 a ofrecer mis saludosal ínclito Ródgar,
pronto el famoso,el hijo de Halfdan,
luego que supocuál era mi intento,
un asiento de honorcon sus hijos me dio.
Gozaban los hombres:nunca en el mundo
2015 otros bravos hallébebiendo en la sala
con tanto contento.A veces la reina[143]
avanzaba en la estanciaincitando al valor
a los jóvenes héroes:a menudo una joya
entregaba a un valiente;sentábase luego.
2020»La hija de Ródgartambién a la tropa,
a los altos señores,cerveza ofrecía.
Se llama Frawara:este nombre escuché
que en la sala le dabancuando ella tesoros
allá repartía.Le fue prometida
2025 —enjoyada con oro—al hijo de Froda[144];
así lo dispusoel noble skildingo,
el guardián de su reino,al que bien pareció,
entregando a la novia,tratar de acabar
con las fieras batallas.Rara vez sin embargo,
2030 si a un rey se abatió,disfruta la lanza[145]
de largo descanso,aunque valga la esposa.
»Pues ya que en su salacon ella se encuentre[146],
bien puede enojaral señor hadobardo,
y a un bravo cualquierade aquella nación,
2035 el ver tan gozosaa la gente danesa:
ellos lucen ahorala espada anillada,
recia y antigua,que algún hadobardo
corriendo al combateconsigo tenía
y que luego perdiócuando él y los otros
2040 quedaron sin vidaen el choque de escudos[147].
Cuando están en la fiesta,esa espada la ve
un anciano lanceroque bien a los muertos[148]
de antaño recuerda;se enfurece su pecho
y con ánimo tristeentonces comienza
2045 a tentar el corajede un joven guerrero,
le incita a la lucha.Dícele así:
“¿Reconoces, amigo,la espada excelente,
el hierro valioso,que tuvo tu padre,
varón bajo el yelmo,en aquella batalla
2050 en que a manos cayóde la gente danesa,
cuando, muerto ya Wídergeld—muchos con él[149]—
se adueñaron del campolos fieros skildingos?
En este palaciodiviértese ahora
el hijo de aquelque a tu padre mató:
2055 de la hazaña se jactay se ufana del hierro
que tú por justiciadebieras ceñir”.
Así tanto le incitay aviva el recuerdo
con agrias palabras,que luego sucede
que un joven danés,por la hazaña del padre,
2060 de sangre se tiñey tras golpe de espada
se duerme en la muerte.El que queda con vida[150]
—conoce esa tierra—consigue escapar.
Rompen entoncesun bando y el otro[151]
la paz acordada.Íngeld se llena
2065 de furia terribley un tanto se enfría
con tales agobiossu amor a la esposa.
»Yo pienso por elloque es poco segura
la paz en que estánla nación hadobarda
y la gente danesa.
Beowulf continúa su relato.
»Pero ahora de Gréndel
2070 de nuevo hablaréy sabrás de este modo,
oh señor dadivoso,cómo acabó
nuestro fiero combate.Tras haberse ocultado
la joya del cielo,rabioso en la noche
el monstruo llegóal excelso palacio
2075 en que gente dispuestamontábamos guardia[152].
Entonces a Hondskole cupo, espantosa[153],
una muerte fatal:el armado guerrero
el primero cayó.Gréndel se supo
atrapar en los dientesal noble vasallo,
2080 tragóse completoal querido varón.
Sin embargo el cruel,chorreante su boca,
afanoso del mal,no quería marcharse
de la alta moradacon manos vacías:
terrible en su fuerzase echó sobre mí,
2085 codiciosa su garra.Cubríala un guante[154]
amplio y extraño—bien amarrado—
de piel de dragón,al que dábanle fuerza
el poder infernaly las artes malignas.
El feroz malhechorcon él al momento
2090 agarrarme quería—sin culpa ninguna—
y también a los otros.¡No así sucedió
cuando lleno de rabiame puse de pie!
»Largo en excesosería el relato
de cómo venguélos ultrajes del monstruo:
2095 allá, mi señor,de gloria cubrí
con mi hazaña a tu gente.Soltóseme luego,
pudo alargarbrevemente su vida,
mas quedaba en el Hérot,trofeo de guerra,
su brazo derecho,y él por su parte,
2100 humillado y vencido,a su lago corrió.
»Por mi heroica proezacon oro labrado
y magníficas joyasme quiso premiar
el monarca danés,cuando al día siguiente
en la sala tuvimosun rico banquete.
2105 Hubo canto y contento.El anciano skildingo
con mucha experienciaal pasado aludió.
A veces el bravoel arpa tañía,
la tabla del gozo,entonando un cantar[155]
verdadero y doliente;a veces el rey
2110 con destreza cantabauna hermosa aventura;
por la edad apresado,elogiaba con pena
el viejo guerreroel vigor que en la lucha
de joven tenía:en su pecho dolor
al anciano le dabansus muchos recuerdos.
2115»Así disfrutamosel día completo
en la excelsa morada;vínoles luego
a los hombres la noche.La madre de Gréndel
entonces llegódispuesta a cobrarse
la muerte que al hijoen el odio de espadas
2120 le dieron los wedras.La hembra terrible
lo vino a vengarmatando con rabia
a un bravo vasallo.Ásker entonces[156]
quedóse sin vida,el buen consejero.
Al llegar la mañana,la gente danesa
2125 no pudo siquieraponer en la pira
y quemar en el fuego—privado de fuerza—
al amado varón:lléveselo ella
en el puño enemigoa lo hondo del lago.
Esta fue para Ródgarla pena mayor
2130 que el rey de su pueblojamás padeciera.
Con ánimo tristeel egregio señor
me rogó por tu vidaque hiciese una hazaña,
que aumentara mi famabuscando el peligro
en las aguas furiosas.Me ofreció recompensa.
2135»Yo allá me enfrentécon la bien conocida
y horrible guardianadel fondo del mar.
Un tiempo luchamos.Quedaron las olas
teñidas de sangre:le corté la cabeza[157]
en la honda morada,con hierro potente,
2140 a la madre de Gréndel.Yo la vida salvé
con apuro y agobio—¡mi suerte lo quiso!—
y el rey de su tropa,el hijo de Halfdan,
después me entregóabundantes riquezas.
Al uso se atuvoel señor de su gente:
2145 no me fueron negadoslos ricos tesoros,
el premio a mi hazaña;el hijo de Halfdan
me dio recompensasegún mi criterio.
A ti te la ofrezco,oh alto caudillo,
feliz te la entrego.Tú eres en todo
2150 mi único gozo:pocos, oh Híglak,
son mis parientesaparte de ti».
Beowulf y Híglak se intercambian regalos.
Allá hizo traerel pendón del verraco[158],
el yelmo empinado,la cota grisácea
y la espada adornada.Hablóle Beowulf:
2155 «Ródgar me dio,el sabio monarca,
este equipo de guerra.Me rogó que al momento
te hiciese llegarsu saludo amistoso.
Dijo que Hérogar,rey de skildingos[159],
usó mucho tiempoesta cota de malla,
2160 mas que este no quisodejársela al hijo,
que de Hérowar fuese,a pesar de que bien
al valiente quería.¡Disfrútala tú!».
He oído que luegoa las armas siguieron
—ligeros e iguales—cuatro caballos
2165 rojizo-amarillos:corceles y equipo
al rey le entregó.¡Así hace un pariente!
¡No teje con mañay argucia secreta
una red para el otro,no trama la muerte
del buen camarada!Érale a Híglak,
2170 al fiero en la guerra,leal su sobrino;
el contento del otrolos dos procuraban.
A Higeda —se cuenta—el collar regaló,
la joya excelenteque diérale Walto,
la regia señora;tres caballos también,
2175 ensillados y buenos.Después de aquel día
hermoso el collaren su pecho brillaba.
El hijo de Ekto,el famoso guerrero,
mostróse atrevidoen heroicas hazañas.
Alabado vivió:él nunca borracho
2180 a un amigo mataba,no era violento;
el bravo en la luchausaba con tacto
su fuerza terrible,el don generoso
que Dios le entregó.Despreciáronle antaño[160]:
pensaban los gautasque poco valía;
2185 tampoco gustabael señor de los wedras
de hacerle en la salaexcesivo favor;
lo tenían entoncespor poco animoso,
por jefe sin brío.¡Consuelo le cupo
al glorioso guerreropor tanto desprecio!
2190 El intrépido rey,el señor de vasallos,
mandó que trajesen—con oro adornada—
la herencia de Rédel:allá entre los gautas
no había otro hierroque tanto valiera.
Sobre el pecho lo pusodel noble Beowulf,
2195 y también le entregósiete mil de terreno,
palacio y poder.Por propio derecho
heredaron los dosen la tierra de gautas
dominios y predios,pero más poseía
—el mando en el reino—el de rango mayor.