El autor y su obra

Thomas Carlyle nació en Ecclefechan, Escocia. Estudió teología en la Universidad de Edimburgo. Abandonó esa ocupación en 1814 y se dedicó a la enseñanza de las matemáticas durante casi cuatro años. Después viajó a Edimburgo en 1818, donde empezó a estudiar leyes y escribió diversos artículos.

Tras un viaje por París y Londres, volvió a Escocia y ayudó en la revista literaria liberal Edinburgh Review. En 1826 se casó con Jane Baillie Welsh, escritora a la que conoció en 1821. A partir de 1828 vivieron en Craigenputtock (Escocia), donde Carlyle compuso la obra filosófica autobiográfica El sastre sastreado, publicada originalmente entre 1833 y 1834 por la Fraser's Magazine. Aquí, Carlyle comenta la falsedad de la riquezas materiales, detalla su crisis personal y expone su idealismo espiritual. Con esta obra, Carlyle se perfila como un crítico social, con una mirada preocupada por las condiciones de vida de los trabajadores británicos. Durante sus días en Craigenputtock entabló una amistad de por vida con Ralph Waldo Emerson, el célebre ensayista estadounidense. En 1834 se trasladó a Londres, donde recibió el apodo "el Sabio de Chelsea". Formó parte de un círculo literario en el que figuraban los ensayistas Leigh Hunt y John Stuart Mill.

En Londres escribió su exitosa Historia de la Revolución francesa (1837), un estudio histórico basado en la opresión de indigentes, y con el título de El culto a los héroes publicó en 1841 seis de sus conferencias pronunciadas en mayo de 1840, en las que sostiene la tesis de que el avance de la civilización se debe a los hechos y a la influencia que los héroes dejan tras de sí y sobre las gentes y los pueblos en que habitan. Su desdén por la democracia y su alabanza de la sociedad feudal se advierten en buena parte de sus escritos, especialmente en El cartismo (1839) y Pasado y presente (1843). Escribió: "La democracia es la desesperación de no encontrar héroes que nos dirijan". Para entender a este autor Ernst Cassirer, en una gran reflexión que realiza sobre el mito del héroe en su libro "El mito del Estado", nos recomienda poner atención a su devoción por Goethe y por Fichte y comprender su filosofía de la vida expresada en la frase "soy lo que hago". Según Cassirer, ésto eliminaría de sus interpretaciones las visiones románticas que nutrieron a los escritores filonazis, como Lemhan, que encontró en sus textos una justificación para el caudillaje moderno.

Su concepto de la historia queda reflejado en obras como Cartas y discursos de Oliver Cromwell (1845) e Historia de Federico II de Prusia, que consta de 10 volúmenes escritos entre 1858 y 1865. Escribió también una autobiografía titulada Recuerdos, publicada en 1881. En las obras de Ruskin y Dickens encontraremos gran influencia de este pensador.