Notas
[1] El Sr. Ernst Pfeiffer, editor y comentarista juicioso de esta correspondencia, nos dice que mucho más tarde Lou se manifiesta con respecto a este tema, en una carta a la Baronesa von Münchhausen (oct. 1929), de la siguiente manera: «… la idea de que tales métodos no hubieran nunca existido en su juventud me llenaba de amargura. Ya que estos métodos no se aplican sin un grave peligro en un artista realizado (según MI PROPIO MODO DE VER que sin embargo no es el mismo de Freud)». El Sr. Pfeiffer añade: «La decisión completamente lúcida que había adoptado en otra ocasión (en 1912) de oponerse a analizar a Rilke… fue una de las más serias de su vida».
Según unas palabras de Lou sobre la gravedad de esta decisión, la justifica en el sentido de que los gérmenes de lo que posteriormente se manifestaría en las ELEGÍAS, y cuya existencia ella conocía, hubieran sido extirpados por el análisis —era ahí particularmente en donde ella veía el peligro— y la razón de impedir el análisis por todos los medios. (Obra citada, notas y comentarios, p. 570). <<
[2] Nota del editor: aquí se acaba el texto de la carta. <<
[3] Léase: = ∞ y después: = 0. (Nota del editor). <<
[4] La del 27 de junio. (Nota del editor). <<
[5] Poema procedente del diario de Lou. (Nota del editor). <<