La primera edición de Dios en la tierra fue publicada por las ediciones El Insurgente en 1944, con un prólogo de José Mancisidor y una presentación de Ricardo Cortés Tamayo en las solapas, «José Revueltas, su obra».

A continuación damos las referencias bibliográficas de cada uno de los cuentos incluidos en este libro, así como informaciones provenientes de los originales de los mismos, cuando se encontraron.

«Dios en la tierra»

Apareció en la revista Tierra Nueva, año II, n. 7-8, enero-abril de 1941, pp. 47-52. Fue republicado ulteriormente en El Cuento, año II, t. 3, n. 14, julio-agosto de 1965; así como en la revista Mujeres, n. 206, 25 de enero de 1968, pp. 32-33.

«El corazón verde»

Fue publicado en Tierra Nueva, año II, n. 11-12, septiembre-diciembre de 1941, pp. 206-34.

«La conjetura»

Lo publicó El Popular, año IV, t. IV, n. 1215, 5 de octubre de 1941, suplemento dominical, pp. 2-3 y 7.

«Barra de Navidad»

Fue republicado más tarde en Mujeres, n. 206, 25 de enero de 1968, p. 29.

El borrador mecanografiado presenta algunas variantes, tiene como título «Los indios» y está fechado: «Guadalajara, Jalisco, diciembre de 1939».

«El quebranto»

Apareció en la revista Taller, año I, n. 2, abril de 1939, pp. 15-27, con el título «El quebranto (capítulo primero de una novela en prensa)».

Como se sabe, Revueltas extravió los originales de su primera novela «El quebranto» que se encontraban en una maleta que le fue robada en 1939, en Guadalajara. Por lo tanto el propósito que anunciaba la revista Taller no se llevó a cabo. Sin embargo, entre los papeles del autor y los de su primera esposa, Olivia Peralta, se encontraron los borradores (desgraciadamente incompletos) de esta novela corta que se publicará junto con la obra literaria inédita en estas Obras Completas.

«Una mujer en la tierra»

Este cuento se publicó en la revista Nosotros, en 1939 o 1940 (no se pudo determinar la fecha con exactitud), pp. 10-12, con el título «La tierra».

El original mecanografiado lleva este último título y la fecha: «México, D. F., octubre de 1938».

«Preferencias»

Fue publicado en el suplemento cultural de El Nacional, 24 de mayo de 1942.

El original mecanografiado tiene el título «El niño» y la fecha: «México, D. F., febrero de 1940». El primer párrafo no fue incluido; lo damos a continuación:

El pueblo tiene una muerte de colores. Una muerte rosa, de geranios; azul clara, como las paredes; blanca. Una muerte de percal, profundamente alegre, grave, unciosa y con preocupaciones de maravilla. En los poblados, en las rancherías, en las ciudades pequeñas sólo las tumbas importantes tienen cruces negras o aspectos sombríos, de inusitada solemnidad. Las otras son verdaderas cruces, como antes de Cristo: rojas, verdes, con flores, con música y llevan inscripciones inverosímiles, de una ternura simple, que dialoga sin asombros con la inmortalidad del alma y el indudable mundo de los muertos. Un difunto es algo tan importante que origina en su torno, desde luego, un dolor común, placentero, que adorna y embellece ese cuerpo frío, popular, tan repentinamente amigo. Los muertos siempre tienen gran prestigio, como que la muerte lleva en sí mayor religiosidad que la vida, más comunión, más recuerdo. El difunto está ahí, tendido, y los deudos le ofrecen, no sin orgullo, con una compungida cortesía: —¿Quiere verlo? —y levantan la ventanilla si no tienen el cajón abierto por entero—. ¡Quién iba a decir…! —se exclaman entonces—. ¡Si apenas el otro día…! ¡Pobrecito!

¡Todo mundo ayuda en la hora de la muerte! Muy pocos están solos. En vida se podrá haber sido infeliz, solitario. Pero ¿cómo después? ¿Después, cuando el cuerpo es aún más pobre y aún más triste?

Primero fue un silencio, vertical, abrumador […]

«La venadita»

Apareció en el Diario de Durango, 10 de febrero de 1943 y en la revista El Hijo Pródigo, año I, n. 1, 15 de abril de 1943, p. 31, con el título «El saurio inmóvil». Fue republicado ulteriormente, con su título definitivo, en Mujeres, n. 206, 25 de enero de 1968, p. 25.

En la primera publicación (en el Diario de Durango), el cuento está fechado por el autor: «Durango, Dgo., febrero 7-8 de 1943».

«El hijo tonto»

Este cuento se publicó en la revista América, n. 30, 31 de agosto de 1944, pp. 42-46.

El original mecanografiado está fechado: «México, D. F., marzo 20 de 1938».

«La soledad»

Fue publicado en La Voz de México (órgano del PCM), n. 160, 26 de febrero de 1939, pp. 6 y 7; así como en la revista Ruta (órgano de la Confederación de Estudiantes Socialistas de México), n. 11, abril de 1939, pp. 35-42. Fue republicado en El Popular, 8 y 9 de marzo de 1959. En la versión de La Voz de México, el cuento aparece fechado por el autor: «Enero de 1939».

«El abismo»

Apareció en la revista Ruta, n. 5, octubre de 1938, pp. 33-37. Fue republicado en el Diario del Sureste (Mérida, Yucatán), n. 21, 6 de junio de 1954.

«Verde es el color de la esperanza»

El original mecanografiado está fechado: «México, D. F., junio de 1943».

«La acusación»

Se publicó en la revista América, n. 22, noviembre-diciembre de 1943, pp. 25-27. Fue republicado en El Nacional del primero de abril de 1945.

El original mecanografiado está fechado: «México, D. F., noviembre 28 de 1943».

«El dios vivo»

Lo publicó la revista Estampa, año VI, n. 274, 6 de septiembre de 1944, p. 15.

El original mecanografiado está fechado: «Arequipa, Perú, enero 14-15 de 1944».

«La caída»

El original mecanografiado está fechado: «México, mayo de 1943».

«¿Cuánta será la oscuridad?»

Fue publicado en Estampa, año VI, n. 271, 16 de agosto de 1944, pp. 24-25.

El original manuscrito está fechado: «México, D. F., julio 27 de 1944».