101 Los signos tópicos de los solsticios formaban, con los de los equinoccios que se cruzan con ellos, las cuatro «puertas del tiempo» señaladas, respectivamente, por cuatro estrellas: el solsticio de verano por Sirio, la más brillante de la bóveda —llamada Sotis por los egip- cios que calculaban los años a su salida—; el solsticio de invierno por Fomahaut, la boca del Pez austral; el equinoccio de primavera por Aries; y el equinoccio de otoño por Antares, el corazón de Escorpio, de reflejo rojizo.<<