CAPÍTULO 11

Los señores del narco

Durante los últimos cuatro años, el gobierno federal ha asestado algunos golpes mediáticos a los integrantes del cártel de Sinaloa para intentar desviar la atención acerca de una serie de indicios que apuntan a una complicidad de fondo con esa organización.

Sus acciones siempre han sido contra brazos operativos, pero no han dañado el corazón de ese cártel: sus negocios. Su arteria principal ubicada en el aeropuerto de la ciudad de México, permanece intacta y en plena operación, bombeando dinero a sus líderes, lo que finalmente les da su gran poderío y les permite continuar con su negocio criminal.

En el circuito interno del AICM, que conduce de la terminal uno a la dos, sobre la calle Fuer/a Aérea Mexicana número 425, en el hangar nueve zona (¡, se encuentran las oficinas y el hangar de la empresa,Aviones S.A. de C.V., la cual oficialmente se dedica a la reparación de aeronaves. En la publicidad con que se anuncia esta

compañía en internet se señala: "Aviones S.A de C.V. cuenta con la mejor ubicación dentro de las instalaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde cuenta con hangares, taller de mantenimiento, centro de partes y refacciones. Y dispone de 15 mil metros cuadrados de plataforma conectada a las pistas del aeropuerto, lo que facilita su uso".

Esta empresa también está instalada en los aeropuertos Jorge Jiménez Cantú, de Atizapán de Zaragoza en el Estado de México; Hermanos Serdán, de Puebla; Aeropuerto Internacional de Cuernavaca General Mariano Matamoros, y el Aeropuerto Internacional de Toluca Adolfo López Mateos. Igualmente se dedica a la renta de aeronaves, como describe su publicidad: "En Aviones S.A. de C.V. estamos conscientes sobre las necesidades de nuestros clientes, para lo cual contamos con una división especializada que le permite resolver sus requerimientos de vuelos, ya sea privados o empresariales a través de la renta de la aeronave más conveniente para usted".(94)

Según reveló Richard Arroyo Guízar, María Fernanda, hijastro de El Rey Zambada, en sus declaraciones ministeriales en la PGR, realizadas en 2008, en el hangar que tiene esta compañía en el AICM se cargan y descargan cotidianamente droga y dinero de la organización que encabezan Ismael El Mayo Zambada y El Chapo.

Estas afirmaciones fueron un misil contra la organización criminal a la que pertenecían él y su padrastro.

[...] deseo manifestar que al lado de la terminal no. 2 del Aeropuerto Internacional de la ciudad de México, sin recordar el nombre y número de la calle, contamos con una compañía llamada Aviones la cual se encuentra pegada al hangar de AESA [ASESA], misma que tiene acceso directo al aeropuerto y que el nombre se puede ver desde afuera, que la fachada es de color blanco y el rótulo de color azul, que desde la calle se aprecian como oficinas que son de dos niveles que en ellas trabajan aproximadamente 30 personas.

Para entrar al lugar hay una pluma que custodia un policía, en el interior se encuentra un avión de carga azul que nunca tuvimos oportunidad de mover pero se compró con dinero ilícito. Dicho avión casi lo pintan cada mes pero la última vez que lo vi estaba pintado de color azul, sin rótulos. En el mismo lugar contamos con dos helicópteros, uno de ellos lo rentamos al municipio de Ecatepec y el otro está en reparación porque se les averió una hélice, ambos helicópteros también los adquirimos con dinero ilícito, están pintados con azul y blanco y dicen Ecatepec, Estado de México, dichos helicópteros también los ocupábamos para ubicar las posiciones de los enemigos y para paseo, en el mismo lugar hay tres pipas de gasolina que nos pertenecen, dos pequeñas y una grande de color blanco y tienen rotulado en las puertas el nombre de "aviafuel". También deseo manifestar que el prestanombres de la empresa Aviones S.A. de C.V. se llama Raúl Marín, sin recordar su otro apellido y quien administra dicha empresa es un militar al que le decimos Raz.

La descripción que María Fernanda hizo de esta empresa y la forma de llegar a ella era exacta. Además, para la PGR no era el primer señalamiento contra esa compañía. En otra indagatoria (SIEDO/UEICCS/132/2008) se afirma que el 30 de marzo de 2008

agentes de la PFP —dirigida entonces por Edgar Eusebio Millánescoltaron en vehículos oficiales un cargamento de precursores químicos a la zona del hangar de Aviones, S.A. de C.V. El contenedor traía 600 kilos de efedrina que había llegado procedente de Holanda en el vuelo KL685 de KLM.

También resultó cierto que por lo menos uno de los helicópteros que usaba el municipio de Ecatepec en la administración 2006-2009 era rentado y se encontraba en el AICM. El ayuntamiento de ese municipio del Estado de México reconoció en octubre de 2009 que en la administración 2006-2009, encabezada por el perredista José Luis Gutiérrez Cureño, sí se rentó un helicóptero, lo cual coincide con los tiempos señalados por el testigo protegido.

Pero curiosamente el municipio, ahora gobernado por el priísta Eruviel Avila, señala que no se sabe a ciencia cierta con qué empresa se alquilaba dicha aeronave, porque en los archivos del ayuntamiento "no existe copia" del contrato de arrendamiento.

El gobierno de Ecatepec sólo sostiene que la compañía Servicios Aéreos de la Laguna, S.A. de C.V, reclama "verbalmente" el pago del servicio de renta de un helicóptero solicitado por la administración 2006-2009 y reconoce que dicha aeronave se encuentra en el aeropuerto de la ciudad de México, tal como había declarado el hijastro de El Rey Zambada. Pero no especifican en dónde.

Entre los servicios ofrecidos en internet por Aviones, S.A. de C.V., se encuentra el de pintura a aeronaves, por lo que es también factible que el avión al que se refirió María Fernanda hubiera sido pintado periódicamente, como señaló. Y efectivamente, el hangar de esa compañía se localiza cerca del hangar de la empresa ASIÍSA, Aeroservicios Especializados S.A. de C.V., ubicada asimismo en la zona G, pero hangar cinco. Y el Io de diciembre de 2008 la K;K reconoció "que se cuenta con elementos suficientes para tener por cierto el hecho de que los inculpados [el clan de los Zambada] participaban activamente en operaciones tales como traficar drogas en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México".

rastro de las declaraciones hechas por el testigo protegido María Fernanda. Después de evasivas, finalmente el ayuntamiento reconoció que sí se había rentado por lo menos un helicóptero.

Aviones, S.A. de C.V., fue constituida en 1948, en la ciudad de México. Formalmente sus dueños eran Héctor Mariscal, Benjamín Burillo (Pérez), Raúl Esponda y Aarón Sáenz (Garza), quienes entonces aparecían como los únicos accionistas. En la escritura constitutiva de ese año no se incluyen sus segundos apellidos. De acuerdo con el acta, el objeto social de la empresa es "el ejercicio de la industria y del comercio en el ramo de aviones, por lo que podrá adquirir y enajenar por cualquier título toda clase de aviones nuevos y usados, así como refacciones materiales y accesorios para su reparación. Proporcionar servicio mecánico para aviones, por lo que podrá adquirir y enajenar gasolina, combustibles, grasas, lubricantes y demás materias necesarias para estos fines".

Esa amplia gama de servicios pudo haber facilitado al clan de El Mayo Zambada la adquisición de aviones para su organización criminal de manera encubierta y, al mismo tiempo, contar con todo lo necesario para su servicio y mantenimiento. Asimismo pudo hacer factible que en el hangar de la empresa hubiera depósitos de combustible para surtir a las narconaves.

Presuntamente, Benjamín Burillo es tío de Alejandro Burillo Azcárraga, primo hermano de Emilio Azcárraga Jean. Otro de los socios, Aarón Sáenz Garza, fue político y militar, desempeñando cargos públicos en los gobiernos de Adolfo de la Huerta, Alvaro Obregón y Plutarco Elias Calles. Fue dos veces gobernador del estado de Nuevo León, fundador de empresas como Mexicana de Aviación, Banca Confia, Seguros Atlas y varios ingenios azucareros.

Con el paso del tiempo, los dueños fueron cambiando, aunque la empresa siguió en manos de las mismas familias. Actualmente los propietarios oficiales de esta compañía, que podría estar vinculada con El Mayo Zambada, son la empresa Consan, S.A. de C.V., socio mayoritario con 76 mil 800 acciones, Héctor Manuel Sáenz Couret con 40 mil 248, Aarón Sáenz Hirschfeld con dos mil 640, Arturo Estrada Flores con 288, y Benjamín Salmón Couret con 24. Y en el Registro Público de la Propiedad se señala que Antonio Mariscal Sáenz es el presidente de Aviones, S.A. de C.V.

Al menos desde 1978 la empresa relacionada aparentemente con El Mayo Zambada ya operaba en el hoy Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Cuando la compañía fue constituida se estipuló que tendría una duración de 20 años, pero esto se modificó para prorrogar su existencia hasta 2020.

Los accionistas de Consan —socia mayoritaria de Aviones, S.A. de C . V — son prácticamente los mismos: Aarón Sáenz Couret (el accionista mayoritario, hijo de Aarón Sáenz Garza), Alicia Hirschfeld de Sáenz (esposa de Aarón Sáenz Couret), y sus hijos Aarón Sáenz Hirschfeld, Eduardo Sáenz Hirschfeld, Marcela Alejandra Sáenz Hirschfeld y Fernanda Sáenz de Simón, con un capital mínimo fijo de ocho millones y medio y un capital variable de poco más de 85 millones de pesos. Su ambiguo objeto social es "promover, construir, organizar y participar en el capital de sociedades mercantiles".

Sáenz Couret es conocido como el zar de otro polvo blanco: el azúcar. Hace décadas fue gerente de la empresa estatal Compañía Azucarera de Navolato, en Sinaloa, y es ahora el presidente de Grupo Azucarero Sáenz. En 2007 su hijo, Aarón Sáenz Hirschfeld, fue presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera, y como hombre de empresa está relacionado con varios ingenios azucareros. Sáenz Hirschfeld fue uno de los donadores para la campaña del P N en 2006 cuando fue electo Felipe A Calderón Hinojosa. Su nombre aparece en la cuenta "Aportaciones de Simpatizantes Campaña Federal", subcuenta "Nacional", como uno de los donantes del PAN (30 mil pesos). Pero su donativo estuvo plagado de irregularidades. Según el reporte del

Instituto Federal Electoral (IFE), el PAN nunca entregó el recibo original de su aportación y la copia que presentaron no estaba firmada por Aarón Sáenz Hirschfeld.

La historia empresarial de los dueños "oficiales" de Aviones, S.A. de C.V., es controvertida.

Aarón Sáenz Couret fue, junto con otros de sus familiares, propietario de Banca Confía, antes Banco Azucarero, hasta 1982, año en que fue nacionalizado. Héctor Manuel Sáenz Couret y Aarón Sáenz Couret siguieron siendo parte de lo que quedó de Banca Confía antes de ser nacionalizada, ya que conservaron sus filiales Aseguradora Adas y Arrendadora Atlas, de la cual Sáenz Couret es el presidente.(95) Aunque ya no eran dueños de Banca Confía siguieron obteniendo beneficios de esa institución, como créditos millonarios de hasta cien millones de pesos (1990).

Otro socio de la Arrendadora Atlas es Rolando Vega Iñiguez, cuñado de Aarón Sáenz Couret, quien entre 1961 y 1980 ocupó en tres ocasiones la presidencia de la Asociación de Banqueros de México. Fue antecesor del también banquero Arcadio Valenzuela Valenzuela, quien dirigía Banco del Pacífico, antes de su expropiación en 1982, y Banco Comermex. Valenzuela Valenzuela aparece en documentos de la DEA de 1985 acusado de lavar dinero para la organización delictiva del Pacífico.

Sáenz Couret y Sáenz Hirschfeld fueron también socios y parte del consejo de administración de Banco del Atlántico antes de ser nacionalizado en 1982. Banco del Atlántico fue uno de los bancos que quebraron en la década de 1990 por presuntos malos manejos administrativos, algunos de ellos probablemente relacionados con lavado de dinero. Dichas deudas, por cierto, fueron absorbidas por el gobierno federal a través del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa). Sáenz Couret y Sáenz Hirschfeld también resultaron beneficiados por el rescate bancario, ya que habían recibido un supuesto préstamo por parte de Banco del Atlántico, Banca Confía y Bancomer en beneficio de la Arrendadora Atlas por cien millones de pesos, sin que tuvieran capacidad para pagarlo.

Es importante señalar que Banco del Atlántico fue una de las instituciones bancarias que el ex gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva Madrid, utilizó para lavar dinero procedente del crimen organizado. Antonio Ibarra Salgado, secretario de Turismo del gobierno del estado de Sinaloa encabezado por Jesús Aguilar Padilla, fue funcionario de Banco del Atlántico de 1993 a 1997.

Durante esa época Antonio Ibarra habría facilitado la entrada a cuentas bancarias de capitales pertenecientes al cártel de Sinaloa. Ibarra Salgado, quien también era amigo del empresario Juan Vizcarra ex candidato a la gubernatura de Sinaloa, fue ejecutado en Culiacán el 22 de diciembre de 2009. En 2004 Banco del Atlántico desapareció formalmente cuando se fusionó con Grupo Financiero HSBC.

En 1997 Banca Confía, bajo la administración de Jorge Lankenau,fue intervenido por la Comisión Nacional Bancaria,y en 1998 se fusionó con Citibank México, institución con la que a su vez Banamex se fusionó en 2001. Por su parte, Lankenau pasó ocho años en prisión acusado de otorgar créditos a empresas insolventes, de efectuar operaciones en paraísos fiscales y de delincuencia organizada. Uno de los casos controvertidos fueron los préstamos a Arrendadora Atlas.

Al analizar el rescate bancario, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) hizo varias observaciones respecto a que el Fobaproa absorbió indebidamente una deuda de Arrendadora Atlas por cien millones de pesos, en contravención a la Ley de Instituciones de Crédito.

En 1996 los socios de Aviones, S.A. de C.V., hicieron operaciones financieras con CBI Casa de Bolsa a través de Arrendadora Atlas, por un monto de 597 millones de pesos; esto ocurrió unos días antes de que la Comisión Nacional Bancaria interviniera gerencialmente a su filial CBI Casa de Cambio, porque "fueron detectadas operaciones no autorizadas y/o que no se apegan a las sanas prácticas cambiarías". En pocas palabras, se detectó lavado de dinero.

En julio de 2008 Arrendadora Atlas empeñó unos bienes "sin transmisión de posesión" a favor de Banco Multiva, del Grupo Financiero Multiva, por 10 millones de pesos." En 1992 esta empresa, propiedad de Olegario Vázquez Raña,.se vio involucrada en la investigación judicial llevada a cabo por la I'CK en torno al caso de los muertos de Iguala, aquel primer escándalo en el que salió a relucir el nombre de Joaquín Guzmán Loera. En la indagatoria resultó que el hangar que ocupaban Olegario y su hermano Mario era utilizado para guardar los aviones de los narcotraficantes Amado Carrillo Fuentes, Héctor Palma Salazar y lil Chapo.

Además de la controvertida trayectoria empresarial de los socios "oficiales" de Aviones, S.A. de C.V., todo respecto a esta compañía es turbio y confuso. Habría que empezar por decir que el responsable de la administración del AICM es el director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Héctor Velázquez Corona, un hombre muy cercano al presidente Felipe Calderón."

Desde el 17 de enero de 2005,Velázquez Corona ocupa este puesto clave, y a pesar de los escándalos por la probable operación del cártel de Sinaloa en el aeropuerto, no ha sido removido de su cargo ni se sabe que exista alguna investigación en proceso.

Así pues, la administración del AICM se niega a rendir cuentas de cuándo, cómo y por qué la presunta compañía de El Mayo Zambada, Aviones, S.A. de C.V., tiene un hangar estratégico en el aeropuerto más importante del país. Por lo pronto se han resistido a entregar copia de los contratos que amparan la operación de dicha empresa, uno de los cuales data del Io de agosto de 1994.

Este último fue otorgado por el gobierno de Carlos Salinas de Gortari pocos meses antes de que concluyera su administración, y vencía el 31 de julio de 2008. Durante el sexenio de Vicente Fox, bajo la administración deVelázquez Corona, el aeropuerto firmó un convenio de modificación del contrato de arrendamiento con la compañía el 17 de noviembre de 2005. Lo único que la administración del aeropuerto aceptó informar es que Aviones, S.A. de C.V., paga al AICM, por concepto de renta del hangar, la módica cantidad de 41 mil 30 pesos más IVA. Una ridiculez si se compara con las ganancias en millones de dólares que le pueden arrojar sus operaciones en el lugar cada semana. Aunque la administración del aeropuerto reconoce que Aviones, S.A. de C.V., no tiene ya ningún contrato de arrendamiento vigente, no pueden o no quieren quitarle ese espacio estratégico a una empresa cuestionada y denunciada por su supuesta vinculación con el cártel de Sinaloa.

A pregunta expresa para esta investigación, la autoridad señaló tibiamente:

[...] a la fecha la moral Aviones S.A. de C.V. no tiene celebrado contrato de arrendamiento para ocupar el hangar que ocupa, y el motivo por el cual se encuentra ocupando dicho espacio deriva de las acciones judiciales que han sido interpuestas en contra de la moral toda vez que este Aeropuerto no puede motu proprio privar de la posesión a la arrendataria; no obstante lo anterior se informa que en el expediente se encuentra copia del contrato suscrito en su oportunidad con la moral, con vigencia de Io de agosto de 1994 al 31 de julio de 2008 en que concluyó su vigencia, así como la copia del convenio modificatorio al contrato, firmado el 17 de noviembre de 2005.

Otra grave irregularidad que por sí misma sería motivo para sacar a la empresa Aviones, S.A. de C.V., del hangar que ocupa es que con su anuencia opera en el mismo lugar la compañía M T C Aviación, S.A. de C.V., pese a que los lincamientos del AICM prohiben un procedimiento de este tipo. Esta otra compañía fue creada en 1997 con un capital de 50 mil pesos, también se dedica a la reparación de aeronaves y al servicio de taxi aéreo, aunque desde 1994 están prohibidos los vuelos privados en el AICM. Por alguna razón la medida no se aplica en su caso, y al parecer ellos son los únicos que pueden aterrizar y despegar aviones privados en el codiciado aeropuerto.

De acuerdo con el acta constitutiva, los dueños de M T C Aviación, S.A de C.V., son los hermanos Mario Tirzo Maldonado Carranza y José Maldonado Carranza. Al momento de crear la sociedad, el primero se presentó como ingeniero en aeronáutica, socio mayoritario de la empresa, con 45 acciones, y administrador único. El otro propietario lo es con cinco acciones.

La postura oficial respecto a esta empresa por parte de Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, S.A. de C.V., Servicios Aeroportuarios de la Ciudad de México, y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, S.A de C.V., es evasiva y delata complicidad. Aunque aseguran que de manera ilegal Aviones, S.A. de C.V., comparte el hangar de Avenida Fuerza Aérea número 465, dicen que desconocen cómo se llama la empresa con la que lo hacen, cuando es su obligación saberlo en su condición de administradores del aeropuerto. Y pese a que reconocen que esa razón es causal de rescisión del contrato, la compañía sigue operando sin problemas, y todo ello a dos años de las imputaciones directas del hijastro de El Rey Zambada. La administración del aeropuerto señala: "Se tiene conocimiento que la empresa Aviones S.A. de C.V. comparte el hangar pese a que el instrumento legal que le dio origen a la ocupación contempla como causal de rescisión el subarrendamiento como se cita en el punto anterior, desconociendo estar a mi cargo el nombre de las empresas con las que lo comparte".(96)

Si en verdad Aviones, S.A. de (:.V., es una empresa propiedad de miembros del cártel de Sinaloa, como denunció el narcotraficante Richard Arroyo Cíuízar, se estaría sin duda ante el mayor escándalo de corrupción y colusión con el narcotráfico de las últimas décadas, en el que estarían implicadas autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, la SSP federal e incluso la Secretaría de la De fensa Nacional hasta el más alto nivel.

La supuesta compañía del capo del narcotráfico ha recibido por parte de la Sedeña por lo menos 32 contratos entre 2001 y 2008, para darle mantenimiento a las aeronaves del Ejército mexicano y la Fuerza Aérea Mexicana. Según el dicho del sobrino de El Mayo Zambada, los aviones oficiales fueron puestos literalmente en manos del enemigo. ¿Enemigo?

De esos contratos adjudicados a Aviones, S.A. de C.V., 22 fueron firmados durante la administración de Vicente Fox, mientras que los otros 10 se suscribieron durante la presente, por los directores generales de Administración de la Sedeña. Las adjudicaciones fueron otorgadas por los generales Fausto Manuel Zamorano Esparza, Rodrigo A. Arteaga Ocampo en el sexenio pasado, y Augusto Moisés García Ochoa en el actual; este último es uno de los hombres de mayor cercanía e influencia del general Guillermo Galván Galván, secretario de la Defensa Nacional. El general García Ochoa es uno de los principales aspirantes a ser titular de la Sedeña en el siguiente sexenio, aunque su carrera ha sido cuestionada por acusaciones directas de boicotear la detención de integrantes de la organización del Pacífico, concretamente de Amado Carrillo Fuentes, ex jefe de El Mayo El 29 de diciembre de 1999 el general Jesús Gutiérrez Rebollo, ex titular del Instituto Nacional de Combate a las Drogas, acusado de proteger a El Señor de los Cielos, declaró en su defensa que en varias ocasiones la Sedeña estuvo a punto de detener al narcotraficante gracias a la información que se obtenía de informantes ligados con la organización de Amado Carrillo Fuentes. Cada vez que Gutiérrez Rebollo contaba con el lugar preciso donde estaría el capo del Pacífico, el secretario de la Defensa, Enrique Cervantes Aguirre, enviaba a Augusto Moisés García Ochoa, titular del Centro de Inteligencia Antinarcóticos Nacional de la Sedeña, acompañado del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE), a realizar el operativo.

En por lo menos dos ocasiones, acusó Gutiérrez Rebollo, García Ochoa dejó escapar a Amado. La primera fue a finales de 1995 o principios de 1996, cuando consiguieron el dato preciso del momento en que El Señor de los Cielos iba a partir del domicilio que habitaba en la ciudad de México. Todo estaba listo, y cuando al fin el auto donde viajaba Amado salió escoltado por una patrulla de la Dirección de Seguridad del Distrito Federal, García Ochoa no realizó la aprehensión del capo "por razones desconocidas", dijo Gutiérrez Rebollo. La segunda vez ocurrió en la terminal aérea de Toluca. Las autoridades sabían a qué hora aterrizaría un avión que transportaba al capo, sin embargo, según el propio Gutiérrez Rebollo, no se logró la captura "debido a que el general García Ochoa ordenó una serie de movimientos dentro del aeropuerto que alertaron al esperado individuo trayendo como consecuencia que no arribara a dicho aeropuerto".

La gran mayoría de los contratos de la presunta narcoempresa fueron otorgados por adjudicación directa o por invitación a cuando menos tres personas; es decir, sin licitación pública de por medio. Los servicios contratados por la Sedeña a Aviones, S.A. de C.V., van desde la adquisición de refacciones y reparaciones de componentes hasta el mantenimiento de aeronaves. De acuerdo con el contenido de esos contratos, la Sedeña habría puesto en manos de la supuesta narcoempresa sus helicópteros Bell 206, aviones Cessna 206, aviones King Air C-90, un Super King Air 300, un Boeing 727-200, un Pilatus PC-7, un Hércules C-130 y 67 aviones Cessna 182S Skylane de cargo en la Fuerza Aérea Mexicana. Incluso en algunos contratos se tuvo contemplado que Aviones, S.A. de C.V., podría hacer vuelos de prueba de los aviones militares para verificar su buen funcionamiento después de la reparación.

Para la entrega de una gran parte de las refacciones compradas por la Sedeña a Aviones, S.A. de C.V, incluso se le abrieron las puertas de la base aérea de Santa Lucía, en el Estado de México, o las de Lester Industries Inc., en San Antonio, Texas. En algunas ocasiones los componentes han sido llevados a Santa Lucía en contenedores. En otros contratos, como el de la póliza de mantenimiento de 67 aviones Cessna, firmado el 26 de agosto de 2003, se permite al proveedor "trasladar los aviones con falla a un lugar adecuado para su reparación".

En la mayoría de los contratos firma como representante de la empresa Antonio Federico Mariscal Sáenz, quien funge como director general de la empresa, función que combina con su actividad de consejero suplente de la Arrendadora Atlas.

En 2009 la Secretaría de Marina firmó con Aviones, S.A. de C.V., dos contratos para la compra de refacciones de aeronaves, y el Instituto Nacional de Geografía e Informática (INI.CI) le ha otorgado 12 contratos de 2004 a 2009, II por reparación de sus aviones Cessna y uno por "transporte aéreo", pese a que dicha empresa no tiene permiso de la SCT para brindar ese tipo de servicio.

Otra dependencia relacionada con los temas de seguridad pública que dio contratos a Aviones, S.A. de C.V., fue la PFP en 1999, cuando su titular era Wilfrido Robledo Madrid —actual director general de la Policía Federal Ministerial— y Genaro García Luna ocupaba el puesto de coordinador de Inteligencia para la Prevención del Delito.

El 19 de septiembre de 2000 la PFP, que entonces dependía de la Segob —cuyo titular era Diódoro Carrasco—, le compró a Aviones, S.A. de C.V., cinco aeronaves Cessna 182s por 1.

millones de dólares. La actual SSP se negó a informar qué área de aquella PFP había solicitado dicho equipo. En la revisión de la cuenta pública del año 2000, la ASF hizo observaciones al contrato otorgado a Aviones, S.A. de C.V., porque consideró que, aunque las bases de licitación eran específicas, la firma del contrato la PFP se amoldó a los intereses de la turbia compañía; incluyendo la entrega de las aeronaves en las instalaciones de Cessna Aircraft en la ciudad de Independence, Kansas. La ASF determinó que, a pesar de que supuestamente le habían dado el contrato a esa empresa porque era la de la oferta más barata, al final resultó más caro.

Además de Aviones, S.A. de C.V., Richard Arroyo Guízar, María Fernanda, afirmó que desde 2007 contaban con toda una red de funcionarios de la SSP federal y de la AFI que les ayudaban a aterrizar aviones con droga en el AICM, y a sacar la mercancía. Cabe recordar que hasta principios de 2010 la AFI y la SSP eran controla das de forma simultánea por García Luna.

María Fernanda denunció específicamente al delegado regional de la AFI en la PGR metropolitana, Roberto Sánchez Alpízar, designado en ese cargo por García Luna. A él le pagaban 75 mil dólares mensuales de soborno para trabajar con el cártel de Sinaloa, de los cuales 50 eran para él y 25 para su segundo de a bordo identificado con la clave XI.

De acuerdo con el testimonio del testigo protegido, en la red de complicidad con la organización criminal también trabajaba el agente de la AFI Edwin Said González Isais, quien estaba adscrito al aeropuerto por parte de la delegación metropolitana de la PGR; supuestamente él les ayudaba a introducir maletas con cocaína, servicio por el cual los narcos le pagaban 10 mil dólares mensuales. El policía de 37 años de edad entró en la PJI: en 1995, cuando tenía 22 años, permaneciendo en su puesto en la AH creada por García Luna. En 2002 estaba adscrito aTabasco, y en 2008 al Distrito Federal.

"Hacía detenciones en el misino aeropuerto para nosotros, ayudaba dándonos protección hasta la salida cuando bajábamos un avión con cocaína", reveló elocuente el sobrino de Mayo liambo 111, el hijo de ¡il Rey Zambada, también reconoció a Edwin como el policía que una tarde de febrero de 2008 fue a ver a su padre a una residencia de Bosques de las Lomas ubicada frente a plaza Duraznos. En esa ocasión el agente de la AH no iba solo, según el delincuente, sino que iba acompañado del jefe regional de la agencia: Roberto Sánchez Alpízar en persona.

Por su parte, Bayardo recordó que Edwin reclutaba para la organización criminal "ínulas" que transportaban droga o dinero, incluso a otros países. Describió que en una ocasión, antes de la ruptura entre los integrantes de La Federación, Sergio Villarreal, El Grande, quien operaba el aeropuerto para El Mayo, usó a una de las personas contratadas por Edwin para viajar a Venezuela, donde supuestamente fue recibido por autoridades del gobierno de aquel país —sin especificar sus nombres o cargos—, a quienes les entregó dinero de parte de los narcotraficantes.

Tras las declaraciones ministeriales en su contra, Edwin fue detenido el 13 de noviembre de 2008 cuando acudió a rendir su declaración. Tres días después fue liberado con las reservas de ley, por cambio de situación jurídica, así que se presume que actualmente es testigo protegido. Mientras tanto, Sánchez Alpízar, pese a las imputaciones directas en su contra, siguió laborando en el mismo cargo al menos hasta mayo de 2009.

Otro testigo de la PGR, con la clave Jennifer, quien afirma haber trabajado para Edgar Valdez Villarreal y su jefe El Barbas, reveló que el AICM no era el único aeropuerto usado por La Federación para el trasiego de droga, también estaba el de Cancún. Un agente de la AFI, Edgar Octavio Ramos Cervantes, El Chuta, sargento segundo, fue señalado como el contacto de la organización desde marzo de 2007. De acuerdo con Jennifer, Marcos Arturo Beltrán Leyva manejaba entonces el aeropuerto del Caribe para toda La Federación, por lo que había dado instrucciones para que todos los socios del cártel pudieran transportar su mercancía vía aérea como si fuera el director general de las pistas del aeropuerto. Por sus servicios, El Chuta recibía 50 mil dólares para repartirlos entre Nicolás Hernández, delegado de la PC.R en Quintana Roo, y Vega Romero, el subdelegado. Por cada avión que aterrizaba se pagaban 450 mil dólares a la PFP, 200 mil dólares a José Luis Soledana Ortiz, ex director de aeronáutica civil en Cancún, 200 mil dólares a José Luis Ortiz Martínez, su segundo de a bordo, 100 mil más para militares, dinero que era entregado a un teniente del área de inteligencia y a los encargados del control canino. Asimismo le pagaban 100 mil dólares a Salvador Rocha Vargas, secretario de Seguridad Pública municipal, durante el gobierno de Gregorio Sánchez Martínez.

De marzo de 2007 a febrero de 2008, a cambio de poco más de 19 millones de dólares, La Federación habría bajado 13 aviones en el aeropuerto de Cancún, gracias a la complicidad de autoridades de todos los niveles.

La ruptura en La Federación obligó a los funcionarios públicos que trabajaban para la organización a negociar con uno de los bandos para salvar su vida. Cuando La Chuta supo que había pleito entre los jefes —explicó el testigo María Fernanda— fue a buscar a i:7 Rey Zambada a la ciudad de México por medio de Edwin: El motivo de acercarse a la organización era con la finalidad de que no se tomara represalias en su contra por pertenecer a la organización de Beltrán l eyva, además dejó dicho que no iba a apoyar a Arturo Beltrán en contra nuestra Se entrevistó c o n él a mediados del mes de julio de este ano |200H| en una de las oficinas que se tienen localizadas en esta ciudad, en particular un inmueble que se ubica en la calle K í o Bamba |... | en esa ocasión jesús Zambada (¡ardale indicó que no iba a tomar represalias en su contra, simplemente que no se metiera c o n su organización acordando que ya no podría recibir mercancía de Arturo en el aeropuerto ya que esa zona ya la tenia controlada la organización de los Zambada.

Tiempo después, La Chuta fue cambiado a la ciudad de México, donde siguió ayudando a lil Mayo y su clan. Ahora desde ahí trabajaba para el cártel de Sinaloa "bajando maletas de cocaína y subiendo dinero a los aviones junto con la Policía Federal Preventiva para Cancún, Quintana Roo", recordó pertinazmente el testigo protegido Jennifer.

Jesús Zambada Reyes, sobrino de El Mayo, falleció la madrugada del 20 de noviembre de 2009 en la casa ubicada en la calle de Xitle número 87, en Santa Ursula en la ciudad de México. En el sitio, supuestamente custodiado por agentes federales ministeriales las 24 horas, encontraron colgado el cuerpo inmóvil de Rambo III.

En el mundo del narcotráfico corre la negra historia de que fue el propio Mayo, con la anuencia de su hermano El Rey, quien dio la orden de matar al joven por haber testificado contra los suyos. El hijastro de El Rey Zambada, María Fernanda, fue enviado en 2010 a Estados Unidos en calidad de testigo protegido y desde allá sigue haciendo peligrosas declaraciones contra la organización de Sinaloa y sus cómplices.

Hasta ahora, los enemigos y traidores del cártel de Sinaloa han caído uno tras otro, y conforme eso sucede, más y más poder acumula esta organización criminal.

Los capos son gente muy primitiva, casi analfabetas la mayoría de ellos.Tienen poca capacidad de reflexión, excepto cuando se trata del negocio y el dinero que éste habrá de reportarles. Para todo lo demás son gobernados por una voluptuosa agresividad que, según ellos, les permite sobrevivir en su medio.

En ese mundo en el que viven, por cierto, se admira a quienes llegan a tener educación a nivel de licenciatura, como si eso automáticamente fuera sinónimo de inteligencia. A este respecto se cuenta una anécdota que ejemplifica dicha actitud muy generalizada entre los narcos: en un reclusorio se reunieron a jugar volibol pacíficos y golfos, esos mismos que si se veían en las calles se acribillaban. De un lado quedó como capitán un viejo capo de Sinaloa y del otro un joven narco del cártel del (íolfo. Al observar que el joven no podía hacer correctamente una jugada, el viejo hizo el siguiente comentario a uno de los integrantes de su equipo:

—¡Es increíble que este tipo juegue tan mal!

—¿Por qué es increíble? —le preguntó su interlocutor, sin saber bien a bien a qué se refería su amigo.

—¡Porque fue a la universidad y ahí les enseñan todo! —contestó suspirando profundamente el legendario jefe, ya retirado a fuerza.

Pero si alguien pone a un narco en posición de elegir entre inteligencia y lealtad, no dudará ni un instante en pronunciarse por la lealtad, una cualidad supuestamente invaluable para ellos (sobre todo en un entorno donde abundan las traiciones). Ahora intentan participar de ambas "virtudes" enviando a sus hijos a la universidad. Todavía habrán de transcurrir varias generaciones para que los amos del narcotráfico que se dedican a lidiar día a día con su ilegal mercancía sean hombres preparados, con algún tipo de formación profesional.

Quienes sí comprenden ese cambio generacional son El Mayo y El Chapo, por lo que prácticamente a todos sus hijos los han mandado a estudiar.Vicente Zambada Niebla, El Mayito, claro heredero del imperio de su padre, hizo una carrera en el Tecnológico de Monterrey, mientras que los hijos de El Chapo se han graduado de doctores o de licenciados en administración.

Respecto a los vástagos de El Chapo, muchos pensaron que Iván Archivaldo Guzmán Salazar, El Chapito, era el más cercano a su padre dentro del negocio, pero al parecer quien hasta ahora le sigue mejor sus pasos y se presenta como su pupilo más obediente es Alfredo Guzmán Salazar, Alfredillo, el menor de los hijos que tuvo en su matrimonio con Alejandrina. Cuando Guzmán Loera cayó en prisión, Alfredillo tenía apenas nueve años, ahora que tiene 24, el gobierno de Estados Unidos lo ha identificado como el coordinador logístico de la entrada de múltiples toneladas de cocaína y heroína a ese país.

La única regla que impera en las luchas de los capos de la droga es la de la vendetta: "Si tú me haces algo, yo te hago el doble".

Así, en el caso de que un grupo le descuartice un lugarteniente a otro, la respuesta del agredido será no descuartizar a uno, sino a dos. De este modo, la violencia avanza en una impulsiva espiral hasta que casi se olvida la forma en que todo empezó.

Se trata de gente muy volátil, con un agudo instinto de supervivencia, intuitivos y llenos de contradicciones; aunque hablen de lealtades, en realidad no son fieles a nada ni a nadie. La máxima que rige sus vidas es: "Yo gano y todos pierden". Su brutal consumo de droga y alcohol, o el propio estrés provocado por el mortal negocio, los vuelve paranoicos y entran en pánico con extrema facilidad; en un instante aquel con quien se están drogando o bebiendo deja de ser su compañero de juerga y se convierte en la peor amenaza, lo cual los conduce a actuar en consecuencia.

También tienen muy bien delimitados los roles que cada quien desempeña en su negocio. Para ellos los empresarios que les lavan el dinero son sus aliados, sus auténticos socios y, por ello, resultan capaces de verlos con respeto. Se trata de gente que "trabaj a " como ellos y que "arriesga". No sólo estiran la mano como los políticos o los policías. Si alguien les pregunta quién busca a quién, su respuesta es:"Los empresarios nos buscan porque quieren nuestro dinero para hacer más dinero".Y por lo que ha trascendido acerca de sus transacciones, en muy contados casos hay reclamos acerca de un mal negocio entre ellos.

La coraza de acero que blinda los negocios del narcotráfico está constituida justamente por las redes urdidas con los empresarios, no con empresarios pequeños, sino con aquellos que han desarrollado grandes consorcios. Y si hay una organización criminal que a lo largo de su historia ha sabido manejarse en ese ámbito de poder en México, ésta ha sido la organización del Pacífico; siempre bajo el mando de sus grandes cabezas: desde Miguel Ángel Félix Gallardo y Amado ("an illo Fuentes hasta 1:1 Mayo y lil Chapo.

Edgardo Duscaglia, el asesor de la ONU en materia de crimen organizado, ha comprendido bien esta parte de la historia, porque la ha estudiado aquí y en otros países concluyendo que el gobierno de México mantiene como intocables a los señores del narcotráfico, es decir, a los grandes empresarios vinculados con este negocio ilícito y criminal. Lo explica así: No se está haciendo lo principal: atacar el motivo fundamental por el que existen los grupos criminales organizados, que es el de expandir su patrimonio derivado de actividades ilícitas, para de alguna manera poder dedicarse a una dolce vita. El objetivo de esos grupos criminales es legalizar sus patrimonios, incorporarlos a la economía legal y pagar impuestos.

Yo siempre les digo a mis amigos y colegas que el objetivo de El Chapo Guzmán es pagar impuestos. Al legalizar sus patrimonios —que se originan de 22 tipos de delitos— y pagar impuestos, los grupos criminales fijan su éxito. Su mayor conquista ocurre cuando logran esconderse en la economía legal y oficializar los recursos que han generado por medio de delitos que van desde la trata de seres humanos, el contrabando y la piratería, hasta la extorsión, el secuestro y el tráfico de drogas. De hecho, las drogas ocupan el segundo sitio de los delitos que generan un mayor flujo de capital; en el primero están la piratería y el contrabando.

Es por eso que tenemos un problema de comprensión en la mente del presidente de la República, quien lamentablemente está muy mal asesorado. Los medios legales e institucionales que el gobierno federal mexicano ya posee para identificar y decomisar esos patrimonios en la economía legal, no son utilizados, por lo tanto la delincuencia organizada se sigue expandiendo: la mexicana y la de otros 12 países que operan en México.

No olvidemos que la delincuencia organizada mexicana es la única en la que nos focalizamos, pero como México se ha convertido en un paraíso patrimonial para grupos de delincuentes internacionales, acá podemos ver a criminales chinos, japoneses, ucranianos o rusos, que compran propiedad inmobiliaria y generan retornos económicos a través de inversiones en determinados sectores de la economía, como en la construcción, los fideicomisos o los químicos.

Todo eso el gobierno federal no lo ha tocado.

Me refiero a que en México la probabilidad de que un grupo criminal sea identificado —lavando dinero y patrimonios—, investigado y procesado, es de menos de uno por ciento.

Durante los últimos años, la impunidad de los empresarios coludidos con narcotraficantes ha convertido a México en un paraíso no sólo para el crimen organizado nacional, sino también internacional. Continúa Buscaglia: México se ha transformado en un país muy atractivo para que los grupos criminales operen y laven su patrimonio. Obviamente, los empresarios legales, que son en parte los beneficiarios de este patrimonio, sienten que el flujo de dinero que los lia favorecido durante décadas les ha permitido expandirse y generar altos retornos en la economía legal.

Por esa razón la élite empresarial mexicana —los empresarios legalmente constituidos, las entidades morales— se ha resistido a la aplicación de medidas de combate a la delincuencia organizada, medidas sin las cuales este cáncer de violencia y corrupción va a seguir aumentando. La compra de armas, la logística de transporte - camiones, barcos, submarinos—, se financian a través de estos patrimonios escondidos en la e c o n o m í a legal. Así que la m a n o que tira una granada contra soldados o contra ciudadanos mexicanos, la mano de ese sicario, de ese operativo, también es la del empresario legal que está financiando esas actividades. Por lo tanto tenemos que asignar responsabilidades penales y civiles a los empresarios legales que han sido identificados en algunos países; que están ligados a los principales grupos criminales nacionales y a los de los otros 12 países que operan en México.

Dentro del mundo del narcotráfico operan mecanismos bien aceitados para lavar dinero principalmente a través del sistema bancario mexicano, señalan fuentes directamente ligadas a esas actividades. Prácticamente cualquier banco acepta depósitos millonarios en efectivo, procedentes de aquí o de otras partes del mundo, a cambio de comisiones que oscilan entre tres y siete por ciento, pero que no se reportan en ningún lugar. Dependiendo de los montos es el nivel jerárquico del banco en el que se toman dichas decisiones, llegando incluso a los consejos de administración, afirman testigos de ese tipo de negociaciones. La medida tomada en 2010 por el gobierno de Felipe Calderón para gravar con mayor impuesto los depósitos en efectivo sólo provocará que ese porcentaje de comisión que se paga a los bancos aumente, pero no impedirá que el lavado de dinero continúe.

Para Buscaglia, la falta de actuación contra las grandes empresas que lavan dinero tiene también tintes políticos: La razón política es que muchas de estas empresas, de acuerdo con los casos que hemos investigado en el exterior, terminan siendo las empresas que financian precampañas y campañas políticas: por lo tanto los políticos, según su percepción, no se quieren pegar un tiro en el pie.

La razón táctica es que las autoridades federales mexicanas piensan que si comienzan a atacar y desmantelar esas estructuras patrimoniales se les va a caer la economía formal.

Ése es un gran error conceptual. Cuando uno habla con colegas de Hacienda, ellos parten de la base de que si empiezan a decomisar activos en la economía legal, el crecimiento económico se va a ver afectado negativamente. Yo siempre les digo que es al revés. Ya en este momento hay mucho capital que no llega a invertirse en México porque muchos inversionistas extranjeros tienen temor y terror de que sus capitales de fondos de pensiones y fondos mutuales se vean mezclados c o n capitales criminales que han sido lavados. Sin duda el hecho de que no se limpie la economía legal como proponemos representa un efecto negativo. Por eso el presidente Calderón

y su administración, como las anteriores, porque no podemos culpar a una sola administración, se han resistido a aplicar las medidas pertinentes.

Nos enteramos de que el gobierno mexicano envía cada vez más soldados y policías aquí y allá, pero los patrimonios criminales permanecen intactos. Por su parte, los grupos criminales 110 se quedan con los brazos cruzados, para defenderse reasignan más recursos a la corrupción y a la violencia. La única manera de destruir este círculo vicioso de más soldados, más policías, más violencia, más corrupción, es sacarles a los delincuentes miles de millones de dólares de la economía legal. Sólo así se podrán desarticular y desmantelar sus bases logísticas, de transporte y compraventa de armas. Y eso el gobierno de Calderón no lo está haciendo porque, insisto, en el mejor de los casos tienen la percepción equivocada de que eso afectará negativamente el crecimiento económico. Lin el peor de los casos le estarían pisando la cola a las empresas que financian campañas para los partidos políticos mexicanos.

A los políticos, policías, militares y funcionarios públicos, los narcos los ubican en otro apartado de su existencia. Los procuran, los seducen, les pagan campañas electorales o promociones en el gobierno, pero al final los consideran sus empleados y siempre los tratarán como tales; los usan, aunque saben que tarde o temprano los van a traicionar. Por eso cada vez más emplean el recurso de grabar sus conversaciones o cualquier encuentro que tengan con ellos, de esta forma evitan el homicidio o la tortura, y pueden chantajearlos con el fin de hacerlos cumplir. Luego de que estos personajes pagan un soborno y éste es aceptado de ninguna manera admitirán un no como respuesta.

Hay políticos, policías, militares y empresarios que han amasado inconmensurables fortunas haciendo mancuerna con los capos que hoy tienen en jaque al país. Su impunidad sólo garantiza la cadena de sangre. Sin esos pilares —empresarios, políticos y funcionarios públicos— simple y sencillamente el negocio de los capos de la droga no prosperaría. En este sentido el asesor de la ONU advierte: Uno de los pilares fundamentales de la expansión de los grupos criminales es la protección política. Colombia ya ha enfrentado este problema de corrupción [en determinado momento este país procesó judicialmente a 32 por ciento de sus legisladores], los jueces y fiscales italianos también, Estados Unidos, por supuesto, los países europeos en su gran mayoría, pero no vemos que México esté siguiendo ninguno de estos ejemplos; no hay un ataque a la corrupción en serio. Lo único que vemos son espasmos, como el "Michoacanazo", que más que un operativo sistemático nacional, fue un show, donde la mayoría de las causas se le terminaron cayendo a los fiscales debido a que no generan material probatorio adecuado, y confian en testigos protegidos de dudoso origen, que de alguna manera también comprometen a las autoridades.

No hay salida fácil para la élite empresarial y política; tienen que combatir la corrupción en su propio ámbito, tienen que combatir el lavado patrimonial que ha alimentado los asesinatos de ciudadanos en este país. Tienen que combatir los capitales que les han generado una pachanga de décadas a los empresarios mexicanos de la élite más encumbrada. Los políticos tienen que empezar a combatir la cloaca criminal en su propio seno; deben impedir que el patrimonio criminal financie sus campañas y que los miembros de sus partidos colaboren con sindicalistas que le lavan dinero a los cárteles deTijuana, Sinaloa, Juárez, del Golfo, o Los Zetas.

Los tres pilares fundamentales que les han permitido a varios paí ses contener la delincuencia organizada están ausentes de México y de cualquier funcionario mexicano, y lo desafío a que me pruebe lo contrario; no hay absolutamente nada hecho hasta hoy, en relación con esto. Hay un pacto político de impunidad y de corrupción que impide la implementación de estas medidas. No es por ignorancia, no es por falta de dinero, tampoco por falta de personal entrenado, es por que hay un pacto político de impunidad que permite que esta situación perdure. Y mientras tanto, como dije antes, la negligencia imperdonable está generando miles de homicidios al mes. Eso no lo va a perdonar la historia.

La enfermedad de la narcocracia mexicana (narcotraficantes, narco empresarios y narcopolíticos) es contagiosa y comienz a generar focos de infección en otros puntos del continente. Uuscaglia lo advierte así al preguntarle por qué México se ha convertido en un problema de seguridad para la región: Cuando grupos criminales mexicanos como IAK<¡ /leías pisan territorio guatemalteco y van a lugares como Zacapa, lo primero que hacen es comprar a las autoridades. Eso no es nuevo, lo hacen todos los grupos criminales del mundo, pero en este caso uno se entera de que, además de comprara las autoridades locales, debido a que es un país con muy poca gobernabilidad política, llegan incluso hasta la oficina de Alvaro Colom [el presidente guatemalteco! para comprar a sus asesores y funcionarios cercanos; además colocan micrófonos en la oficina presidencial. Eso significa generar inestabilidad política.

Al presidente C o l o m le han intentado hacer 1111 golpe varias fuerzas políticas que fueron compradas por Los Zetas o alternativamente por Sinaloa, dos grupos que desde hace tiempo tienen una pugna en Guatemala.

En Paraguay, un país con problemas de gobernabilidad y niveles de pobreza espantosos, peores que los de México, ya se han infiltrado en el Poder Legislativo y en algunos sectores empresariales legales, conjuntamente con empresas brasileñas y colombianas. También han estado financiando iniciativas políticas para hacerle un juicio político al presidente paraguayo Fernando Lugo, para sacarlo del poder y colocar a su títere.

Entre los narcotraficantes es común la siguiente expresión: "Los gringos te hacen y te deshacen. Ellos dicen cuándo eres y cuándo no eres". Quizás esta idea tiene que ver con el origen de todo esto. ¿Qué pensarían ahora los creadores del plan Irán-cowíra al observar a los narcos de aquellos años, con los que la CÍA trabajó, convertidos en auténticos monstruos? Aquellos socios pequeños, minoritarios, de Pablo Escobar Gaviria, que en la década de 1980 le ayudaban a cruzar la droga a Estados Unidos, ahora se han transformado en una auténtica pesadilla.

El informe realizado por el Centro de Inteligencia Nacional de la Droga del Departamento de Justicia de Estados Unidos, llamado "Evaluación Nacional de la Amenaza de la Droga 2010", revela el tamaño del animal: Las organizaciones de tráfico de droga mexicanas siguen representando la mayor amenaza de tráfico de drogas a Estados Unidos. Las organizaciones de tráfico de droga mexicanas son ya los proveedores predominantes de drogas ilícitas en Estados Unidos y están ganando aún mayor fuerza en el mercado Este de las drogas por encima de las organizaciones criminales de Colombia [...] las organizaciones de tráfico de drogas mexicanas son las únicas que tienen presencia en cada región de Estados Unidos.(97)

Hoy por hoy, los cárteles mexicanos son los que controlan la mayor parte de la venta y distribución de cocaína, heroína, metanfetaminas y mariguana en el territorio norteamericano, muy por encima de los colombianos, la mafia china o la rusa, y son los únicos que tienen presencia en todas las regiones de la Unión Americana. El Departamento de Justicia de Estados Unidos tiene claramente identificado este crecimiento exponencial de los cárteles mexicanos en su país: [...] han ampliado su cooperación con la base callejera de Estados Unidos y con las bandas que se encuentran en prisión para la distribución de las drogas. En el año 2009 la distribución de drogas de los cárteles mexicanos de nivel medio y al menudeo en Estados Unidos estaba formada por más de 9 0 0 mil criminales aglutinados en alrededor de 20 mil pandillas en dos mil quinientas ciudades de ese país.

Todo un ejército de la Mexican Mafia, como suelen llamarlos.

Y desde esta perspectiva, la llamada "guerra contra el narcotráfico" emprendida por Calderón parece ser exclusivamente verbal, declarativa. Como dirían algunos corresponsales extranjeros, "los funcionarios mexicanos creen que hablar, hablar y hablar es casi tan bueno como hacer".Y en México se hace bastante poco.

Aunque en público el presidente de México diga que ninguna batalla entre el gobierno y los narcos lia sido perdida, se dice que en eventos privados el atribulado jefe de gobierno ha reconocido desde hace más de un año que la guerra está perdida. El lo sabe, lo demás es propaganda política.

Más allá de la mera propaganda discursiva, el hecho es que al crimen organizado en México no le han hecho ni una hendidura en su colosal aparato de negocios. De acuerdo con la "Evaluación Nacional de la Amenaza de la Droga 2010", las organizaciones mexicanas aumentaron los volúmenes de tráfico y venta de heroína, metanfetaminas y mariguana debido "principalmente a que aumentó la producción de esas drogas en México".

Por supuesto existen cifras que avalan estas afirmaciones. Al respecto, Buscaglia sostiene: Hay una cifra que vincula a la Confederación Nacional de Sinaloa con tres mil siete empresas legalmente constituidas, aquí y afuera del país, éstos son indicios, obviamente, pero que después está en manos de los fiscales investigar y procesar, pero las autoridades mexicanas no han hecho nada al respecto.

En cualquier país avanzado y civilizado del planeta cuando tú detienes al miembro de un grupo criminal, normalmente ella o él provee material con potencial probatorio para que puedas identificar empresas de construcción, empresas cívicas, fideicomisos, cuentas bancarias. Acá en México eso no ocurre, la detención es un show de

la Secretaría de Seguridad Pública federal. Y el show de la detención es simplemente un insumo.

En el pacto de impunidad hay un trágico show protagonizado por funcionarios federales. Es un insulto al pueblo mexicano, al que se le quiere hacer creer que con detener a decenas de miles de personas la delincuencia organizada mexicana va a bajar; que con enviar a valerosos soldados, ya sea de la Marina o del Ejército, la violencia va a disminuir. No es así. Enviar soldados o policías sólo va a dar resultados cuando al mismo tiempo se desmantelen los patrimonios de miles de millones de dólares de los siete principales grupos criminales mexicanos; cuando los criminales se empiecen a preocupar de que sus empresas y sus fideicomisos están siendo decomisados, de que ya no tienen cómo financiar mayor corrupción y mayor violencia.

En los últimos años se ha gestado un fenómeno muy preocupante: de acuerdo con cifras oficiales, de 2004 a la fecha hay una tendencia en Estados Unidos a que el mercado de consumidores de drogas se estanque. Si bien aún no ha disminuido, tampoco ha aumentado. En contraste, en México la tendencia al consumo va a la alza, y eso está directamente vinculado con el crecimiento de la violencia.

De acuerdo con la información de las propias organizaciones criminales, muchas de las disputas en las calles mexicanas se deben a las peleas de las bandas narcomenudistas por el apetitoso mercado local. A ese nivel callejero muchos grupos ya cuentan con los recursos necesarios para comprar armamento de alto poder y han sido capaces de montar cierta estructura organizacional que les permite actuar.

La escalada de violencia aumenta cuando en esas disputas territoriales, de calle a calle, intervienen los narcotraficantes dedicados al medio mayoreo, quienes quieren que los narcomenudistas vendan su droga y no la del bando contrario. La combinación de esos factores que incrementan la violencia es lo que se ve día a día en muchas ciudades de México. Mientras el presidente Calderón lleva a cabo su "guerra", 110 existe una política social seria que vaya en contra del consumo de drogas, y mientras se carezca de una estrategia sólida en este sentido, el botín interno será cada vez más apetitoso para los narcotraficantes, en contraste con el mercado de Estados Unidos, que a pesar de tener una población mucho más grande, porcentualmente tiende a disminuir.

Miles de millones de dólares que cruzan cada semana la frontera son producto de las ganancias de la venta de droga en Estados Unidos por parte de los cárteles mexicanos. Concentran el dinero en Chicago, Los Ángeles, Atlanta, Nueva York y Carolina del Norte, lo preparan para su transportación y luego es introducido a México. Así se afirma en el reporte del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

El crecimiento de los grupos de crimen organizado en Estados Unidos es un efecto de la impunidad con la que operan en México. Particularmente por lo que se refiere al cártel de Sinaloa. Por ello, tanto dentro de los cárteles como en las áreas de inteligencia mexicanas, hay quienes piensan que el gobierno norteamericano prefiere lidiar con una sola organización criminal. Sobre este punto, Edgardo Buscaglia considera: Las agencias norteamericanas piensan que siempre es más fácil combatir a una estructura criminal para imponer las reglas del juego, pero no van a negociar. Cuando esas agencias hablan de concentrar y consolidar el mercado criminal, consideran que siempre es mucho más factible controlar a una sola organización consolidada, que a cientos de átomos que no se vinculan muy bien entre sí y que se hallan en una situación caótica de inestabilidad. Ahora bien, en Estados Unidos nadie habla de negociar, sino de imponer las reglas del juego y darle salidas a estos grupos criminales a través de amnistías o beneficios procesales como los que consigue la ley federal mexicana contra la delincuencia organizada; darles salidas como la deVladimir Putin en Rusia, donde hubo una imposición de reglas tácitas a grupos criminales para que se dejaran de cometer atropellos, pero nadie está hablando de negociar, siempre es bueno que se consolide uno, pero hay que imponerle las reglas del juego.

Sin embargo, la gran pregunta es si con la frágil gobernabilidad y la ausencia de democracia que prevalecen en México se puede hacer frente a la consolidación de un solo cártel y la "narcocracia" que podría acompañarla. Con base en su experiencia, el asesor de la ONU considera que esto no resulta posible: No, con este Estado débil se te colapsa institucionalmente el país y se transforma en una mafiocracia; p o r eso Estados Unidos no es un Estado colapsado, pretende imponer las reglas del juego. La expresión " imponer las reglas del juego" ya te está diciendo que el Estado no es disfuncional; en este momento México no está en condiciones de imponer nada. Por eso los personeros de la izquierda y la derecha de la élite mexicana, el pan y el í'Ki), continúan hablando de negociar con la delincuencia organizada, porque quieren la salida fácil, y no se dan cuenta de que la salida fácil, la de [César] (¡aviria o la de [Ernesto] Samper [ex presidentes de Colombia|, va a llevar al colapso total del Estado mexicano.

No obstante, todas las acciones realizadas por el gobierno de México entre diciembre de 2009 y septiembre de 2010 parecieran ir encaminadas justo en esa dirección, el camino que un día siguieron los tristemente célebres mandatarios colombianos.

Mientras los señores del narco sigan teniendo millonarias ganancias a un muy bajo costo y riesgo el terrible negocio de las drogas no parará. Las cifras de sus márgenes de utilidad son abrumadoras. Hoy por hoy, señalan fuentes ligadas con ese negocio, 1111 kilo de cocaína de buena calidad se compra en Colombia en dos mil 500 dólares, se vende en Nueva York en 28 mil dólares y en España en 33 mil euros. Eso hace que no sólo existan los grandes capos vendedores de droga, sino que éstos compartan el gran pastel con pequeños comerciantes que, moviendo un cuarto de tonelada de cocaína a la semana, obtienen enormes ganancias sin ser detectados por alguna autoridad. Doscientos cincuenta kilos de cocaína caben perfectamente, dicen, en un par de maletas, y de ese nivel de narcotraficantes hay cientos en nuestro país.

Los discursos van y vienen, pero en el momento de la verdad el gobierno federal suele fallar una y otra vez.

La tarde del 29 de julio de 2010 el general Édgar Luis Villegas, subjefe operativo del Estado Mayor de la Sedeña, confirmó que Ignacio Nacho Coronel Villarreal había muerto durante un operativo realizado en Guadalajara, Jalisco. Sostuvo que lo mataron cuando el narcotraficante intentó evadir la acción para detenerlo.

Nacho Coronel vivía su mejor época como criminal, El Rey del Cristal controlaba ya todo el mercado de la metanfetamina y comenzaba a producirla en México. Sin embargo, en lo personal estaba "tocado". Hacía unas semanas, sicarios de Héctor Beltrán Leyva habían secuestrado y asesinado a su hijo de 16 años, dicen que el capo estaba destrozado anímicamente.

A las 5:30 horas del viernes 30 de julio, los militares pidieron la intervención del ministerio público del fuero común y del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) para el levantamiento del cadáver de Coronel Villarreal. Habían pasado casi 18 horas de los hechos de sangre. Al médico forense únicamente se le solicitó el levantamiento de cadáver, el dictamen de tiempo de evolución cadavérica, la práctica de necropsia, pruebas de alcohol y droga.

La fijación del lugar de los hechos corrió a cargo de la SIEDO. En la misma casa donde dicen que el narcotraficante fue asesinado estaba el cuerpo de una mujer joven que también murió en el operativo, aunque sobre ella nunca hablaron las autoridades.

Quienes vieron el cadáver de Nacho Coronel aseguraron que su cuerpo estaba limpio, no presentaba huellas de tortura ni maltrato físico. Se trataba de un hombre blanco, mediano de estatura, delgado, quizás con un poco de gordura en el abdomen. La barba lucía bien recortada. Era una réplica de una fotografía que recientemente había publicado el semanario Proceso, y se suponía que era de sus años mozos. Pero poco o nada coincidía con otra fotografía, publicada por el mismo semanario, y en la cual Coronel se ve de mayor edad.

Su cuerpo tenía seis impactos de bala aparentemente producidos por un arma larga. De acuerdo con la ubicación de los tiros, el supuesto capo fue sorprendido entre dos fuegos, por el flanco derecho e izquierdo. De arriba hacia abajo, y por el costado, dos fueron mortales. Uno le entró por el cuello del lado derecho, le rompió el omóplato y bajó hasta perforar los pulmones; se afirma que esa bala se fragmentó provocando un daño letal. El otro le entró por el costado izquierdo, a la altura del intestino.

Aquel día el presidente Calderón fue bastante discreto en su reacción sobre la supuesta muerte del capo. No festinó, como sí lo hizo con motivo de otras detenciones pasadas, y más recientes, como la "captura" de Edgar Valdez Villarreal, IM Iiarhiv, la cual personalmente tuileó a las redes sociales.

Mientras a nivel nacional los medios de comunicación publicaban distintas versiones sobre la muerte del socio de /:'/ Mayo Zambada y lil Chapo (Guzmán, la necropsia arrojaba resultados inquietantes: "Cadáver del sexo masculino cuya edad probable oscila entre los 40-45 años. Más cercana a la primera". Eso no podía ser.

Nacho Coronel, de acuerdo con la propia ficha de la ssi\ el Cisen y el im, nació el Io de febrero de 1954. Sólo se difiere si eso ocurrió en Veracruz o en Durango, pero en la fecha todos coinciden. Eso significa que para julio de 2010 el buscado narcotraficante habría tenido 56 años. ¿Cómo podía entonces su cuerpo presentar la

edad biológica de 40 años? La identificación dactiloscópica arrojó "la fórmula dactilar: V/4443 V/1442, subfórmula 3/1334 3/134". No se encontró ninguna huella en el archivo dactiloscópico decadactilar del IJCF, así que la fórmula dactilar se envió al gobierno federal y supuestamente dio positivo en el sistema "AFIS" en el estado de Sinaloa, en la Procuraduría General de Justicia, "con el NCP 250000048045R, con el nombre de Dagoberto Rodríguez Jiménez, de fecha 6 de diciembre del año 2000, con fecha de nacimiento Io de enero de 1964, con clave de identificación 40507". Y también aparentemente resultó positivo en el registro criminal en la Policía Ministerial en Culiacán, "con el nombre de Dagoberto Rodríguez Jiménez, con fecha de nacimiento 31 de julio de 1964, clave de identificación 060111426P01, con el NCP 250601005631-F, situación de la persona".(98)

En el boletín número 492 de la PGR, con fecha del 17 de diciembre de 1993, se informó acerca de los avances en la investigación del asesinato del narcotraficante apodado El Güero Jaibo.

En dicho informe se menciona por primera vez la existencia de un individuo con el nombre de Ignacio Coronel Villarreal. "El 21 de agosto de 1993, en Los Mochis, Sinaloa, la Policía Judicial del Estado acribilló en circunstancias poco claras a un sujeto llamado Juan Francisco Murillo Díaz (a) El Güero Jaibo, presunto gatillero de los hermanos Arellano Félix, que era perseguido en el estado de Sinaloa por diversos delitos, entre los que destacaba el homicidio calificado", dice textualmente el segundo párrafo del documento.

En ese mismo boletín se afirma que el 2 de noviembre de 1993 la Policía Judicial de Sinaloa capturó en Culiacán a una persona que se hacía llamar Dagoberto Rodríguez Jiménez, de 29 años, junto con 11 sospechosos armados que le escoltaban, entre los cuales, se supo después, había cinco comandantes y agentes de la PJF. La PGR identificó que Dagoberto Rodríguez era supuestamente Ignacio Coronel Villarreal. "Dagoberto Rodríguez portaba una credencial de la Secretaría de la Defensa Nacional que lo acreditaba como teniente oficinista del Campo Militar número 1 y de la Policía Judicial Militar, de la que traía una cachucha puesta", señaló el boletín.

La información fue tomada como cierta y por eso perduró el nombre de Dagoberto como alias de Nacho Coronel en la ficha que la SSP federal hizo de él en 2007. Un día después de su presunta muerte, los periódicos El Noroeste de Culiacán y La Jomada hicieron un hallazgo importante. Efectivamente, Nacho Coronel sí había sido detenido con esas 11 personas en noviembre de 1993, cuando se trasladaba en un convoy de tres vehículos con un arsenal, pero en aquella época fue fichado con el seudónimo de César Arturo barrios Romero, oriundo de Coatzacoalcos.Veracruz, no como Dagoberto Rodríguez Jiménez, quien por cierto sí estaba entre los detenidos con Nacho Coronel. 2 " Si en Sinaloa o en algún otro banco de huellas hubieran estado las de Coronel, estás habrían quedado registradas bajo el nombre de Barrios Romero, no de Rodríguez Jiménez.

El Io de agosto de 2010, el periodista Javier Valdés Cárdenas reveló en IMJornada: De acuerdo a la ficha 060100011426, los judiciales detuvieron a Coronel y a otras 11 personas, entre ellos varios agentes federales, cuando viajaban en tres vehículos y en posesión de un arsenal. Fueron enviados al penal estatal en Culiacán acusados de falsificación de documentos oficiales, delitos contra la administración de justicia, acopio de armas y asociación delictuosa.

Los informes de la i'oji; indican que Nacho Coronel, de barba cerrada y saco deportivo, se identificó c o m o César Arturo Barrios Romero, de 40 años, quien se dedicaba a la agricultura. El resto de los entonces detenidos eran David Serratos (Jutiérrez, Dagoberto 2H /•/ Noroeste, 31 de julio de 2010. y IM Jorinuhi, Io de agosto de 2010.

Rodríguez Jiménez, Jorge Zamora Gutiérrez y Alejandro Cháidez Villalobos, oriundos supuestamente de Guadalajara; José Luis Galeana Rosales, y los sinaloenses Armando Machado Coronel, de Guasave, y Jesús Antonio Rivera.

Lo anterior deja ver que el muerto del operativo del Ejército mexicano, a quien el gobierno federal pretendió identificar como Nacho Coronel, en realidad no era él. Así, la disyuntiva que nos queda es la siguiente: o no se analizó la fórmula dactilar, porque de antemano sabían que el cadáver era de otra persona, y sólo dieron el nombre de Dagoberto porque hacía años la PGR había cometido el error de identificar así a Nacho Coronel Villarreal, o el hombre que cayó acribillado era efectivamente Dagoberto Rodríguez Jiménez, cuya edad sí correspondería a la edad biológica del cadáver. De cualquier forma el difunto no era El Rey del Cristal. Gente cercana a la familia de Coronel aclaró al siguiente día de su supuesta muerte que todo estaba en orden.

Sin duda, México vive una oscura etapa en la cual parece que todo lo que sostiene el gobierno federal en materia de combate al narcotráfico debería ser interpretado en sentido inverso.

El pretendido cuerpo del narcotraficante pasó tres largos días arrumbado en la plancha fría del Semefo. Aparentemente, su hermana María de Jesús Coronel Villarreal fue a reclamar el cadáver oficial del capo y el de su sobrino, Mario Carrasco Coronel,(99) hasta el Io de agosto; el de Ignacio Coronel se lo entregaron sin hacerle una prueba de ADN, porque la dispensó la PGR. El supuesto Nacho y su sobrino, luego de un muy modesto funeral, quedaron enterrados en el panteón Jardines del Humaya, en Culiacán, el mismo donde yacen los restos de Marcos Arturo Beltrán Leyva.

Hoy El Chapo, El Mayo y El Azul están sentados en el trono de su imperio. Juntos han formado prácticamente un monopolio del narcotráfico en México y Estados Unidos, y lo han conseguido a costa de sangre, sudor y lágrimas. Su querido amigo y socio Ignacio Coronel Villarreal duerme el sueño del retiro o de la muerte.

Ese misterio, como el de El Señor de los Cielos, quedará seguramente como una leyenda urbana más, sin que se tenga una certeza sobre lo que pasó aquella tarde en Zapopan, Jalisco.

A estas alturas de la "guerra contra la delincuencia", los hombres de los tres capos ya saben el precio de la traición o la deserción. En 10 años, El Chapo, El Mayo y El Azul han acabado con sus principales enemigos: los Arellano Félix, Osiel Cárdenas Guillen, Marcos Arturo Beltrán Leyva, Edgar Valdez Villarreal, Sergio Villarreal Barragán, entre otros.

Pero los capos aún no pueden cantar victoria, la guerra todavía cobrará muchas vidas más. Héctor Beltrán Leyva, El Ingeniero, reza a sus muertos y entregado a la santería, según afirman, hace sacrificios de sangre por ellos mientras somete su alma a unos santeros que le hacen creer que tienen la fórmula mágica para ganar la contienda. Mientras tanto, Heriberto Lazcano, Verdugo, tampoco está dispuesto a dejarse aplastar.

Cumpliendo con la encomienda de Juan Camilo Mouriño de pacificar el país, el general X también buscó al cártel del Golfo.

Su reunión con Los Zetas pudo concretarse hasta marzo de 2009.

Cuando estuvo frente a Heriberto Lazcano Lazcano y a una escolta de capitanes desertores del Ejército, todos le hicieron un saludo militar, maniobra ridicula que enfadó sobremanera al general. El Z3 y lo que quedaba de sus muchachos no lo hicieron con aían de sorna, sino que se trató de una especie de gesto desquiciado por parte de individuos que ya perdieron el umbral de lo que es correcto o incorrecto, pero que en el fondo siguen creyendo que son parte del Ejército mexicano.

"¿Por qué mataron al general Enrique Tello [torturado y asesinado el 3 de febrero de 2009] en Cancún?", fue una de las preguntas del general a El Z3, Entonces el interrogado mandó llamar al zeta encargado de esa plaza.

Tello Quiñones era asesor externo del ex alcalde del municipio de Benito Juárez, el perredista Gregorio Sánchez Martínez, hoy preso acusado de delincuencia organizada y complicidad con los cárteles de la droga. El general Tello fue ejecutado junto con Juan Ramírez Sánchez, sobrino del alcalde.

El responsable de la ejecución habría contestado: "Lo matamos porque no cumplió, pidió quinientos mil dólares porque dijo que iba a ser el nuevo secretario de seguridad, después cerró ocho tienditas y luego pidió más dinero. Cuando se suponía que iba a recibir más dinero, lo matamos".

Al general X le incomodó la respuesta del obediente subordinado de Lazcano y terminó pidiéndole que bajaran la violencia.

El Z3 reconoció la peor de las pesadillas: Los Zetas controlaban 22 estados, pero había muchos grupos "satélites" que él ya no controlaba. Ése era sin duda el peor de los escenarios.

Cuando el general X se despidió del militar convertido en narcoterrorista, éste le envió dos mensajes al presidente Felipe Calderón. El enviado de Los Pinos los transmitió y se supone que le iban a llegar al mandatario a través de un familiar cercano. Nadie sabe si los recibió.

De acuerdo con fuentes del gobierno de Estados Unidos, una agencia de ese país tiene grabado un video del revelador encuentro entre el general X y El Z3 de varias horas de duración, presuntamente enviado por Los Zetas como prueba irrefutable, por lo ahí conversado, de la complicidad del gobierno de Felipe Calderón con el cártel de Sinaloa.

Tras la muerte de Juan Camilo Mouriño, el militar no volvió a ser recibido en Los Pinos ni en ninguna otra instancia de gobierno. El general Galván Galván nunca más le tomó la llamada.

¿Cuáles eran los mensajes del líder de Los Zetas al presidente Calderón? Acerca de eso el general X nunca habló.

Hoy por hoy Heriberto Lazcano sabe que sus antiguos jefes del cártel del Golfo y sus viejos enemigos del cártel de Sinaloa realizaron en los últimos días de septiembre de 2010 un nuevo concilio en la ciudad de México al que asistieron El Mayo, lil Chapo, El Azul y representantes del cártel del Golfo. El tema central fue la necesidad de eliminarlo a él y a los incontrolables Zetas.

Felipe Calderón Hinojosa terminará su gobierno en diciembre de 2012. Su mandato quedará grabado en la memoria colectiva y en las hemerotecas como el sexenio de la muerte y la corrupción.

Aún no está definido oficialmente quién será el temerario panista que quiera sucederlo, pero desde hace meses hay un hombre de toda su confianza que, pese a todo, suspira con esa posibilidad: Genaro García Luna, el oprobioso secretario de Seguridad Pública.

Se afirma que García Luna y sus muchachos ya no saben para dónde hacerse. El gobierno de Estados Unidos tiene la mira sobre ellos. Dicen que el secretario busca un refugio pero que no lo encuentra, ni siquiera con los empresarios a quienes tanto ayudó este sexenio, como la familia Slim, por lo que una posición política pudiera ser una excelente salida a sus compromisos y temores.

Un arma a su favor y en beneficio del presidente Calderón podría ser Edgar Valdez Villarreal, La Barhic, a quien antes la MI ayudaba a cazar Zetas. Su captura ocurrió por un presunto acuerdo. El capo sería un trofeo del gobierno panista a cambio de que todos sus bienes y cuentas queden a salvo —lo que más le importa a los narcotraficantes—, que se salvaguarde su vida, y que su caso judicial sea lo suficientemente endeble para no preocuparse.

Dicen que para garantizar el cumplimiento del trato La Barbie guardó y repartió celosamente pruebas fehacientes de la colusión del gobierno federal con un grupo de narcotraficantes.

La razón detrás del acuerdo era que La Barbie estaba profundamente debilitado sin el auxilio de su amigo El Indio. Se sentía ya muy acosado por sus enemigos, sobre todo por Los Zetas. Su trato con Heriberto Lazcano nunca fue bueno, y no había lugar para dos sicarios con similar fuerza en una misma organización.

Marcos Arturo terminó eligiendo a El Z3. La relación de Valdez Villarreal con Héctor, El Ingeniero, tampoco estaba en buenos términos, además de que el tufo de la traición lo perseguía desde la muerte del mayor de los Beltrán Leyva.

Quienes conocen a La Barbie afirman que en las imágenes editadas que se transmitieron en los medios se le ve mucho más relajado que en sus últimos días de libertad, cuando se puso a arreglar algunos pendientes legales antes de su "captura". Su megalomanía fue satisfecha gracias a los buenos oficios de García Luna y su equipo, quienes se mostraron muy dispuestos a servir a un hombre al que se le atribuyen centenas, quizás miles de muertos.

Así, el gobierno federal consiguió su propia arma mortal, una especie de Carlos Ahumada pero versión narco. Dicen que el sicario podría ser utilizado como instrumento político contra el gobernador priísta del Estado de México, Enrique Peña Nieto, y contra el jefe de gobierno del Distrito Federal de extracción perredista, Marcelo Ebrard, con miras a las elecciones de 2012. Se afirma que La Barbie tiene información poderosa que delataría la complicidad de ambos gobiernos con la organización criminal a la que pertenecía.

¿Quién lo hubiera dicho? De la noche a la mañana pareciera que la La Barbie se convirtió en lo que nunca quiso ser: un soplón.

En los últimos años, el sicario solía comentar que si alguien quería entender bien a bien el mundo del narcotráfico tenía que leer El cártel de Los Sapos, además era seguidor de la serie televisiva que produjo Telemundo basada en el libro. Se trata de una saga autobiográfica de Andrés López, miembro del cártel colombiano del Norte del Valle, cuyo eje es la historia de un niño casi adolescente que por ambición ingresa en el mundo del narcotráfico, donde adoptó el apodo de El Fresa. Ahí sufre traiciones de sus amigos, persecuciones de sus enemigos, y más tarde se ve implicado en las complicidades del gobierno. Una historia muy parecida a la de La Barbie, quizás por eso era fan.

El futuro es incierto. El gobierno de Estados Unidos tiene la alerta roja encendida por la creciente violencia que ya traspasa sus fronteras, mientras que el ex presidente Vicente Fox, empujado por una fuerza invisible, ha comenzado una extraña campaña en la que promueve directamente el "diálogo" con los criminales y la legalización de la producción, comercialización y distribución de las drogas hasta ahora ilícitas, quizás como parte de los compromisos adquiridos en su gobierno con el crimen organizado.

La era de 1:1 Chapo perdurará hasta que él quiera. Hn su clan se afirma que ya está arreglando svi jubilación, por lo que no sería raro que súbitamente apareciera "muerto" en algún "exitoso" operativo como su amigo Nacho. O tal vez ahora, aunque no lo quiera, el negocio le exija quedarse más tiempo al frente de la empresa criminal, mientras su sucesor se gana la confianza de socios y cómplices de uno y otro lado de la frontera.

En las filas de la delincuencia se advierte que las reglas del juego se están volviendo más estrictas. Ahora los capos van a matar a sus esbirros ante el menor titubeo, previendo la traición, y habrá muchos funcionarios públicos muertos, dijeron en agosto de 2010, con pavoroso acierto, fuentes ligadas al crimen organizado.

En México se respira una tensa calma. Los hombres que se alimentan de dolor y sangre reacomodan sus fuerzas. Los números de ejecutados van a la baja, pero sólo de manera temporal, es probable que muy pronto regrese la tormentosa guerra que tiene al país sumido en una larga noche de corrupción e impunidad.

Sobre el combate al narcotráfico, Edgardo Buscaglia concluye de forma contundente: Yo no tengo ninguna prueba de que el presidente personalmente esté protegiendo a El Chapo Guzmán, pero el sistema que él preside sí lo está haciendo. Lamentablemente hay un problema de negligencia. Nadie está acusando al presidente y asignándole una responsabilidad penal por proteger a El Chapo Guzmán. Pero su sistema, la SSP federal, y una parte del Ejército que sigue contaminado por esta lucha mal concebida, sí están en una situación de proteger a ciertos grupos y de atacar más a otros.

Por una u otra razón, el presidente y su política están causando, por omisión, las muertes de soldados, policías y ciudadanos. Todo debido a la negligencia de 110 aplicar las mejores prácticas que Colombia o Italia han ejercido. Y esa negligencia es imperdonable, la historia y el pueblo mexicano jamás se lo van a perdonar.

Esto tiene que parar, y los únicos que pueden cambiar el escenario son los ciudadanos. Mientras los señores del narco siguen sumando sus pingües ganancias en la sierra, en sus curules o en los bancos, en medio de este paisaje de desolación y muerte que sustituye poco a poco las estampas más bellas de nuestro país, alguien tiene que informarles que ellos por sí mismos no son invencibles, los hace invencibles su red de protección política y empresarial.

La terrible situación puede llegar a su fin si la sociedad mexicana se une contra esa gran mafia venciendo el temor, la indiferencia, pero sobre todo la tácita aceptación de que las cosas no pueden ser distintas.