EPILOGO

Durante mucho tiempo, Ana no pudo olvidar aquella pesadilla. Había amado a su padre más que a nada en el mundo. Y ella estaba segura de que fué Brad quien lo mató, como Mike Monagan lo hiciera con Gastón Keane. Pero ella era una mujer.

La vida nueva en la comarca fué cambiándola poco a poco. Hunter habíase casado con María. Ana iba a hacerlo muy pronto con Keane, por lo que finalizaba la rivalidad que un día hubiera entre los Keane y los Watt.

Y cuentan que el rancho prosperó, que aquellos seres que habían luchado por la verdad y la Justicia, hallaron el premio merecido. No obstante quedaba en el recuerdo de todos los nombres de los valientes que habían caído en la pelea contra los bandidos. Aquellos fueron los forjadores de una región donde, constantemente, había soplado el viento de la muerte.



FIN