SERGIO CAMARATTA, UNO DE LOS INTOCABLES

ESTE ex oficial fue, sin proponérselo, quien puso al descubierto toda la organización delictiva que funcionaba en la costa atlántica. Fue el primero que despertó sospechas por sus gastos desenfrenados, por cómo prestaba sus múltiples tarjetas de crédito sin control, por los intentos de soborno que nadie se animaba a denunciar. Camaratta dejó expuesta la conducta policial de la provincia de Buenos Aires.

En el momento de su detención, se desempeñaba como jefe del Destacamento de Valeria del Mar. Según los vecinos de Pinamar, cada vez que surgía un problema en la comisaría de Gómez, Camaratta era el encargado de resolverlo: "En muchas oportunidades fui a la comisaría a realizar alguna denuncia y me obligaban a esperar. Enseguida aparecía Camaratta y me prepoteaba, obligándome a retractarme, o en el peor de los casos me amenazaba diciéndome que la iba a pasar muy mal y que no me hiciera el pícaro (sic)".

Esta denuncia anónima, como tantas otras de similar naturaleza, no se hizo pública por el temor de las víctimas a la venganza de los policías involucrados. Ese miedo no ha desaparecido aún porque los pobladores sostienen que la Banda de la Costa no está desarticulada.

Según sus antecedentes, Camaratta fue denunciado en 1995 por estafa en Pinamar, cuando el entonces jefe del Destacamento de Valeria del Mar compró un automóvil 0 km y, una vez en su poder, habría "olvidado" pagarlo. No obstante ello, continuó al frente de la dependencia policial.

Esta denuncia fue radicada el 26 de julio de 1995 en la comisaría de Pinamar, y recepcionada por los entonces jefes Alberto Pedro Gómez y Gustavo Prellezo. Por supuesto, nunca prosperó.

Al poco tiempo el caso se informó a las autoridades de la Unidad Regional de Dolores, pero no ocurrió nada. Finalmente quedó radicada en el juzgado a cargo de José Luis Macchi, con el número 53.590. En esta nueva instancia los denunciantes tampoco obtuvieron ninguna respuesta.

A mediados de 1996 se entrevistaron con el entonces subjefe de la Policía Bonaerense, comisario general Norberto Padilla, sin resultados, y como llevaban ya más de un año de vanos intentos, decidieron ir más arriba: acudieron a quien en esos momentos era el secretario de Seguridad de la Gobernación, Alberto Piotti. Pero tampoco consiguieron una respuesta.

Justamente Piotti está sospechado de haber protegido o, por lo menos, de haber hecho la vista gorda frente a las actividades delictivas que sucedían ante sus narices. Por esta razón debió abandonar la Secretaría de Seguridad en agosto de 1996.

A raíz de las irregularidades cometidas durante la primera etapa de la investigación del asesinato de José Luis Cabezas, a principios de febrero último Sergio Camaratta fue destituido junto a otros once oficiales. Fue detenido y está procesado como presunto partícipe primario del homicidio del fotógrafo.

Según varios vecinos de Valeria del Mar y Pinamar, era uno de los oficiales que manejaba todos los negocios de la costa.

Según los investigadores, Sergio Camaratta habría ordenado cerrar todos los boliches de Valeria del Mar la noche del 24 de enero.